A pesar de la agresiva intervención de la banca oficial de 124 millones de dólares, la divisa de Estados Unidos retrocedió de nuevo frente al peso, pues la paridad entre ambos cerró hoy a 2,855/2,885 por unidad en las casas de cambio.
De esa manera, el peso se apreció 0,87 por ciento a lo largo de la semana, mientras las tasas interbancarias tocaron 6,50 por ciento producto de la iliquidez de la plaza, las necesidades propias de pagos tributarios y el fin de semana largo.
Nuevamente, las necesidades de caja de las empresas impulsaron al call money hasta 6,5 por ciento, debido a vencimientos impositivos y a la proximidad del fin de semana largo.
Así, los tipos interbancarios se transaron a 6 por ciento en los bancos de primera línea y a 6,25 por ciento en los de segunda y tercera. En todos los casos, las operaciones fueron en pesos a cuatro días.
"Las entidades públicas salieron a mantener a la divisa en forma agresiva. Se detectó además una importante liquidación de exportaciones por parte de los privados", recalcó Pablo Solís, de BanEx.
Ante el elevado call money y la escasez de dinero, las compañías prefirieron deshacer parte de sus posiciones en billetes para afrontar sus obligaciones.
Por ello, se transaron 358 millones de pesos entre las dos plazas cambiarias. En esta ocasión, el Banco Central registró un saldo de 124 millones de dólares de su compra-venta mayorista y de sus liquidaciones a importadores.
En ese contexto, la cotización para las grandes operaciones se fijó en 2,87/2,871 unidades. El dólar de referencia fue fijado en 2,8725.
En general, los futuros de la moneda de Estados Unidos descendieron también. El Rofex bajó a 2,873 para fin de mes y hasta 2,881 para julio. Sin embargo, continuó a 2,891 para agosto.
Por otra parte, el euro se mantuvo estable en relación con la divisa norteamericana, pese al anuncio de un déficit récord en la balanza norteamericana de cuentas corrientes.
De acuerdo con el Departamento de Comercio estadounidense, el déficit de la balanza de cuenta corriente fue de 195,1 mil millones de dólares.
En la última hora, se desató una ola de tomas de beneficios. Por ese motivo, la moneda única se apreció un centavo para concluir en 1,2239 por unidad, en Londres.
En las casas de cambio locales, el euro se negoció a 3,48/3,55 pesos y el real a 1,08/1,15 unidades.