El rosarino Diego Lo Grippo, el ala pivote de Atenas de Córdoba y una de las figuras de la fase regular de la Liga Nacional de básquetbol, afirmó que ésta ha sido su mejor Liga y destacó que "espero ser campeón con Atenas".
El jugador de 25 años de edad, que llegó a Atenas, en la presente temporada, expresó en diálogo con Télam, que "sin dudas que es mi mejor año en la Liga -debutó en 1996 en Ferro y la 2001-02 estuvo en Estudiantes de Olavarría- por la continuidad que tengo, que en otros torneos no se me dio, por lesiones que tuve y no pude demostrar que podía jugar en un gran nivel".
Agregó que "no tuvimos un buen comienzo, pero a partir de la llegada del "Huevo' Sánchez levantamos el nivel y terminamos segundos. Espero ser campeón con Atenas".
"Cuando yo llegué a Atenas, lo hice con la ilusión de retener el campeonato -recordó-, y con mucha confianza, pero de entrada las cosas no nos salieron bien, porque tuvimos muchos lesionados, como saben todos y eso hizo que el equipo no estuviera un ciento por ciento y por eso estuvimos décimos".
Prosiguió recordando la campaña cumplida, también cómo se logró salir del "pozo" y escalar posiciones. Fue con "mucho esmero y con la llegada del "Huevo' Sánchez, el equipo fue mejorando y bueno, ocupó el lugar que nos merecíamos".
Comparando al actual entrenador con Horacio Seguí, que fue técnico al comienzo, Lo Grippo dijo que "con Sánchez entrenamos mucho más, con mayor dedicación porque entendíamos que éste es un equipo muy joven y necesitaba entrenar y conocerse bastante para afrontar esta Liga, porque además la mayoría éramos jugadores que no estuvimos en años anteriores".
"A eso nos abocamos y nos dedicamos de lleno a entrenar sin pausa y sin descanso ni para las Fiestas -continuó- en busca de la química de equipo que no habíamos tenido con Horacio, quien pensaba que por ahí entrenando menos y haciendo jugadas más específicas, el equipo lograría buen rendimiento, pero eso no sucedió, y lo que faltaba era más trabajo como impuso Sánchez".
Del "Huevo" Sánchez, resaltó que "está más cerca del jugador e intenta aprovechar las condiciones de cada uno en un ciento por ciento, porque de esa manera entrena y lo siente así al básquetbol".
Destacó que "la meta que nos pusimos tras el mal comienzo, primero era meternos entre los ocho, pero después de ganar once partidos consecutivos, nos dimos cuenta, con el correr de los juegos, de que estábamos haciendo las cosas bien, en respuesta a todo el trabajo que habíamos hecho, que era meritorio y nos estaba dando las satisfacciones que queríamos".
"Tras esa seguidilla de triunfos, pusimos al equipo entre los cuatro primeros, y el segundo puesto final que logramos nos vino como anillo al dedo, que a lo mejor era algo impensado, pero ahora desde esa posición logramos la confianza, para a partir de ahora pelear el campeonato".
Manifestó sentirse "a gusto en Atenas", club "donde sólo uno debe preocuparse en jugar, porque todo lo otro está bien organizado; estamos al día con los sueldos y eso da tranquilidad para dedicarse al deporte sin problemas".
Sobre su posición en la cancha, señaló sentirse "cómodo, en esa posición, porque es lo que siempre he hecho, jugando como un alero grande, con 1,98 metros de estatura. Estoy muy bien físicamente".
Ante la posibilidad de alguna convocatoria por parte de Rubén Magnano para integrar el seleccionado nacional, indicó que "es la ilusión de todo jugador, pero uno entiende que éste es mi primer año jugando como goleador y con buenos números (promedio 16.9 puntos por juego), uno sabe además que hay muchos jugadores en Europa en un nivel superior. Yo no descarto la posibilidad, que significaría un logro muy importante y coronar un año redondo, si me toca".
"De todas maneras, me siento muy conforme con mi desempeño en Atenas, y de que al club las cosas le estén saliendo bien, también lo pone orgulloso a uno", aseveró.
Ante una consulta de si tiene pensado ir a jugar al exterior, sostuvo que "es muy difícil, yo sé que por ahí puede existir la posibilidad, pero tomar la decisión de dejar el país es un paso muy importante; no cualquiera lo puede hacer y a mí que soy muy apegado a la familia se me hace muy difícil, y como estoy muy conforme en Atenas, por ahora no he pensado en eso".
Sin embargo no descartó de si hay una buena oferta económica "lo pueda tener en cuenta", concluyó.