El balance final que arrojó la temporada 2004 para el tenis argentino a nivel internacional fue, sin lugar a dudas, muy positivo. Más allá de los inconvenientes físicos que tuvieron que soportar la mayoría de los tenistas nacionales a lo largo del año, los resultados finales fueron más que interesantes, a punto tal que dejaron una cosecha de 10 títulos sobre una impactante cifra de 21 encuentros decisivos con un argentino presente (tanto en caballeros como en damas), con el agregado de tres finales íntegramente nacionales, una en el mítico Roland Garros.

Los ordenamientos mundiales en hombres (tanto el Entry Ranking como la Champions Race) terminaron el año mostrando a tres raquetas argentinas entre los 11 mejores del planeta que fueron Coria (séptimo en las dos tablas), Nalbandian (noveno), Gaudio (décimo) y Cañas (undécimo), todos los cuales tuvieron sendas lesiones en distintos momentos del calendario, lo que hizo que jugaran una gran cantidad de partidos menos que muchos de sus rivales. En damas, Paola Suárez culminó decimosexta pero después de su gran actuación en Francia, había quedado novena.

Mientras los más encumbrados tenistas del escalafón (los top five) tienen en promedio 80 partidos jugados (Federer 80, Roddick 90, Hewitt 86, Safin 75 y Moyá 76) el argentino que más encuentros de ATP disputó fue Guillermo Cañas, con 62 (40 ganados). Con esa cantidad de encuentros en su haber, "Willy" se adjudicó 3 torneos (Stuttgart, Umag y Shangai), perdió otra final (Viena) y arribó, además, a dos instancias semifinales. Cañas tuvo que padecer primero su convalecencia por su muñeca derecha y después, comenzado el año, una lesión en una de sus rodillas. Sin embargo, terminó formando parte (como suplente) de la Copa Masters.

Guillermo Coria, por su parte, solamente disputó 53 encuentros (triunfó en 39) gracias a los cuales se quedó con los títulos de Buenos Aires y el Masters Series de Montecarlo, además de haber arribado a las finales de Miami MS, Roland Garros, Hamburgo MS y Hertogenbosch. Tuvo inconvenientes en su hombro derecho, lo que derivó en una complicada operación en agosto. Empero, volvió para noviembre y jugó el último certamen del año reservado para los mejores 8.

El héroe nacional de la temporada, más allá de los vaivenes emocionales a los que acostumbra, fue Gastón Gaudio (61 partidos jugados, 37 ganados), quien se quedó con el Abierto de Francia que se juega en Roland Garros. En una final antológica, de un importante cariz histórico para nuestro país por ser íntegramente argentina, superó a Guillermo Coria en cinco sets, en un encuentro emotivo.

Además, Gaudio disputó otras cuatro finales en las que no pudo imponerse a sus rivales pero que le valieron los puntos necesarios para concluir en el décimo puesto de los escalafones. También arrastró algunos problemas con su cuerpo pero igualmente pudo formar parte del Masters de Houston.

Si bien Cañas, Coria y Gaudio fueron los más destacados de nuestro tenis a nivel internacional, hubo muy buenas actuaciones de otros importantes jugadores. Es el caso de David Nalbandian (34 cotejos ganados sobre 48), por ejemplo, quien no pudo consagrarse a lo largo del año pero que disputó tres finales (Basilea, y dos Masters Series, Roma y Madrid) y alcanzó las semis en Roland Garros. Sufrió molestias en sus abdominales y en una de sus rodillas.

Otro que tuvo un año irregular pero con algunos buenos resultados fue Juan Ignacio Chela (61 jugados, 35 ganados) quien se adjudicó el certamen de Estoril venciendo en la final al ruso Marat Safin, además de arribar a las semifinales de Acapulco. En tanto, Mariano Zabaleta (48, 26) se consagró en Bastad y alcanzó las semifinales del Masters Series de Roma y José Acasuso (34, 18) salió campeón en Bucarest y jugó la final de Sopot. Además, Agustín Calleri (39, 21) cayó en el encuentro decisivo de Costa do Sauipe y jugó semifinales en Doha mientras el juvenil Juan Mónaco (29, 16) alcanzó la ronda de 4 en Sopot y en Palermo.

Entre las chicas, lo más destacado fue lo de Paola Suárez, quien llegó a semifinales en Roland Garros y a cuartos en Wimbledon, además de haber ganado el certamen de Canberra. Por su parte, fue un promisorio año de Gisela Dulko quien se posicionó entre las mejores 35 del mundo mientras que las demás tenistas de nuestro país no lograron grandes resultados en WTA, aunque se produjo la vuelta de María Emilia Salerni tras una larga lesión.

Si se debe consignar lo más destacado en esta especialidad hay que hablar de la pergaminense Suárez, quien en pareja con la española Virginia Ruano Pascual se quedó con tres de los cuatro Grand Slams del año (Australia Open, Roland Garros y US Open), además de haberse adjudicado tres títulos más.

Entre los hombres, las alegrías comenzaron por febrero con la consagración de Chela-Gaudio en Viña del Mar para después hacerlo en Estoril y continuaron con Arnold-Hood en Buenos Aires, Bucarest y Palermo, Etlis-Rodríguez en Valencia, Hood (con Pala) en Saint Polthen y Acasuso (con Sarretta) en Umag.

La performance argentina en los eventos challengers también tuvo un buen suceso y marcó la consagración de nueve singlistas argentinos y 12 títulos en dobles. Mariano Puerta (quien obtuvo tres lauros en el año) cayó en la final de la cuarta edición de la Copa Petrobras jugada en Colombia, donde perdió con el paraguayo Ramón Delgado por 6-4 y 7-5 en el día de ayer.

El santafesino Enzo Artoni se adjudicó los challengers de Bolivia, Chile y Sassuolo, Italia, junto a González King.

El conjunto femenino de Rusia obtuvo por primera vez en su historia la Copa Federación (equivalente a la Davis de hombres), tras superar en una ajustada final al defensor del título, Francia, quien no contó con Amélie Mauresmo ni Mary Pierce.

El resultado final fue de 3 a 2 que se definió en el dobles, cuando la dupla Anastasia Myskina-Vera Zvonareva superó a Eimilie Loit-Marion Bartoli por 7-6 (5) y 7-5. El conjunto ganador estaba compuesto, además de Myskina y Zvonareva, por Svetlana Kuznetsova y Elena Likhotseva.