Después del partido, Ariel Pereyra dijo que "es difícil jugar así, ya que hay gente que quiere que a Colón le vaya mal. A mí no me importa porque soy un mediocre jugador, pero hay chicos a los que hay que apoyar".
Un sueño del presidente José Vignatti es que el próximo encuentro, ante Gimnasia de La Plata, se pueda jugar en el estadio Brigadier López. Es que tal partido será el número mil de Colón en primera división, para lo cual lo ideal sería preparar los merecidos festejos en el reluciente estadio. Sin embargo, es muy difícil que el ingreso por Juan José Passo esté restaurado, así que una de las opciones a analizar sería que la totalidad de los hinchas ingrese por el barrio Centenario.
Un rumor que circuló con mucha fuerza en la zona de vestuario del Presbítero Grella está referido a las pretensiones que tiene San Lorenzo para comprar el pase de César Carignano. Los dirigentes "santos" harían sondeos por Colón para conocer el monto que pretende el club santafesino, ya que la idea es reemplazar con el prometedor juvenil al veterano goleador Alberto Acosta, que amenazó con retirarse a mediados de año.
Precisamente, uno de los momentos más esperados se vivió antes del inicio del cotejo, cuando Julio César Toresani y el "Beto" Acosta se saludaron con afecto durante un buen rato. Es que ambos compartieron su inicio futbolístico en Unión, adonde el volante debutó en 1987 y el delantero un año antes.
Incluso, en una de las primeras acciones del partido cayó lesionado el "Huevo" y fue Acosta quien se acercó presuroso para levantarlo y reclamarle sonriente que no se tire sin fundamentos.
También antes de comenzar el partido el vicepresidente de Colón, José García, le entregó en nombre de toda la Comisión Directiva una plaqueta a Osvaldo Percia, titular de Patronato, en agradecimiento por la cesión de las instalaciones y el buen trato que tuvieron con el club santafesino, que vivió con la inundación uno de los peores momentos de su historia.
Una situación inusual se vivió a los 18 minutos del primer tiempo, cuando el árbitro Daniel Giménez decidió suspender el partido porque una tercera pelota se fue a la tribuna lateral de Colón y no fue devuelta por el público. El encuentro estuvo parado un minuto, hasta que el hincha arrepentido sintió la presión del resto del estadio y decidió devolver el esférico a la cancha.
Cuando se cerraba el cotejo el cántico se hizo escuchar de boca de la mayoría de los muchos simpatizantes rojinegros en el estadio: "Andáte Bauza, la p... que te parió", gritaban sin tapujos. Cuando finalizó el partido fueron muchos los que se agolparon en el tejido lindante al banco de suplentes para confirmar su disconformismo. Los jugadores tampoco se fueron sin recibir improperios por parte de la hinchada.