Independiente es una caldera

El ex presidente de Independiente Héctor Grondona, en vísperas de las elecciones para presidente en la entidad, dijo hoy que en el club "quienes me atacaron, hoy se van como ratas", en alusión a la gestión que encabezó Andrés Ducatenzeiler, y aseguró con respecto al futuro del equipo que "el descenso está a la vuelta de la esquina".

Con su hermano Julio, titular de la AFA, el ex dirigente señaló que se peleó "por culpa de Bielsa (Marcelo)", ex técnico del seleccionado, y a quien quería como entrenador para Independiente, pero para su hermano no era un candidato potable.

"Fue en 1995, cuando yo era titular de la Comisión de Fútbol. Convencí a toda la directiva para traer a Bielsa para reemplazar a Miguel Brindisi, pero él (por su hermano Julio) lo convenció a Bottaro (Jorge, el por entonces presidente) para que contratase al "Zurdo" López (Miguel Angel)", señaló.

Grondona, que fue presidente de la entidad roja desde 1997 a 1999, debió enfrentar una acusación por "administración fraudulenta", pero aseguró que dejó al club "con una deuda de 21 millones de pesos y hoy esa cifra asciende a 63 millones".

El ex dirigente, en una extensa nota publicada por el diario deportivo Olé, aseguró que durante su gestión "tuve aciertos y errores pero fui honesto", al tiempo que agregó que "levanté 120 juicios y sólo aumenté el pasivo en un 7 por ciento".

Con relación a la gestión de Ducatenzeiler, quien llegó al club de la mano del empresario rockero Daniel Grinbak, Grondona opinó que "quienes me atacaron hoy se van del club como ratas", al tiempo que admitió que su mayor error "fue haber contratado como técnico a Menotti (César)", quien precisamente esta semana renunció a su tercer ciclo como entrenador en la entidad.

Con relación a la causa que se le siguió por "administración fraudulenta", el ex presidente rojo comentó que "me acusaron de haber "mordido" en los pases de "Matute" Morales (Angel), Acuña (Roberto) y no pudieron comprobar nada, porque no hice nada. Me difamaron".