Confirman la prisión perpetua por el homicidio de Bieler

Norberto Bieler era propietario de una concesionaria de automóviles. Su asesinato tuvo fuerte repercusión pública en la ciudad. Foto: Archivo El Litoral.. 

Se trataba de un reconocido empresario local, asesinado en 2002. Tres mujeres deberán cumplir prisión perpetua. Un hombre está condenado por haber encubierto el delito.

La Sala Segunda de la Cámara de Apelación en lo Penal de Santa Fe confirmó la condena a prisión perpetua impuesta a Lorena Verónica Fussi, Vanesa Marina Fussi y Josefina Elisa Rivero por el crimen del empresario Norberto Bieler, ocurrido el 11 de octubre de 2002 en Alvear al 3500.

El 16 de junio del año pasado, el juez de Sentencia, Luis Juan Rodríguez, había considerado a las mujeres "coautoras del delito de homicidio triplemente agravado por uso de veneno, con el concurso premeditado de dos o más personas y criminis causa".

También se confirmó la pena impuesta a Walter Mario Giménez, quien había sido condenado a cuatro años de prisión por encubrimiento agravado.

Ahora, la Sala, integrada por los jueces Pedro Sobrero, Agustín Bassó y Sebastián Creus, rechazó en forma unánime la nulidad planteada por la defensa de los detenidos al considerar, entre otros argumentos, que el juez de Primera Instancia "...no solamente citó los elementos de juicio reunidos en la causa, sino que con total prolijidad evaluó los mismos conforme las reglas de la sana crítica y emitió su conclusión".

Los camaristas consideraron de "medular trascendencia" los "dichos de once testigos, los secuestros de los elementos robados a la víctima, su reconocimiento por familiares de la víctima y el informe médico sobre el mecanismo de la muerte (perforación del esófago que provocó una sobrecarga vascular cardíaca).

"De la prueba analizada -argumentan los camaristas- surge la relación que Lorena Fussi tenía con Bieler, su conocimiento acerca del domicilio y de los hábitos del este hombre, que utilizara para programar y consumar el crimen".

El Tribunal estimó "contundente" la forma en que la imputada maniobró para procurarse el veneno y el arma; y el ingreso de Fussi al domicilio -luego de que la víctima fuera reducida por las otras dos mujeres-, llevando el veneno que fue inyectado y administrado por boca a Bieler cuando estaba inmovilizado de pies y manos, herido en la cabeza y en total estado de indefensión.

También se descarta que las condenadas desconocieran el efecto de la droga que inyectaron a Bieler, puesto que "era propio de su conocimiento común, como el de cualquier persona, que un plaguicida, raticida u otro producto semejante no debe ser administrado a los seres humanos porque se supone altamente nocivo para la salud, ya sea por lo venenoso, cáustico o dañino, y que hacerlo pone en peligro la vida del administrado. Sobre lo que sustento, no es necesario leer prospectos ni recibir asesoramiento profesional, pues se trata de un hecho notorio para los individuos con uso de razón".

Los hechos

Bieler, de 72 años, apareció muerto el 11 de octubre en el dormitorio de su casa y estuvo claro, desde un primer momento, que había sido asesinado. Quienes ese día entraron a la vivienda de calle Alvear al 3500 lo hallaron maniatado y con signos evidentes de haber sufrido varios golpes en la nuca.

Después, la autopsia ordenada por el juez de Instrucción, Dardo Rosciani, revelaría que, en realidad, Bieler no había muerto a causa de los golpes, sino de la ingesta de un agroquímico altamente tóxico.

Las investigaciones iniciales arrojaron como conclusión que la víctima había mantenido una relación sentimental con una de las condenadas. Al interrumpirse este vínculo, la chica decidió entonces pergeñar una suerte de venganza.

Por eso, apeló a la ayuda de su hermana y de una amiga para llevar adelante un plan que terminaría con la muerte de este empresario.