Rosario (C).- Dos imponentes y flamantes centros comerciales se estrenarán en Rosario en el curso de 30 días. Son los primeros de su tipo en la ciudad, que tiene varias galerías de negocios e hipermercados mayoristas pero no establecimientos de la magnitud de los que se inauguran. El primero en abrir, mañana, será el Portal de Rosario, un complejo de 150 locales de marcas, patio de comidas, dos restaurantes, salas de cine, supermercado y estacionamiento para 3 mil vehículos. El otro shopping es el Alto Rosario, en acelerada construcción en un predio cedido por la ex Ferrocarriles Argentinos, que dispondrá de 136 negocios, sala de eventos al aire libre, capacidad para albergar 1.775 automóviles y un museo ferroviario.

Los responsables de estas inversiones y el gobierno municipal están muy advertidos de que estos dos megaemprendimientos representarán, más allá del impulso comercial y de generación de mano de obra local, un importante atractivo turístico para la ciudad, básicamente de las localidades y ciudades de la provincia. Se espera que ambos shoppings generen 4 mil puestos de trabajo en forma directa e indirecta. Aunque en la zona norte de Rosario temen que las nuevas plazas que ganan en el emprendimiento se pierdan en áreas comerciales de la zona central y norte de la ciudad (ver aparte).

Hoy será la recepción institucional y mañana la prueba de fuego para el Portal de Rosario. Instalado sobre la ex fábrica textil Estexa, en la zona del Parque Alem y a pocas cuadras del estadio de Rosario Central, este emprendimiento es un verdadero coloso, el mayor del interior del país. La inversión corresponde al grupo Cencosud y totalizó unos 175 millones de pesos. Ocupa una superficie de 200 mil metros cuadrados, de los cuales 70 mil son de las áreas comerciales específicas.

Sobre las avenidas Nansen y Víctor Mercante desde junio funciona la primera etapa del complejo, la cadena Easy, especializada en venta de productos para la construcción, remodelación y equipamiento de la casa y el jardín. Mañana estará habilitada la mayor parte de la obra, la de negocios y gastronomía, mientras que en diciembre se cortarán cintas en áreas de entretenimiento y cines.

En el cuerpo central del shopping se abrirán 150 locales con marcas nacionales e internacionales, el 65 por ciento de los cuales fueron cedidos a empresas rosarinas, mientras que el resto serán explotados por firmas porteñas. En este tramo también funcionará un patio de comidas y 3 mil plazas de estacionamiento que ocuparán dos pisos del megaedificio.

En el primer nivel sobre el estacionamiento se emplazará un supermercado Jumbo, negocios y una fuente. En el piso superior estará la galería de cines, con 3.200 butacas de capacidad, y un par de restaurantes que miran al río. Easy ya ofrece más de 50 mil productos distintos de equipamiento para el hogar y jardín en un local de 8.600 metros cuadrados. Y en una etapa próxima se habilitará el Aventura Center, un espacio de diversión que tendrá juegos mecánicos y ocho pistas de bowling.

El grupo Cencosud hizo una interesante contribución urbana para facilitar la llegada de clientes: trabajos de traza en el entorno del shopping que demandaron 5 millones de pesos para mejorar los accesos. Se ampliaron carriles en dos calles, se trazó una rotonda para acceder desde la costanera y se tendió un puente de circulación sobre el arroyo Ludueña.

El shopping Alto Rosario será el segundo megacomplejo de la ciudad. Está enclavado en un ex terreno ferroviario de 23 hectáreas que compró la firma Irsa-Alto Palermo en 1998 por 25 millones de dólares, también casi sobre la costa central de Rosario. Desde el año pasado se invirtieron 120 millones de pesos entre el levantamiento del complejo de cines y del complejo comercial. En este shopping se invierte la ecuación: el 70 por ciento de los negocios, de un total de 136, serán explotados por empresas porteñas y al 30 por ciento restante lo ocuparán rosarinas.

El Alto Palermo tendrá un gran patio de comidas, cafés, restaurantes y sectores para el estacionamiento de 1.775 vehículos. Como se ubica en los ex galpones de trenes, donde hay edificaciones del estilo inglés decimonónico cuyas fachadas se restauraron, habrá un museo ferroviario que rescata la identidad barrial.

Los comerciantes de avenida Alberdi, contigua a los dos shoppings de inminente inauguración, tienen las barbas en remojo: temen ser arrasados por la dinámica comercial de ambos colosos. Por eso propusieron, y firmaron en agosto un convenio con la Municipalidad de Rosario al efecto, instalar un centro comercial a cielo abierto, para el cual ya comenzaron a discutir estrategias de publicidad y marketing.

La avenida Alberdi es una clásica zona mercantil rosarina, donde funcionan según un censo, 317 negocios de todos los rubros en 20 cuadras. La Asociación Comerciantes e Industriales de Zona Norte de Rosario están temerosos. Según el comerciante Jorge Baio, la zona está viviendo un reverdecer y solamente un siete por ciento de los locales de la avenida están inactivos. "Pero la gente tiene pánico de que haya un cierre masivo de locales cuando abran los shoppings", expresó, puntualizando que la merma de ventas podría llegar al 50 por ciento tras la habilitación de los megacentros.