La demanda laboral en alza, mayor empleo registrado, movilidad y conflictividad exigiendo mejores salarios y el cumplimiento de los convenios colectivos, caracterizan la actual etapa de empleo en la provincia según el secretario de Trabajo, Alberto Gianeschi.

Mes a mes, la estadística que elabora la repartición refleja que se producen más alzas que bajas laborales empujadas por el comercio, la construcción y el rubro metalúrgico. "También observamos que hay una decisión empresarial de blanquear la situación de los agentes", afirma el funcionario en diálogo con El Litoral para analizar las cifras que, con orgullo, exhibe la actual administración provincial.

Las estadísticas oficiales afirman que, en total, más de 180 mil puestos de trabajo se crearon durante la gestión del gobernador Jorge Obeid, de los cuales 124 mil son empleos formalmente registrados.

"En la provincia se refleja algo que al principio se dijo que era una primavera. Se ha mantenido el incremento de puestos en los 19 meses de gestión principalmente en comercio, construcción y metalurgia", asegura.

También hay importantes aportes de rubros como camioneros, trabajadores rurales y gastronómicos, este último especialmente en Rosario en los últimos meses que coincidió con esa especie de boom turístico que vive esa zona.

"Las cifras marcan el incremento de la actividad productiva y también de la registración de trabajadores", aclara el funcionario. Señala que según el Indec, en el 2002, de cada 100 nuevos puestos de trabajo, apenas se registraban 10 y el resto era en negro. La situación fue mejorando y en septiembre del año pasado de 100, eran 62 ya los denunciados y hoy se estima que ya son 85. Por eso, sin bien la cifra oficial de nuevos empleos es 124 mil, se estima que se crearon 180 mil puestos.

"Santa Fe está dentro de la media aunque hay que trabajar para llegar a que todo sea empleo registrado", acota. "El empresario debe saber que un trabajador en negro es más caro que registrado" y señala que las mayores irregularidades se observan en el servicio doméstico y en los trabajadores rurales. Gianeschi se anima a hablar del 95% de empleo en negro en el primero y 70 en el segundo sistema, en este caso avalado por cifras del sindicato y la obra social de UATRE.

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A Gianeschi no le asusta la mayor conflictividad que hoy existe en todo el país. "Es una situación distinta a la anterior donde la producían los despidos, suspensiones y empresas en crisis. Hoy los reclamos son por incremento salarial, reconocimiento de horas extras y cumplimientos de los convenios laborales". Enseguida acota que "la baja de la desocupación le quita la barrera al reclamo. El trabajador sabe que hoy tiene posibilidades de conseguir otro empleo. Hay mucha movilidad laboral porque el obrero o el técnico especializado es muy demandado especialmente en la construcción y en la industria metalmecánica".

El funcionario recuerda que en la reciente reunión del Consejo Federal del Trabajo los empresarios plantearon que hasta ahora el motor de la economía fue el dinero local, pero que ahora se espera que haya más inversiones para reactivar áreas de la economía. Reseña que "el país tiene muchas facilidades para exportar y especialmente hay demanda de alimentos en el mundo".

Desde diciembre del 2003, las cifras de empleo registrado vienen incrementándose en la provincia y en el primer semestre del año sumaron 47.500.

Las cifras dadas a conocer por la Secretaría de Trabajo indican que 5 mil trabajadores ingresaron al trabajo formal durante el pasado mes de julio.

De ese total, casi el 80 por ciento de los nuevos empleos corresponden a la zona sur, y el 20 ciento restante a la zona norte.

Sorpresas

Gianeschi sigue siendo optimista sobre las posibilidades que el mundo ofrece a los productos argentinos y funda su apreciación en dos datos conocidos el viernes en el marco de la muestra rural de la Sociedad Rural de Reconquista.

Revela que un procesador de cueros de Villa Ocampo recibió más pedidos de productos de cuero del mercado europeo, principalmente de Portugal. Además, el ingenio de Villa Ocampo recibió un pedido de 15 mil toneladas de azúcar de parte de Portugal. "Ambas cosas eran impensadas meses atrás y ahora tienen que buscar esas empresas cómo hacer para cumplir esos compromisos", acota.

El presidente Néstor Kirchner aseguró que la desocupación cayó en junio hasta cerca del 11%. Además, adelantó que la baja del índice continuó en lo que va del mes. Al igual que lo anunciado por su ministro de Economía, el dato para el segundo trimestre será del 12,1%. Los jóvenes son los más perjudicados y no se espera que el índice termine el año por debajo del 10% (ver aparte).

De todas formas, tanto Lavagna en su momento como Kirchner advirtieron que en el promedio del segundo trimestre, la desocupación estará en el 12,1 por ciento. Alrededor del 15 por ciento si se consideran desempleados a los beneficiarios del Plan Jefas y Jefes de Hogar.

El dato definitivo, según el cronograma del Indec, se conocerá el 15 de septiembre próximo, pero los adelantos implican una importante mejora respecto del segundo trimestre del año pasado, cuando el desempleo era del 14,8 por ciento.

En el primer trimestre de este año, la desocupación fue del 13% y alrededor de 16,6 con Plan Jefas y Jefes de Hogar. Según los últimos datos del Ministerio de Trabajo, los beneficiados de los planes son 1.559.591 personas.

Cada punto menos de desocupación se traduce en 150.000 personas que encuentran trabajo. Así, 1,8 millones de personas hoy están buscando trabajo en la Argentina. Si se suma a los subocupados, más de 3,5 millones de argentinos tienen problemas de empleo.

De acuerdo a un informe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa), a pesar de que las tasas de desempleo a nivel nacional muestran una tendencia a la baja, la tasa de desempleo entre los jóvenes sigue siendo alarmante, llega al 26,3%. Por género, el informe sostiene que el 24% de desempleo es entre los varones y 30% entre las mujeres.

Así, 1 de cada 3 jóvenes entre 20 y 25 años de edad tiene bajo nivel de educación y el 90% de ellos ya dejó de estudiar. Según el informe, teniendo en cuenta que el cambio tecnológico demanda mayor calificación, esto significa que las nuevas generaciones están comparativamente peor preparadas que las más antiguas.

El informe de Idesa, extraídos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) para el IV trimestre del 2004, ilustran que el 53% de los jóvenes (de 15 a 24 años) no participa del mercado de trabajo. La mayoría porque están estudiando, sin embargo, resulta notable que el 13% no busca un trabajo pero tampoco estudia.

A su vez, los pocos jóvenes que consiguen un empleo tienen una inserción laboral muy deficiente. Dos tercios son asalariados no registrados o trabajadores por cuenta propia no profesional con una remuneración mensual promedio de sólo $ 262.