Cobra fuerza la versión de la venta de la mayoría accionaria de Aguas Provinciales a un pool de empresas de Rosario, que sería encabezado por Sergio Taselli.

La oferta que analizaría Suez goza del respaldo de los sindicalistas del gremio sanitarista de Rosario y de la federación nacional que los agrupa, porque la proveedora de agua y cloacas en la provincia de Buenos Aires -5 de Setiembre, también de origen gremial- actuaría como operador técnico.

Si realmente prospera esa propuesta, �en qué manos quedaría la mayoría accionaria para prestar en Santa Fe los servicios de agua potable y cloacas?

En esta nota, algunos de los antecedentes de un empresario que comenzó su actividad como proveedor de la Empresa Provincial de la Energía en los '80, luego compró una fábrica de transformadores en La Rioja y en los '90 accedió a las privatizaciones de Yacimientos Carboníferos Fiscales -con importantes subsidios del Estado nacional.

En esos años se asoció con la Federación de Trabajadores de Luz y Fuerza para comprar centrales eléctricas de Agua y Energía (a precios irrisorios, en licitaciones de un solo oferente).

Las generadoras térmicas fueron cerrando una a una (con venta de los equipos a otras empresas). Aquí fue socio de los lucifuercistas en la Central Calchines (ver aparte), cuando -por medio de Iate- se creó Centrales Térmicas del Litoral. Y también en Sorrento, en la ciudad de Rosario.

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éltimamente, el apellido Taselli es parte de la información (casi diaria) sobre cómo viaja la gente en tren en Buenos Aires, por las concesiones de Transportes Integrados Metropolitanos (Roca, San Martín y Belgrano Sur) que, en 2004, el gobierno nacional amenazó con reestatizar. Hoy, sigue pagando sus subsidios sin cuestionamientos.

Aunque se han ordenado multas a los ferrocarriles del grupo, los aportes estatales siguen. En setiembre último, la Cámara Federal capitalina ordenó reabrir una causa penal contra el actual secretario de Transporte, Ricardo Jaime, y el subsecretario de Transporte Ferroviario, Julio Tito Montaña, por asignar esos fondos aun con incumplimientos sobre mínimas condiciones de seguridad y confort exigidas por el contrato. Fue tras una investigación de la Oficina Anticorrupción.

El grupo Taselli (ya está muy lejos de ser un pequeño contratista), hoy controla la empresa Parmalat Argentina SA (la compró por un euro, haciéndose cargo de su pasivo de $ 70 millones) y adquirió recientemente el Frigorífico Santa Elena, en Entre Ríos, tantas veces en graves problemas.

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La información disponible en Internet y otras fuentes de información es más que abundante: se dice que controla unas 30 empresas, factura 50 millones de pesos por mes y emplea unas 1.200 personas.

Dentro de la provincia, es conocida su actuación en Electroclor de Capitán Bermúdez en el sur y en la Perla del Oeste incursionó -sin éxito- en el frigorífico Rafaela Alimentos. Allí hubo una ola de despidos y dejó la firma en medio de un conflicto judicial con la familia Lagrutta. Tampoco logró la reapertura de la Curtidora del Oeste Santafesino. En San Jorge, la Afip denunció a Taselli por evasión impositiva por casi 800 mil pesos en Molinos Brunning.

Una detenida mirada sobre sus negocios permite advertir que el crecimiento del Grupo Taselli tiene un elemento predominante: en buena parte la mecánica de sus adquisiciones consiste más que en la compra, en hacerse cargo de las deudas.

En el perfil del empresario que cubre gran variedad de actividades, fue clave para la formación de su grupo la privatización de Yacimientos Carboníferos Fiscales, durante el gobierno de Carlos Menem.

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Por su paso por ese rubro, el empresario fue acusado del vaciamiento de las minas de carbón de Río Turbio, pese a que habría recibido más de 20 millones en subsidios. La privatización a Taselli se extendió desde 1994 al 2002, cuando se decidió anularla.

Se afirma que la llegada de Taselli fue muy a pesar de Domingo Cavallo, quien prefería una concesión a un grupo inversor norteamericano.

El resultado es que, en forma inmediata a la reestatización de hace 4 años, Yacimientos Carboníferos de Río Turbio apareció en una lista de empresas testigo de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo: forma parte de las líderes en afrontar mayores complicaciones.

"La tragedia de los mineros no hubiera ocurrido sin la devastación que provocó la sociedad anónima concesionaria", según Alejandro Barriga, secretario gremial de la Asociación de Trabajadores del Estado de Santa Cruz.

En tiempos de Roberto Dromi como ministro de Carlos Menem, mientras se llevaban a cabo las privatizaciones del sector eléctrico en la Capital Federal, también se licitaban las centrales térmicas más viejas de Agua y Energía. Casi no había interesados.

En Santa Fe, cuando Juan Carlos Borio era el interventor y transcurría la primera gobernación de Carlos Reutemann, la Empresa Provincial de la Energía decidió no hacer una oferta por centrales como Sorrento (en Rosario), Calchines y Santa Fe Oeste, en nuestra ciudad, pese a que en esos predios había instalaciones de la EPE.

Las tres fueron compradas por la Federación de Luz y Fuerza y la firma Iate (de Sergio Taselli). Y las dos usinas locales formaron Centrales Térmicas del Litoral, que fue absorbida por la EPE el año pasado, a cambio de tomar 48 empleados.

Aquella licitación del gobierno nacional de la central Calchines (que incluía un valioso edificio en bulevar Gálvez al 1400 que hoy es del Sindicato de Luz y Fuerza de Santa Fe) fue memorable, porque a los únicos oferentes que se presentaron les alcanzó con 50 mil pesos.

En rigor, también los compradores debieron hacerse cargo de un pasivo de 1,2 millones de pesos-dólar de entonces. De todas formas, ese es un valor más que bajo si se piensa sólo en lo que cuestan esas propiedades.

Aunque Taselli no venía a Santa Fe (el Sindicato local fue quien se encargó de conducir CTL), Iate se quedó con las dos máquinas generadoras más valiosas de la empresa, que fueron afectadas por la inundación de 2003. Y desde que el grupo Taselli se llevó ambos equipos, la ciudad no tiene ninguna máquina importante capaz de generar energía.

Lo que ocurrió con Calchines y Santa Fe Oeste es igual a lo que pasó en Corrientes, Santiago del Estero (donde también hubo una crisis de apagones con un cable OF similar a la santafesina de 1994, que también terminó con un contrato a favor de la central), San Juan y en San Luis. Este año Iate se llevó una máquina instalada en Paraná, desafectada en 2000 que -una vez reparada- iría a Villa Gesell. En Rosario, Sorrento acumula una deuda de dos millones de pesos con el municipio, en materia de tasas.