Las primeras pericias policiales reúnen indicios positivos que vinculan a los hermanos Lino y Pepo Bertucci con, al menos, el último ataque atribuido al Loco de la Escopeta, el francotirador serial que azota a Rosario desde hace 13 años. No obstante, la calidad de esos elementos no permite, por el momento, atribuirles la calidad de pruebas categóricas para fundamentar una condena por este hecho. Y, menos aún, por los ocurridos en el pasado.

Los hermanos Bertucci fueron apresados el lunes a las 23 en su casa de Zuviría 7361, en barrio Belgrano, zona oeste rosarina. Ocurrió a menos de ocho horas de que un colectivo de la línea 107 fuera perforado en el viaducto Avellaneda, en la zona central de la ciudad, por una perdigonada de acero que destrozó una ventanilla y dejó sus huellas en la carrocería. Ninguno de los 41 pasajeros fue herido.

Un informe de la Dirección General de Medicina Legal de la Zona Sur, dependiente de la Policía provincial, les atribuye a los detenidos trastornos psíquicos. A Pepo, de 49 años, le endilga secuencias delirantes en su discurso e incapacidad para distinguir lo real de lo imaginario, lo que lo coloca en la posible perspectiva de la inimputabilidad penal. A Lino, de 53, le adjudica un componente psicopático perverso en su subjetividad y predominio sobre su hermano menor. El diagnóstico fue realizado por un psicólogo legista que, tras entrevistas individuales, remitió los resultados al juez de Instrucción N� 10, Alfredo Ivaldi Artacho.

Una pericia en curso, considerada definitoria, es la de la Sección Balística de la Unidad Regional II. En la casa de los Bertucci fueron secuestradas cinco armas. Una es una escopeta 12.70, el calibre utilizado por el tirador en los últimos ataques, incluso en el que provocó la muerte de Florencia Rubino, de 12 años, el 19 de abril de 2003. En principio los peritos balísticos determinaron que un cartucho hallado dentro de la escopeta secuestrada contiene las mismas postas que mataron a la nena y que el taco es de la misma marca. Esto es un indicio que no necesariamente vincula a los hermanos a los homicidios, ya que la marca en cuestión, CBC, es muy difundida entre los usuarios de este tipo de arma.

El jefe de Orden Público de la Unidad Regional II, Ricardo Ruiz, señaló que toda la Policía rosarina cifra su expectativa de haber resuelto el caso en la pericia balística. "Según los elementos preliminares, será contundente para imputar a los detenidos", destacó.

Otro punto importante que vincula a los hermanos es el hallazgo, en su casa, del furgón Mercedes Benz 608, con cabina roja y caja blanca. De un vehículo de esa marca y características fue originado el disparo según el chofer del colectivo atacado el lunes, Rogelio Rubén Bravo, quien se constituyó en testigo clave para la investigación. Un perito balístico confirmó que en la parte delantera del utilitario de los Bertucci son notorias las abolladuras periféricas que corresponderían a disparos.

No obstante ese acopio de indicios, inédito desde que se inició la secuencia de ataques, no permite más que fundamentar un estado de sospecha. Según el docente de Derecho Procesal Penal Víctor Corvalán, hasta ahora no hay una prueba directa de cargo para sostener una sentencia condenatoria, como sería una confesión o una pericia balística irrefutable. Mucho menos para vincular a los hermanos a los episodios anteriores, que incluyen dos muertes y más de un centenar de ataques.

Lino y Pepo Bertucci están alojados en la alcaidía de Unidades Especiales de la Unidad Regional II, bajo los cargos de tentativa de homicidio y tenencia de arma no reglamentada. El jueves Pepo ni siquiera declaró ante el juez. Lino habló sólo para decir que se abstendría y para solicitar un abogado.

Los siguientes son los ataques más resonantes que se le atribuyen al denominado "Loco de la escopeta" de la ciudad de Rosario que empezó con agresiones a vidrieras y luego eligió como blanco los colectivos.

* 23 de mayo de 2005: una joven pasajera resultó herida luego de que desde una camioneta utilitaria atacaran de un escopetazo un micro de la línea 107 que atravesaba el viaducto Pinasco.

* 19 de febrero de 2005: fue atacada de una escopetazo una unidad de la línea 101 que descendía del viaducto Avellaneda, ocasión en que resultó levemente lesionado Ezequiel Ruiz, de 21 años.

* 22 de octubre de 2004: tres pasajeros de 14, 18 y 54 años resultaron heridos de una perdigonada cuando un circulaban a bordo de un colectivo de la línea 112 en avenida Pellegrini y Sarmiento.

* 16 de abril de 2004: destrozos en una escuela se lo atribuyen al "Loco de la Escopeta".

* 25 de agosto de 2003: atacan un colectivo de la línea 110 en bulevar 27 de Febrero intersección con la avenida Corrientes, y resultaron heridos una adolescente de 15 años y un hombre.

* 19 de abril de 2003: en el caso más resonante de su prontuario, el "Loco de la Escopeta" atacó un colectivo de la línea 131 en 27 de Febrero y Pueyrredón y asesinó a Florencia Rubino, una nena de 12 años que viajaba detrás del asiento del conductor.

* 22 de setiembre de 2000: Luis Angel Mateo, de 46 años, e Ismael Lenderman, de 56, resultaron heridos cuando viajaban a bordo de un colectivo atacado al circular por el cruce de la avenida Alberdi y la calle French.

* 11 de mayo 2000: José María Carné, de 29 años, recibió una perdigonada similar cuando caminaba en cercanías de la misma avenida Alberdi y la calle Almafuerte.

* 27 de marzo de 2000: la joven Silvana Coria resultó heridas por esquirlas de vidrio que saltaron cuando una ventanilla del ómnibus en el que viajaba por la avenida Alberti y Carballo, estalló al ser alcanzada por una perdigonada.

* 12 de enero de 2000: Dora Pintos de Sweeny, celadora de escuela, de 60 años, fue herida en la cara, el cuello y el hombro izquierdo cuando viajaba al centro de la ciudad desde el barrio Rucci, en un micro de la línea 107.

* 6 de noviembre de 1999: María Dolores Ortíz, una enfermera de nacionalidad paraguaya, de 44 años, fue herida de un escopetazo en la pierna izquierda disparado desde un auto en movimiento cuando caminaba por una avenida céntrica rosarina.

* 13 de junio de 1999: Daniel Fernández, de 40 años y un niño de seis, resultaron heridos a escopetazos mientras comían en una hamburguesería frente a la terminal de ómnibus Mariano Moreno de Rosario.

* 1 de mayo de 1999: Resultaron víctimas una mujer de 59 años y dos jovencitas de 14, en pleno centro de la ciudad de Rosario.

* 7 de enero de 1994: Asesinan de un tiro a Carolina Salgado, una joven mujer que caminaba por calle Eva Perón al 4400.(Télam).-

El prototipo que se cayó

Una de las cosas que plantea la detención de Lino y Pepo Bertuzzi, dos personas sencillas, de barrio, fleteros de profesión, de contextura intelectual en apariencia poco compleja, es la debilidad distintiva de la construcción del arquetipo criminal que hizo la policía rosarina de "El Loco de la Escopeta". La aparición de estos hermanos como culpables pone en crisis toda la idea policial de quién estaba detrás de los ataques. El gabinete especial de investigación habló siempre de un sujeto único que actuaba en soledad, que protagonizó actos muy diversos a lo largo de 13 años de irrupciones, que perseguía notoriedad meditadamente, que actuaba con cálculo y gran frialdad, e inteligencia en extremo. Las características de los dos detenidos no corresponden en absoluto al prototipo elaborado.