Paraná (enviado especial). - Magnífica jornada hípica vivió ayer el hipódromo Almafuerte de Paraná: la tarde contó con una gran concurrencia que rondó los siete mil espectadores, marcando el buen momento de la hípica en la zona, pese a los enormes problemas económicos y financieros de los Jockey Club.

El suceso del Almafuerte se debe en gran medida a la muy buena difusión previa de la jornada y también al excelente trabajo que vienen realizando las personas que desde un par de meses están a cargo del hipódromo, que ayer lució muy bien presentado y con carreras de un excelente nivel. Con todo el trabajo que se viene realizando, los frutos están a la vista.

Oporto Seba salió ayer a la arena del Almafuerte siendo perdedor y se enfrentó ante ejemplares con muchos pergaminos, que a priori prometían más de lo que a la postre mostraron. El humilde Oporto Seba, muy bien piloteado por Roque Rivero ganó a lo bueno la carrera más importante del calendario entrerriano.

Se ordenó la partida y enseguida L'Artic trató de enseñar el camino, mientras por el exterior Vadillo accionaba segundo, delante de Mi Daemona; Dorian Rak, El Taquito, Gleamtime, Oporto Seba y West Frow.

Giraron el codo y Dorian Rak aventajaba por dos cuerpos a Vadillo, que sorpresivamente erró manos y dio por tierra a Rodolfo Ramírez, mientras en el fondo del lote, West Frow y Luciano Avanzatti corrían la misma suerte.

Decididamente, Argentino Moglio puso adelante a Gleamtime, mientras por dentro L'Artic se acomodaba segundo, delante de Dorian Rak, El Taquito, Oporto Seba y Mi Daemona.

Antes de ingresar al codo final, Gleamtime luchaba al frente con Vadillo que venía sin su jinete, en tanto L'Artic y Dorian Rak accionaban un par de cuerpos más atrás.

En el codo, Gleamtime estiró a tres cuerpos su ventaja, ya que L'Artic empezaba a perder fuerzas, mientras Dorian Rak, era perjudicado por Vadillo que corría en zig zag y buscaba el exterior; desde atrás Oporto Seba se arrimaba con fuerza.

Por el exterior, buscó Moglio con Gleamtime, mientras al centro embaló Rivero a Oporto Seba, quedando Mi Daemona un poco más atrás, mientras Dorian Rak se recuperaba del codo.

En los 300 finales y ante la sorpresa de la mayoría, Oporto Seba empardó a Gleamtime, para comenzar a superarla de a poco, llegando a cortar luz cuando faltaban 150 metros para la sentencia. De atrás, Dorian Rak apuraba, pero ya no podía alcanzar al del stud Quebracho que lograba un cuerpo y medio a su favor, mientras la puntera Gleamtime se quedaba tercera a la cabeza.

Para destacar el muy buen trabajo de Eduardo Argañaraz, presentando en óptimo estado al hijo de Oporto, que ganó a lo bueno mostrando una enorme categoría. Es doble el mérito al considerar lo arriesgado que resultaba anotar un ejemplar perdedor, ante rivales de una gran categoría. El trainer entrerriano se animó y las cosas le salieron redonditas.

El experimentado Roque Rivero fue a Paraná sin monta. Allá le ofrecieron a Oporto Seba, un perdedor que se animaba en el Santo Patrono... Cuando muy pocos lo esperaban el del stud Quebracho se quedó con todos los honores.

-Ésta es una gran alegría para nosotros los santafesinos, no tenemos carreras en Santa Fe y por eso estamos corriendo

mucho en Rafaela y acá en Paraná. El Almafuerte para mí es muy importante, ya que cuando nos inundamos nos cobijó. Acá estuve más de dos meses y me hice de muchas amistades. Además hoy (por ayer), me pasa algo increíble: venir sin montas a Paraná y encontrarme con este caballo, para ganar la carrera del año.

-Te sentiste local en Paraná...

-Sí, fui local, además, el cuidador -Argañaraz-, que hoy me dio la monta, fue quien me brindó boxes y el stud cuando vinimos en la inundación. Un tiempo atrás con este mismo caballo perdí una carrera increíble entre perdedores, donde le reconocí al cuidador que la había regalado. Hoy cuando me bajé del caballo me dijo: "Viste que siempre hay revancha". Pasé de regalar una carrera de perdedores, a ganar el San Miguel.

-Te notamos muy emocionado...

-Hoy (por ayer) se me cayeron lágrimas, he ganado muchas carreras, pero lo que hoy viví fue realmente muy distinto a todo lo anterior.

-Se te simplificó todo en el trámite de carrera...

-Yo tenía instrucciones de correrlo de atrás y sacarlo afuera en el derecho, el cuidador me dijo que lo vea, que el desarrollo era todo mío. Se presentó con una buena largaba, después me quedé quinto o sexto, la carrera se hizo ligera y quedé muy lejos. Pero despacito lo fui arrimando. En los 800, vi que mi caballo cambió de manos y enseguida se puso a tiro de la punta.

-Parecía que no alcanzabas a Gleamtime...

-Sí, pero en los 300 la igualé y en los 200 la pasé de largo; después empecé a rezar para que aparezca el disco, gracias a Dios apareció y pude ganar. Le quiero agradecer en mi nombre y el de mis compañeros santafesinos, a la comisión del Almafuerte, que cuando

tuvimos la desgracia de la inundación nos brindaron todo.