Patricio Fleming hijo no hacía otra cosa que llevar los celulares de los vestuaristas de Santa Fe -Daniel Jovellano, Mario Demonte, Nacho Pettinari- con el mismo mensaje: "Llevále a Vargas, es de una radio de Perú". Así, desde Lima, todos querían obtener el testimonio de Juan Manuel Vargas, el autor de un golazo de tiro libre que enmudeció La Bombonera y lo dejó clavado al "Pato" Abbondanzieri.

Cuando Favale marcó el foul al "Bichi" -otro interesante y productivo partido del "20"-, comenzó el cónclave del tiro libre: se pararon el mismo Fuertes y Giovanny, como así también empezó a tomar carrera el "Cata" Díaz (desde atrás, como cuando le marcó a River). Pero desde el banco, donde estaba Jorge Pautasso en lugar del expulsado Martino, la orden fue clara: "Que le pegue Vargas". Y Vargas la clavó en un lugar inalcanzable para el arquero más parejo del fútbol argentino.

Cuando el muchachito del golazo salió del vestuario, los grabadores lo taparon. Al toque, amablemente, atendió la consulta de El Litoral en el gimnasio visitante de la cancha de Boca:

- �Fue el mejor gol de tu vida?

- Es difícil elegir ahora, porque en Perú me tocó hacer goles lindos, incluso de mitad de cancha que todavía recuerdo con aprecio.

- Pero éste fue espectacular

- La verdad que lo estaba buscando. Porque en las prácticas me salían siempre y en los partidos nunca. Pero las cosas siempre llegan: se dio en La Bombonera repleta y ante un grande como Boca.

- Estás destinado a marcar golazos cada vez que festejás

- Salen así y es más lindo. Primero con Almagro, ahora con Boca. Es lindo para un jugador hace goles, mucho más cuando es defensor. Corrí a dedicárselo a los hinchas de Colón que hicieron el esfuerzo de gastar dinero para venir a vernos desde Santa Fe.

- �De quién te acordaste en esa carrera después que la pelota entra?

- De "Chemo" y "Juanchi". Porque ellos (N.de R.: José Guillermo Del Solar y Juan Antonio Pizzi) me fueron a buscar y me dieron la posibilidad de jugar en el fútbol argentino. Lo mismo para el presidente, Horacio Darrás, que es un señor con todas las letras, porque siempre está al lado del jugador.

- �Habla de fútbol con ustedes, los jugadores, el presidente de Colón?

- Sí, es más, a mí me pidió antes del partido que me tuviera confianza en pegarle al arco. Siempre me pide que patee, porque fue uno de los elogios que le comentaron de mis condiciones como jugador cuando fue a Lima para contratarme.

- Ahora se van a cuidar los arqueros

- Y bueno, habrá que practicar variantes y quedarse pateando después de los entrenamientos.

Hasta aquí, el peruano Juan Manuel Vargas fue de menor a mayor en su rendimiento individual como jugador de Colón. "No es fácil acostumbrarse al ritmo y los secretos del fútbol argentino cuando uno viene de Perú. Todo necesita un tiempo, por eso es que estoy conforme con mi evolución", comenta el lateral-volante izquierdo cuyos derechos económicos son compartidos entre Colón y Universitario de Deportes de Perú.

El mismo "Chuky", como lo apodan, vuelve a la escenografía previa al golazo. "Cuando me dejaron acomodarla, supe que tenía chances de patear. Luego, cuando le pego y pasa la barrera, sabía que sería gol".

Así, el compinche de Cominges, que tomó y levanta la bandera de Hidalgo, marcó un golazo en La Bombonera. Y a los que peinan canas, al menos por un ratito y con pelota quieta, Vargas hizo recordar al peruano Flores, aquél que dejara un sello futbolístico inolvidable en la historia de Colón.

TOMBOLINI (6): le sacó una pelota del ángulo a Palermo en el primer tiempo y evitó el 2-0 con los pies en el complemento en un mano a mano con Palacio. Además, estuvo firme en el juego aéreo.

CHITZZOF (6): jugó un partido aceptable en líneas generales. Un poco contenido en el primer tiempo, porque Boca atacó mucho por izquierda. En el complemento, cuando pudo, fue salida.

DIAZ (8): la figura de Colón y de la cancha. Es un jugador de otra categoría el "Cata". No por algo lo quiere River y está siendo observado por Europa. En el pie a pie, lo borró a Palacio, el delantero de moda en el fútbol argentino. Una muralla.

PICCOLI (6): cometió dos errores groseros en la salida, que Palermo no aprovechó. De todos modos, siempre se lo vio muy metido en el anticipo a cada jugada de ataque de Boca. Dejó todo en cada pelota.

VARGAS (7): un buen primer tiempo, intentando ser siempre salida por izquierda. En el complemento, estando más contenido, decoró su tarde con un golazo para colgar de un cuadrito para toda la vida.

VILLARREAL (5): si bien intentó dos o tres veces de media distancia, se lo vio increíblemente impreciso en pases de cuatro o cinco metros. Se equivocó en algo que no falla.

ROMAGNOLI (5): en el primer tiempo, le otorgó demasiadas ventajas al "Guly" para manejar los hilos de Boca y Colón lo sufrió. Mejoró mucho en el complemento, quitando y entregando con precisión.

MORENO (5): si al enorme despliegue que tiene en cada partido, pudiera aportarle algo de claridad con la pelota, Colón tendría más recursos en el mediocampo a la hora de jugar.

CAPURRO (6): otro buen partido suyo, siendo el volante más claro de Colón con la pelota. La idea de Martino fue adelantarlo varios metros en el campo, casi como un enganche alternativo a la par de Giovanny.

GIOVANNY (4): el jugador más discreto de Colón en la cancha de Boca. Sin fútbol, sin alma, sin actitud. Estaba como en otro lado y pareció quedarle enorme el marco del partido en La Bombonera.

FUERTES (6): un partido sacrificado e inteligente del "Bichi" en la cancha de Boca. Muchas veces, peleó y ganó en soledad contra todos los defensores rivales. Sacó una volea espectacular en el primer tiempo y armó en su totalidad la jugada previa al gol de Vargas (el foul en el tiro libre se lo hicieron a él).

MIGLIÓNICO (-): entró "Gaviota" por un improductivo Giovanny y metió dos o tres bochazos espectaculares, cambiando de frente y armando la contra. Es la alternativa, si el "10" se para por la lesión.

GANDIN (-): el "Chipi" entró por Capurro y estuvo a punto de atropellar un centro de Fuertes que hubiera sido el 2-1 para Colón en La Bombonera.