PELÍCULA ARGENTINA EN EL FESTIVAL DE SHANGAI

Estreno mundial de "Garúa"

El actor Luciano Cáceres es el protagonista del filme dirigido por Gustavo Corrado. Foto: AGENCIA TÉLAM. 

Se tradujo al chino como "Tango" y trata de llegar a lo profundo de esa música.

EFE

La película argentina "Garúa", de Gustavo Corrado, tuvo su estreno mundial ayer en el Festival de Cine de Shangai, traducida en chino como "Tango" y que trata de llegar "a lo profundo" de esa música, explicó el director.

"Probablemente vaya mucha gente a verla, porque sé que hay muchos chinos que bailan tango", declaró. "Quizá vayan con la expectativa de verlo bailar, pero no hay casi nada de eso en la película, aunque no creo que los decepcione".

La obra intenta "meterse en el espíritu del tango, alcanzar lo auténtico, lo original, sin folclorismo, ya que el tango no es sólo baile, como se piensa en el extranjero; en realidad es un espíritu, un estado de ánimo", dijo.

"Todos los argentinos, a pesar de que no escuchemos tanto tango, tenemos ese espíritu, esa melancolía, esa nostalgia", aunque, añadió, no es nada popular entre las nuevas generaciones.

El protagonista de "Garúa" es un joven delincuente que asesina a un cantante y compositor de tangos y que va descubriendo ese mundo poético "casi oníricamente, a pesar suyo", dijo a EFE el actor principal Luciano Cáceres.

CAMINO DE REDENCIÓN

"Toda la película es un camino de redención, donde el protagonista, obsesionado por la culpa, va ocupando los vacíos que provocó la muerte del cantante: empieza a hacer las cosas que él hacía, a hacerse amigo de su mejor amigo, a cantar sus tangos, a tener relaciones con la viuda, sin saber muy bien cómo", explicó.

Esta "redención", casi cristiana, sorprendió mucho al público chino, formado sobre todo por periodistas, que siguieron con atención el desarrollo de la película, algunos incluso con lágrimas en los ojos, a pesar de que otros, por costumbre, comían papas fritas "aunque no era cine comercial", se sorprendió Cáceres.

"Es una película preciosa, pero muy triste", dijo a EFE una espectadora que felicitó al actor, mientras varias decenas de aficionados hacían cola para fotografiarse con él o pedirle autógrafos.

"Al público chino le gustan las películas emotivas y profundas, pero ésta es un poco difícil de entender, no comprendo por qué al final él tiene que morir", opinó otra joven, Liu Ye, al salir de la sala del estreno, una duda común entre el público, pues la noción de culpa y redención de las culturas cristianas no existe en Oriente.

"El mejor comentario es que han sido elegidos para el festival", resumió el gerente del Centro de las Artes Cinematográficas de Shangai cuando fue preguntado sobre la aceptación de la obra en China.

"Garúa" (que en el argot de Buenos Aires es el nombre una lluvia fina y leve, además del título de un tango muy famoso) es el segundo largometraje de Corrado, después de "El armario", que se estrenó el año pasado en el festival de San Sebastián.

Terminada de editar hace apenas veinte días y rodada en mes y medio en una fábrica metalúrgica gestionada por sus empleados, es la primera obra en color del director argentino, que mediante tonos monocromos y fuertes contrastes crea ambientes con "personalidad" y "un clima particular", que fue alabado por los críticos chinos.

En competencia

"Garúa" compite dentro de la sección oficial del Festival Internacional de Cine de Shangai, cuyos premios se concederán mañana.