Cumbre de la música argentina con dos figuras emblemáticas
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La cantante folclórica Mercedes Sosa y la pianista clásica Martha Argerich, dos de las artistas argentinas de mayor trascendencia en todo el mundo, compartieron ayer en un colmado Teatro Colón de Buenos Aires su primera actuación conjunta en el marco del Festival Argerich/Punto de Encuentro Buenos Aires 2003.
El esperado evento tuvo lugar durante la segunda parte de un programa musical que acompañó el singular acontecimiento y que no alcanzó a despejar las dudas sobre las fronteras que separan a la música culta de la popular.
Juntas, las dos emblemáticas figuras del arte argentino, interpretaron tres piezas de música popular con arreglos del músico, periodista y director del Colón, Gabriel Senanes.
El piano de Argerich y la voz de Sosa, dos emblemas de una cultura argentina que trasciende más allá del medio local, se encontraron para versionar la zamba "Allá lejos y hace tiempo" (de Ariel Ramírez y Armando Tejada Gómez), "La canción del árbol del olvido" (de Alberto Ginastera) y "Las cartas de Guadalupe" (de la dupla Ariel Ramírez-Félix Luna).
La reunión Sosa-Argerich en el ámbito del máximo coliseo argentino, simbolizó, al margen del resultado artístico del escueto vínculo escénico, una síntesis de excelencia que pudo ser gozada por el público argentino que saludó el gesto entregando la máxima ovación de la tarde en el momento en que ambas artistas se abrazaron al filo del escenario.
Las dos creadoras aprovecharon el acercamiento y los vítores, a su vez, para aplaudir al músico y compositor Ariel Ramírez, que estaba ubicado en la sexta fila de la sala.
Después de ese pico de emoción, a Sosa y a Argerich se le agregó la Camerata Bariloche para abordar "El alazán", de Atahualpa Yupanqui (que la folclorista ya había compartido con el conjunto camarístico) y "Alfonsina y el mar", de Ariel Ramírez y Félix Luna.
El programa musical en el ciclo organizado por la Fundación Teatro Colón y presentado por la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad, se inició con el expectante recogimiento de los cuatro movimientos de "Concerto per corde, Opus 33", de Alberto Ginastera, a cargo de la Camerata Bariloche.
Con la inclusión del guitarrista y autor Eduardo Falú, el concierto incluyó la transcripción para orquesta de cuerdas de Oscar Cardozo Ocampo y la "Suite argentina", para guitarra, cuerdas, corno y clave; dos composiciones del artista tucumano que lucieron su imponente recorrido por la música nativa.
"Siento un gran placer en tocar con esta magnífica Camerata estas obras que hicimos juntos", apuntó el aplaudido Falú que en seguida anunció: "Le voy a dedicar una tonada a esta altísima dama del piano (en alusión a Argerich)" y se lanzó a cantar y tocar a una versión en solitario de la bella "Tonada del viejo amor".
Tras un intervalo, Mercedes Sosa -íntegramente vestida de negro- y el guitarrista de su grupo Nicolás "Colacho" Brizuela -de sobrio smoking- abordaron con probada solidez "Zamba de Argamonte", de la dupla Gustavo "Cuchi" Leguizamón y Manuel Castilla; y "Guitarra, dímelo tú", de Atahualpa Yupanqui.
Posteriormente, la Camerata Bariloche y Mercedes Sosa animaron otro segmento del espectáculo compartiendo la zamba "La tempranera", de Carlos Guastavino y León Benarós; el logrado ensamble en "Como pájaros en el aire" para hablar, como dice el tema, de "lo cotidiano que se vuelve mágico"; "El alazán", de Atahualpa Yupanqui; y el caluyo "Doña Ubensa", de Gustavo "Chacho" Echenique. (Télam)