La Iglesia Católica se prepara para un inevitable final

Algunos fieles se quedaron a dormir en la Plaza San Pedro anoche. Foto: AGENCIA EFE. 

Ya comenzaron a llegar a Roma algunos cardenales que participarán de los funerales de Juan Pablo II y luego de la elección de un nuevo Santo Padre.

Las autoridades romanas ultimaban hoy su imponente dispositivo para recibir al millón de personas que se espera para despedir al Papa Juan Pablo II, cuyo estado era "gravísimo" al cierre de esta edición, mientras que la Iglesia Católica se preparaba para la sucesión.

"Las condiciones generales cardiorrespiratorias y metabólicas del Santo Padre se mantienen sustancialmente invariables y por lo tanto gravísimas", afirmó el portavoz del Pontífice, Joaquín Navarro Valls, al divulgar el último parte médico a las 11.30 locales.

"Desde el amanecer de hoy, se ha empezado a observar un inicio de pérdida del conocimiento", agregó casi al borde del llanto, aunque precisó que "no se puede hablar de coma".

"A veces cierra los ojos y a veces vuelve a abrirlos" y "cuando oye hablar, a veces reacciona", agregó, tras asegurar que a las 7.30 de este sábado se ha celebrado una misa en su presencia.

Esta tarde se difundirá un nuevo parte médico sobre el estado de salud del Papa, que esperaba con serenidad la llegada inexorable de la muerte en una gran cama blanca instalada en el centro de su habitación, con vista a la Plaza de San Pedro del Vaticano.

"Sonreía con la mirada" y "no mostraba ninguna señal de sufrimiento, a pesar de que su respiración era difícil", afirmó a la prensa el cardenal italiano Francesco Pompedda, quien visitó ayer al Pontífice en sus aposentos.

"No tuve la impresión de ver a un agonizante", agregó.

Los fieles presentes

Unos metros más abajo, más de 50.000 fieles, en su mayoría italianos y polacos, continuaban rezando por su alma en la Plaza de San Pedro del Vaticano, donde se registraba un ir y venir constante, lo mismo que ocurre en muchos países del mundo católico.

Mientras, el ayuntamiento de Roma creó un comité extraordinario para poner en marcha un plan de seguridad, asistencia y alojamiento destinado a los cientos de miles de peregrinos, turistas y autoridades de todos los continentes que lleguen a partir de este fin de semana a rendir tributo a Juan Pablo II.

Ante la inminencia del final del papado de Karol Wojtyla, que con casi 27 años en su dirección habrá sido uno de los más largos de la historia, la Iglesia empieza a preparar también las etapas que llevarán a la elección de un sucesor.

Varios cardenales emprendieron viaje para participar en este histórico momento, como el arzobispo primado de México, Norberto Rivera, que era esperado hoy en Roma.

"El propósito es acompañar al Santo Padre en lo que le quede de vida, y esperamos poder participar en los acontecimientos siguientes", declaró el arzobispo Rivera en el aeropuerto de la ciudad de México antes de embarcarse para Roma.

Rivera no fue el único en evocar la sucesión.

El cardenal brasileño Claudio Hummes, que aparece en la lista de "papables", también se refirió a ella al desgranar los tres desafíos que esperan al futuro jefe de la Iglesia Católica: responder a los progresos de la biotecnología y la bioética, hacer frente a la creciente pobreza y proseguir el diálogo con otras religiones.

Podrían ser 118

En total, 117 cardinales electores -entre ellos 21 latinoamericanos- tienen derecho a voto en el futuro Cónclave, aunque podrían ser 118 si se da a conocer el nombre del cardenal "secreto" nombrado por el Papa en 2003.

Para que ese cardenal "in pectore" pueda participar en el Cónclave, es necesario no sólo que el Papa divulgue su nombre antes de morir, sino que tenga menos de 80 años, edad límite para participar.

Pero antes de que se convoque el Cónclave, a los 15 días y no más de 20 días de su muerte, el primer paso será declarar oficialmente la defunción y romper el secreto pontificio, el sello con el que Wojtyla ha plasmado todos los documentos oficiales de su pontificado.

Estas funciones recaerán en el español Eduardo Martínez Somalo, de 78 años, quien en tanto que Camarlengo, asumirá la interinidad entre la muerte de Juan Pablo II y el nombramiento de un nuevo Papa.

Aunque en la cripta bajo la basílica de San Pedro se encuentra una tumba preparada para él, circulan rumores de que Karol Wojtyla podría ser enterrado en Polonia, su tierra natal.

Sorprendidos por su resistencia

El antiguo anestesista del Papa, Corrado Mani, afirmó hoy que Juan Pablo II tiene "una fibra extraordinaria" y su resistencia "está sorprendiendo en estas horas a los médicos".

Manni, quien atendió al Pontífice desde 1981 hasta 1996, opinó que el corazón de Juan Pablo II no puede resistir por mucho tiempo, en vista del último cuadro clínico difundido por El Vaticano.

"Creía que dadas las condiciones descritas ayer por la tarde todo estaba prácticamente acabado; pero no ha sido así gracias a la fortaleza del aparato cardiovascular del Papa", señaló el anestesista en declaraciones recogidas por la agencia Ansa.

También reconoció que esta resistencia del anciano Pontífice "ha sorprendido un poco a todos y también a mí, que lo conozco bien desde hace muchos años".

En la ciudad

Monseñor José María Arancedo invitó a toda la comunidad santafesina a sumarse en oración por el Papa Juan Pablo II.

El arzobispo convocó a la novena que actualmente se desarrolla en la basílica Nuestra Señora de Guadalupe, que "va a estar asignada también por este acontecimiento del Papa". Además, las parroquias pertenecientes a la diócesis permanecerán abiertas para rezar por el Santo Padre, y "se les ha pedido a los sacerdotes que, de un modo especial en todas las misas, tengan esta intención".

Arancedo, que presidirá diariamente la misa de las 20.30 hasta el domingo 10 de abril en Guadalupe, advirtió que "en caso de que falleciera se haría una misa en la Catedral, invitando a todas las autoridades a un acto para las exequias del Papa".

Mencionan a Bergoglio

El cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio es mencionado hoy por la prensa francesa como uno de los papables con buenas posibilidades de suceder al agónico Juan Pablo II. Así lo señalan los diarios parisinos Le Monde y Liberación, que recuerdan, como elementos a su favor, su origen italo-latinoamericano -es nieto de inmigrantes italianos- y su popularidad entre los "desheredados" de la Argentina. Le Monde menciona que el cardenal Bergoglio, de 68 años, suele convivir con la gente común de Buenos Aires, toma el subte y el tren como cualquier ciudadano y los fines de semana se mezcla con los pobres de las villas miseria.

AFP