Una Comisión de la Asociación de Atletismo Griega (SEGAS) declaró ayer inocentes a los atletas griegos Costas Kenteris y Katerina Thanou de los cargos de haber evadido presuntamente los controles antidopaje del COI los días previos al inicio de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
La Comisión de la SEGAS decidió que los dos atletas no fueron avisados el pasado 12 de agosto de que la comisión antidopaje del Comité Olímpico Internacional (COI) les había convocado dentro de un par de horas para presentarse a un control.
El entrenador de entonces de los atletas, Jristos Chekos, fue condenado a cuatro años de exclusión de cualquier actividad relacionada con el deporte.
Chekos reconoció en declaraciones al canal de televisión ateniense ALTER que él fue avisado de la solicitud para que Kenteris y Thanou pasaran por control, pero que no encontró la forma de avisarles.
Los dos atletas fueron excluidos de las competiciones de los Juegos Olímpicos y alegaron hasta hoy que eran inocentes, puntualizando además que no habían tomado sustancias prohibidas.
La noche en que se deberían haber presentado, ambos fueron a parar a un hospital capitalino de accidentes (KAT) tras un accidente en moto, y no se les examinó de dopaje.
La justicia griega lanzó entonces una investigación para establecer la veracidad del accidente y finalmente castigó a algunos de los médicos que estaban en guardia en el hospital y certificaron que tenían heridas y que no podían abandonar el hospital.
La Federación Internacional de Atletismo expresó su sorpresa por la decisión de la Federación Griega.
En un comunicado hecho público esta tarde, la IAAF precisa que "le sorprende que Kenteris y Thanou hayan sido declarados inocentes de evadir el control antidopaje".
"La IAAF está ahora a la espera de recibir toda la documentación en inglés sobre esta decisión, y entonces será analizada cuidadosamente por la Comisión Antidopaje", apunta el escrito del organismo internacional.
"Entonces se decidirá si se acepta o se rechaza la decisión. En último caso se reserva el derecho de apelar al Tribunal de Arbitraje del Deporte", agregó.
El etíope Kenenisa Bekele, acaparador de todos los títulos de cross en las tres últimas temporadas, se presenta como máximo favorito en los mundiales que tendrán lugar este fin de semana en Saint Galmier (Francia), aunque deberá luchar contra su estado anímico y un equipo keniano liderado por Eliud Kipchoge.
Kenia, desmoralizada tras 6 años sin probar el oro -el último campeón fue Tergat en 1999- anuncia un plan para terminar con la era Bekele.
Bekele, de 22 años y campeón de cross largo y corto los tres últimos años, pretende regalar a su novia (fallecida hace poco tiempo) otros dos títulos mundiales.
Se planteó renunciar al Mundial por el trauma psicológico, pero precisamente su recuperación pasa por volver a levantar los brazos como emperador del cross universal.
El duelo entre Bekele y Kipchoge, campeón del mundo de 5.000 metros, se presenta apasionante. El keniano llega en su mejor momento al frente de un equipo muy potente.
El cross se corre en una distancia corta de 4 km y larga de 8 km y 12 km y es una prueba de carácter individual y por equipos (cada equipo se integra por cuatro atletas).
Sin embargo el cross tendrá cambios, ya que la prueba corta de esta disciplina dejará de formar parte de los Campeonatos del Mundo tras los de 2006, en Fukuoka (Japón).
Aunque Sudamérica no tiene expectativas en este tipo de disciplinas -dominadas principalmente por los africanos-, atletas de nueve países que obtuvieron su clasificación en el Sudamericano de Montevideo estarán presentes en Saint Etienne.
Argentina está representada por un equipo femenino integrado por las atletas Sandra Amarillo, Karina Córdoba, Nadia Rodríguez y María de los Angeles Peralta.
Las atletas argentinas obtuvieron la clasificación al Mundial, tras consagrarse el mes pasado campeonas sudamericanas de cross corto por equipos, en el certamen llevado a cabo en Uruguay.