Opinión: OPIN-03 El padre del pop art conquista a Europa
Por Gloria Torrijos


La primera gran retrospectiva del pionero y uno de los principales exponentes del Pop Art, el estadounidense Roy Lichtenstein (1923-1997), muestra hasta el 7 de marzo en Viena 45 pinturas, dibujos y una selección de obras de impresión gráfica que en su mayoría no habían sido hasta ahora expuestas en Europa.

Sus famosos cuadros al estilo de cómics, de los que sobresale la serie sobre mujeres de la década de los '60, conocida como "Girls", constituyen el centro de la exposición, que ha recibido obras del controvertido artista plástico procedentes de la fundación que lleva su nombre, de numerosos museos europeos y de colecciones privadas.

También centran la exposición sus paráfrasis de la historia del arte, como las que hizo de los "montones de heno" que realizó entre 1988 y 1991 el impresionista francés Claude Monet, inspirándose en un campo situado cerca de su casa, en Giverny, para mostrar los infinitos cambios que el tiempo ejerce sobre la Naturaleza.

Lichtenstein también ironizó, con sus interpretaciones, sobre obras de Pablo Picasso, Piet Mondrian, Fernand Léger y Paul Cézanne.

Igualmente, destacan las obras de Lichtenstein basadas en dibujos chinos de los siglos XII y XIII, sus "Espejos" e "Interiores" y sus últimas creaciones, en las que evoca sus orígenes.

Junto a ese universo de Lichtenstein, conocido ya por el gran público, la exposición de Viena permite adentrarse en otros aspectos de su personalidad, como su amor al jazz, que lo llevó a los 70 años a aprender a tocar el saxofón.

En relación con esa pasión musical, en la exposición se puede escuchar un disco compacto bajo el título de "La música de Roy Lichtenstein" en el que, junto a las grandes figuras del jazz, interpreta los temas favoritos del ícono del arte pop, y se lo puede escuchar a él en tres títulos.

Para Ingried Brugger, directora de la sala que presenta la retrospectiva, el Kunst Forum, Lichtenstein marca "el nacimiento del Pop Art".

En este sentido, Bruegger ha llamado la atención sobre que el principal galerista de artistas de Pop Art, Leo Castelli, colgó cuadros de Lichtenstein en 1962, antes que los del otro máximo representante de esa corriente, el también estadounidense Andy Warhol.

La exposición permite ver la evolución de Lichtenstein, quien, según críticos españoles, influyó poderosamente sobre el arte español de los años '60, en concreto en el Equipo Crónica.

Nacido en Nueva York el 27 de octubre de 1923, estudió en la Liga de Estudiantes de Arte de esta ciudad y en la Universidad de Ohio, donde posteriormente impartió clases. En sus comienzos, trató temas de los años '20, algunos específicamente estadounidenses, como vaqueros e indios. A partir de entonces, el artista produjo muchas de las obras más conocidas de ese movimiento que se inspiró en la cultura y medios de comunicación de masas.

Las piezas artísticas de Lichtenstein son como tiras de tebeos gigantescas, pintadas con colores primarios y con una técnica que imita un estilo barato y primitivo de imprenta.

Los envoltorios de productos de consumo cotidiano, como helados, golosinas y refrescos, así como anuncios publicitarios, constituyen, asimismo, los argumentos de sus pinturas y esculturas.

Con exageraciones y redefiniciones de esos elementos banales de la vida cotidiana, el autor subrayó su apariencia impersonal.

El multidisciplinar artista supo, según los críticos, sintetizar la idea del Pop Art y articular un lenguaje inspirado en los medios de comunicación, la publicidad, el cine y el cómic.

Entre 1957 y 1960 atravesó un período en el que se aproximó a la abstracción lírica, pero en los años 60 comenzó a introducir en sus cuadros personajes de tiras cómicas como el ratón Mickey y el pato Donald.

En 1961, inició su serie de viñetas en gran formato, que fueron el punto de arranque para una etapa que continuó hasta 1964 y que se caracterizó por reproducir imágenes procedentes de las tiras cómicas, aisladas de su contexto y agrandadas desmesuradamente.

A mediados de los '60 empezó su producción de esculturas en bronce, pintadas parcialmente con colores vivos y representando objetos domésticos como teteras, tazas, mesas, casas o automóviles. (EFE).