Coronda (C).- Alumnos de los años 8º y 9º de la escuela Nº 310 conocida como Campo Engler tienen a su cargo la administración de la cooperadora escolar que, desde el año pasado se dedica a la industrialización de berenjenas, hortaliza abundante en la zona.
Un productor que tiene su quinta en las cercanías de la escuela realizó con este fin una importante donación del fruto así como calabazas, ajíes y tomates.
Los alumnos son capacitados en forma práctica por un empresario de la zona, José Aguaisol, quien desinteresadamente garantiza la calidad del producto que sale al mercado. En forma teórica, por la profesora Sandra Parra, asesorados siempre por la directora del establecimiento, Mariel Mosconi de Ceratto.
La fábrica de alimentos conservados que tiene a su cargo la Cooperativa Escolar Campo Engler fue llevada a cabo gracias al apoyo económico del grupo Juntos para Sumar y las Madrinas de Escuelas Rurales con sede en la ciudad de Buenos Aires.
Este proyecto escolar que hacer tres años nació como una esperanza es hoy realidad feliz para muchas familias, que se ve reflejada en los rostros sonrientes y emocionados de quienes agradecen especialmente a Aguaisol, el empresario que generosamente orienta a los alumnos para que trabajen según las exigencias e higiene de las grandes fábricas.
Con este proyecto disminuyó en una alto porcentaje el ausentismo y la deserción escolar en el establecimiento. Los alumnos están en la escuela la jornada completa y tienen la posibilidad de desarrollar aptitudes en una cooperativa de conservas que genera una fuente de ingresos a sus hogares y los prepara para una salida laboral.