Entre los múltiples factores que determinan el estado de salud se encuentran la calidad del aire que se respira, el tipo de alimentos y el agua que se ingieren, cómo se manejan los accidentes emocionales, las debilidades y áreas de aptitud naturales de cada individuo.

Por eso, la quiropraxia se basa en una premisa fundamental: todos los seres vivos tienen una sabiduría innata que se manifiesta como el principio organizador de la vida.

El cuerpo humano, increíblemente complejo y organizado, es la expresión de esa inteligencia. A la capacidad de curación que funciona para mantenernos sanos y superar lesiones o enfermedades, se la conoce como sabiduría del cuerpo, dios interior, inteligencia innata, lecciones recopiladas de la evolución, sabiduría de la naturaleza, mecanismos adaptadores homeostáticos, fuerza vital, energía de la vida, campos morfogénicos. Está con nosotros todo el tiempo, ya sea que estemos jóvenes o viejos, sanos o enfermos. Es la cualidad única de la vida de todos los seres vivos.

Si hay un mal físico que obstruye la expresión de esta virtud, nace entonces el malestar, la desarmonía, la falta de comodidad, integridad o salud, que prepara el escenario para los males y enfermedades de todo tipo. Se bloquean las energías naturales de la curación, disminuye la fortaleza, se reduce la resistencia a las enfermedades y se compromete la capacidad de adaptación a las tensiones de la vida.

Es lógico que cualquier tipo de estrés, ya sea físico, emocional o químico, produzca bloqueos en el sistema nervioso central, entonces se empieza a sentir incomodidad con el cuerpo o a padecer algún problema orgánico.

En estos casos, la quiropraxia puede ser de gran ayuda facilitando la eliminación de la tensión de los nervios de la columna vertebral.

El tratamiento quiropráctico comprende el examen de la columna vertebral y esto se hace de diferentes maneras según la determinación del especialista. Puede utilizar rayos X, pruebas musculares, palpación de columna -para ver si existen irregularidades-, movimientos o instrumentación que detectan zonas de calor o energía. Siempre lo que se busca son subluxaciones que producen tensión en los nervios espinales.

La quiropraxia también puede definirse como un sistema de ajuste manual de los distintos componentes de la columna vertebral, sólo para la corrección de la causa de la enfermedad. Este ajuste es una conjunción de fuerzas dadas por un quiropráctico en el momento y en el lugar exacto y en la dirección adecuada para corregir la subluxación. Esto permitirá, una vez finalizado el tratamiento, que el cuerpo se mueva más naturalmente y que los nervios funcionen más eficientemente, lo que resulta indispensable para conseguir vitalidad, armonía, salud y, como conclusión fundamental, mejor calidad de vida.

Según el licenciado en quiropraxia Norberto Javier Gaitán, con ajustes suaves y precisos realizados con las manos, se logra localizar y eliminar las sublixaciones vertebrales, para restablecer el buen funcionamiento de los nervios, recuperando de tal manera, la fuerza y la belleza del organismo.

Esta disciplina se originó en Estados Unidos en 1895 y está absolutamente probada su eficacia. En ese país, es donde culturalmente este tratamiento está más asimilado como indispensable para el cuidado de la columna vertebral y se valorizan todas las consecuencias positivas que se obtienen desde la quiropraxia.

Así como es necesario concurrir al odontólogo para que los dientes estén saludables, lo mismo se debe hacer con el sistema vertebral, es decir, cuidarlo. Es importante tener en cuenta esto, puesto que el eje vertebral es el centro vital del organismo que conecta al cerebro con cada célula a través de una red de fibras nerviosas. Si la columna que cuida este recorrido no está saludable, es imposible que el resto del organismo sienta bienestar.

En el mundo de los negocios, el deporte de alta exigencia o cualquier otro ámbito de la vida cotidiana donde una persona pueda sentir cierto desgaste y alteraciones físicas producto de alguna exigencia, se originan situaciones que complican cualquier actividad corporal. Para superar estos inconvenientes, una atención del arte quiropráctico puede resultar saludable y oportuna para reponer energías, superar una contusión, aliviar dolores de cabeza o mejorar la digestión. Cuanto más saludable sea el sistema vertebral, mejor será el funcionamiento del organismo.

Esto lo han entendido deportistas como Tiger Woods, actores como Mel Gibson y cantantes como Madonna, quienes reciben quiropraxia en forma regular. El licenciado Gaitán cuenta que, en Santa Fe, cada día más pacientes recurren a este tipo de terapia y él personalmente la aplica esta disciplina al plantel profesional de fútbol de Colón -forma parte de su cuerpo médico-, a atletas y deportistas de nuestra zona.

Según su experiencia, empresarios, estudiantes, amas de casa, acuden a la quiropraxia y capitalizan las bondades de esta práctica fundamental que resulta para estar bien, ante las presiones físicas que surgen de cargar responsabilidades cotidianas.

Un buen examen de la columna vertebral, siempre realizado por profesionales competentes, es una de las maneras más efectivas de vivir libre de enfermedades y de mantener al máximo la capacidad de curación.

La quiropraxia cura o alivia quitando las obstaculizaciones del sistema nervioso y permite que las energías de la vida fluyan por el cuerpo, dándole nutrición, fortaleza, flexibilidad y equilibrio.

Es bueno aclarar que el ajuste quiropráctico no elimina, por ejemplo, el dolor de cabeza, sino que termina con la acción irritable de los nervios de la columna, generada por el complejo de sublixación vertebral. Esto le permite a su cuerpo restablecerse a sí mismo y restaurar su salud.

Un reciente estudio del que participaron 6.000 pacientes que sufrían dolores de cabeza crónicos (cuyas edades oscilaban entre los 2 y 25 años), reveló que las lesiones del cuello -sacudimientos repentinos y caídas-, era el factor que más influía en el origen de los dolores de cabeza, y que debían ser observados con mayor atención todos los casos de dolores de cabeza sin causas específicas.

También se ha puesto de manifiesto que el cuidado de la espina dorsal es especialmente eficaz en los casos de migrañas infantiles.

En otro análisis hecho sobre 100 víctimas de dolores de cabeza, los investigadores observaron una gran mejoría de los pacientes cuando se les practicaron ajustes de la columna y del cuello.

Muchas personas recurren a la medicación -la mayoría de las veces sin prescripción médica-, para superar algunas de las situaciones descriptas anteriormente. Es bueno saber que existen algunos procedimientos que, como la quiropraxia, se pueden explorar. Esos conocimientos, que sirven como llaves para abrir las puertas de una buena salud, parten de la base científica de que no hay ciento por ciento de curación sin eliminación de tensión de los nervios de la columna vertebral. Y que siempre deben ser aplicados por profesionales reconocidos y con la correspondiente supervisión médica.