Aniversario trascendente.
Cuatro décadas de mística
Hace 40 años se producía el nacimiento de Los Pumas, en el marco de la inolvidable gira a Sudáfrica. El 19 de junio de 1965, vencían a los Juniors Springboks en el Ellis Park.

Por César Miño

Mañana se cumplirán cuarenta años de la memorable tarde en la que el Seleccionado Argentino de Rugby vencía a los Juniors Springboks por 11 a 6, en el mismísimo Ellis Park de Johannesburg, inscribiendo uno de los hitos sagrados de la historia de este deporte en nuestro país.

Horas más tarde, un avezado periodista sudafricano refrendaba con la denominación de "The Pumas" al elenco vencedor, en medio de un sinnúmero de elogios, que fundamentalmente destacaban "la entereza de un grupo de rugbiers aficionados, que humillaron sin piedad a los todopoderosos sudafricanos, en su templo sagrado ".

Aunque, en realidad, la denominación de "Pumas" había surgido desde el mismísimo debut de la gira, ocurrido en Rhodesia (hoy Zimbabwe), haciendo alusión a que los rugbiers argentinos habían denotado en el campo de juego la fiereza del animal que lucían sobre el corazón.

Se trata -como hasta ahora- del dominante yaguareté que engalana el escudo de la Unión Argentina de Rugby. De más está decir que este desliz resultó insignificante, ya que, a partir de ese momento (y, en especial, con el notable triunfo citado), quedó grabado a fuego uno de los nombres propios del deporte argentino de todos los tiempos: Los Pumas.

Seleccionado que, durante las cuatro décadas transcurridas, ha inscripto páginas de gloria realmente inolvidables. La mayoría de las veces, aferrándose a esos "preceptos fundacionales" de aquel grupo impregnado de entereza, convicción, humildad o como se desee calificar a sus virtudes inconmensurables.

Los predecesores

¿Cómo explicar que esta alusión específica no desmerece lo acontecido con anterioridad? Porque, en realidad, la historia de representativos nacionales tiene su origen en el 26 de mayo de 1910, cuando el denominado Team Olímpico A se midió con un Combinado Británico.

Para continuar, el 12 de junio del mismo año, con la denominación de "River Plate Rugby Football Union" (denominación de la actual UAR), en la cancha de polo de Hurlingham, ante el mismo adversario.

Eran tiempos de bermudas hasta las rodillas, camiseta azul y medias rojas. También, del férreo empuje que le otorgaban a este deporte -casi desconocido en estas pampas- los ingleses radicados en el país, en apoyo a las "ilusiones locas" de tantos jóvenes que rápidamente quedaron atrapados por su esencia.

Desde las crónicas de la época surgen los nombres como los del capitán Gebbie, el sudafricano Heatlie (un ex Springbok afincado en Buenos Aires) y C. McKintosh, a quienes se los nomina como los primeros entrenadores.

Con el paso de los años, la simiente británica fue calando hondo en los jóvenes de la época: el rugby formaba parte del intercambio cultural y movilizaba a diversos sectores de la sociedad argentina.

En los cuatro matches disputados contra seleccionados británicos en 1927 (ahora con atuendo en el que predominaba el blanco), se sumaron nombres como los de Arturo Rodríguez Jurado (luego, campeón olímpico de boxeo), José Cuesta Silva, Enrique Bustamente y Reinaldo Cooper, conducidos por el célebre Antonio Bilbao La Vieja, una leyenda de la década del '20, convertido en coach.

La popularidad crecía: a tal punto, que se reunieron más de 5.000 espectadores en cada ocasión (siempre en Hurlingham), con trenes especialmente fletados por el ferrocarril Pacífico. Inclusive, en uno de los matches se contó con la presencia del presidente de la Nación, Marcelo T. de Alvear.

En 1932 se produce un hecho importante. Por inquietud de Abelardo Gutiérrez -delegado del GEBA- se adopta la indumentaria actual: camiseta a rayas horizontales celestes y blancas, pantalones blancos y medias rayadas.

Se estrenó en los dos tests ante los Juniors Springboks, disputados en Ferro Carril Oeste. Luego, en 1936, hubo una serie ante los británicos, realizada en GEBA, escenario de todos los matches hasta 1970, año en el que reapareció la entidad de Caballito.

La Segunda Guerra Mundial impuso un lapso de inactividad hasta 1948, con la presencia del célebre Oxford Cambridge. Un año más tarde se celebró a lo grande una caída por 5 a 0 ante Francia, con actuaciones estupendas de dos brillantes medios: Guillermo Gilles y Ricardo Ehrman, "oriundos" de Pucará, entidad que resultó fundamental para los primeros tiempos de los seleccionados.

En 1951 se realizó el primer Campeonato Sudamericano (en Buenos Aires), lo que llegó a los ámbitos europeos. Por ello, no extrañó que al año siguiente llegase Irlanda y se llevara una sorpresa capital: cayó ante Pucará, por 11 a 6, en el primer éxito del rugby argentino ante un adversario británico.

El primer paso estaba dado: Argentina estaba insinuantemente inserto en el gran mundo del rugby, por lo que, de allí hasta 1960, prosiguieron las visitas ilustres: de nuevo Oxford Cambridge; varias veces los Coqs; los Juniors Springboks y las habituales conquistas del Sudamericano.

La célebre gira

Si bien el relato de la histórica gira por Sudáfrica de 1965 es más que conocido, vale recordar básicamente que fue pergeñada merced a la visión del más importante dirigente sudafricano de todos los tiempos: Dannie Craven. Porque fue "Mr. Rugby" quien avizoró a comienzos de la década esa posibilidad, lo que finalmente refrendó en 1964, ocasión en que llegó para observar el Sudamericano, que por supuesto se adjudicó Argentina con comodidad.

Una vez concretada la posibilidad del periplo, envió al coach Izaak van Heerden para que sustentara la preparación del entusiasta grupo de 30 jóvenes argentinos, la mayoría de ellos, estudiantes universitarios o flamantes profesionales, quienes durante 3 meses afrontaron un entrenamiento jamás antes realizado.

Llegado el momento, hubo que elegir 26 para partir a comienzos de mayo, en medio de determinaciones impregnadas de reconocimiento y afecto. Fueron ellos (aparecen en la fotografía de esta nota) los que afrontaron bravíamente una verdadera utopía: jugar 16 partidos en la tierra de los más poderosos del Planeta Rugby de aquel entonces.

El saldo no fue mejor: ganaron 11 encuentros, empataron 1 y perdieron 4. Cuando regresaron, a fines de junio, una multitud los recibió en Ezeiza, para agradecerles semejante hazaña.

Los Pumas habían nacido para la consideración universal y el rugby comenzaba a ganar espacios impropios para aquella época en la República Argentina.

El tour

La histórica gira de 1965, contuvo los encuentros que se detallan a continuación.

8 de mayo: Rhodesia 17 - Argentina 12.

12 de mayo: Transvaal 25- Argentina 13.

15 de mayo: Western Transvaal 11 - Argentina 28.

19 de mayo: South West Africa 5 - Argentina 43.

22 de mayo: Eastern Transvaal 9 - Argentina 22.

26 de mayo: Gricualand West 12- Argentina 32.

29 de mayo: North Eastern Districts 6 - Argentina 17.

1 de junio: Border 6 - Argentina 6.

3 de junio: Eastern Province 6- Argentina 27.

5 de junio: South Western Districts 6 - Argentina 0.

9 de junio: Southern Universities 6 - Argentina 22.

12 de junio: Boland 12 - Argentina 20.

16 de junio: Orange Free State 14 - Argentina 17.

19 de junio: Junior Springboks 6 - Argentina 11.

23 de junio: Natal 14 - Argentina 24.

26 de junio: South African DC 31 - Argentina 11.