Pagarán los nuevos bonos

Durante el mes próximo, el gobierno deberá pagar más de 450 millones de pesos en bonos emitidos después del default, siendo éste uno de los vencimientos más importantes del año, junto con los ya registrados en marzo y agosto.

El viernes 3 de setiembre cortan cupón de renta y amortización los Bonos de Consolidación en Moneda Nacional Segunda Serie (PR11), cuyos tenedores deberán recibir 1,069 pesos por cada 100 pesos de valor nominal, cifra de la cual 0,1192 peso corresponde a intereses y 0,95 peso a capital.

Al día siguiente vence el cupón del Bogar 18 (NF18), bono que fuera emitido en 2002 después de que la Nación se hiciera cargo de las deudas de las provincias con entidades privadas. En este caso, los tenedores de los títulos recibirán aproximadamente 0,26 peso por cada 100 pesos de valor nominal, pues paga intereses mensualmente según una tasa de 20 por ciento anual más CER.

Sin embargo, el vencimiento más destacado del mes es el del Boden 2008, en el último día de septiembre. Estos bonos pagan intereses y cortan su segundo cupón de capital.

Según fuentes del mercado consultadas, estos títulos deberían pagar 11,75 pesos por cada 100 de valor nominal, de los cuales corresponderían 10 en concepto de amortización, 0,75 peso por ajuste por CER y un peso de intereses.

Desmentida

Argentina no realizará ningún pago en efectivo a los acreedores privados para destrabar la negociación por el canje de títulos públicos en default por nuevos bonos de la deuda, aseguró el vocero del Palacio de Hacienda, Armando Torres.

El funcionario indicó que "la propuesta argentina es la que está en la Securities and Exchange Comission (SEC)" a la espera de aprobación.

En materia de reestructuración de la deuda que cayó en cesación de pagos en el 2002, la Argentina está a la espera de que la SEC le apruebe la propuesta de canje de títulos para avanzar en las negociaciones con los bonistas.

En junio, el gobierno decidió mejorar la propuesta original de canje que había formulado en la asamblea del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) realizada en Dubai el año pasado. Allí había propuesto una quita de 75 por ciento del valor nominal de los bonos, lo que implicaba, por diferencia de tasas y estiramiento en los plazos de pago, un recorte real superior al 90 por ciento, según los analistas.