El municipio comenzó a ejecutar un total de 7 lomos de burro -4 en una mano y 3 en la otra- sobre la avenida Aristóbulo del Valle entre la altura del 10200 y el 10600, donde el lunes pasado un grave accidente de tránsito se cobró la vida de Ivana Franco, una adolescente que circulaba en bicicleta junto a otras dos chicas.

Ese fue el acuerdo al que llegaron los representantes de la comunidad vecinal, escolar y parroquial del barrio Altos del Valle con el municipio. Tras el desafortunado hecho, los vecinos habían salido a cortar la avenida y a exigir soluciones concretas a la inseguridad en materia vial. Las medidas a tomar fueron consensuadas en dos reuniones con funcionarios municipales.

Tras el acuerdo alcanzado, operarios iniciaron ayer las tareas para la ejecución de los lomos de burro que estarán ubicados a una distancia de 100 a 120 metros uno del otro.

En el sentido sur-norte (saliendo de la ciudad) se colocarán cuatro: uno a la altura del 10200, otro en la intersección con calle Los Nogales, un tercero en Los Cedros y el último a la altura de calle Los Paraísos. Cien metros antes del primer regulador de velocidad se construirá un pianito y se instalará una baliza intermitente a la altura del primer lomo de burro para señalizarlo.

En tanto, en el sentido norte-sur (entrando a la ciudad) se instalarán otras tres lomas: una antes de calle Los Cedros, otra pasando Los Nogales y una tercera antes de calle Los Pinos. También en este caso estarán previamente señalizados por un pianito y una luz intermitente (Ver croquis)

"En una segunda etapa la idea es colocar una baliza por cada uno de los 7 lomos de burro", detalló el secretario de Planeamiento, Luis Amavet.

Los vecinos de la zona controlaban de cerca el trabajo de los operarios y se mostraban satisfechos con esta mejora. "Esperemos que con esto terminen los accidentes y las muertes", expresaron a El Litoral.

El funcionario municipal dijo que la colocación de estas lomas es una "medida drástica" dirigida a "reducir la velocidad que levantan los conductores porque a esta avenida la estaban utilizando como ruta y no se respetaban los carteles indicadores de menor velocidad".

Si bien reconoció que los lomos de burro "son obstáculos que se colocan en la arteria" y, en cierta forma, "un contrasentido desde la ingeniería vial que dice que una vía debe tener la capacidad de absorber el tránsito en forma fluida", aseguró que debió adoptarse esta solución extrema "por la irresponsabilidad de los conductores que no bajaban la velocidad" al circular por esta zona poblada.

Por otra parte, desde la Secretaría de Obras Públicas se dio respuesta a otro reclamo de los vecinos como es la refacción y restitución de luminarias averiadas, tarea que ya se culminó. También se hacía el bacheo en sectores deteriorados del pavimento de Aristóbulo del Valle.

Además, inspectores de tránsito están apostados en el lugar cumpliendo funciones de control.

Alumnos del 9° año de la Escuela N° 690 Lucía Aráoz, de la localidad de Angel Gallardo hicieron público un pedido para que sea entubado el zanjón sobre Aristóbulo del Valle y su continuación, la ruta 2, hasta Av. de Los Quinteros (donde está el establecimiento) y para que allí se construya una ciclovía.

"A diario muchos de nosotros concurrimos desde Santa Fe en bicicleta al establecimiento y nos sentimos expuestos al peligro", expresa una carta que firman los alumnos y la docente a cargo.

"El accidente ocurrido el día 20 de octubre en Altos del Valle, que dejó a una adolescente muerta, podría haberse evitado", señala el texto que hicieron llegar a este diario, y concluye en un deseo: "ver estas obras realizadas es demora para nuestra seguridad y la de todos".