Lo pasó por arriba a Almagro y ganó 3-1
Unión, con fútbol, le dio el oxígeno a Craviotto

El brasileño Homero Sartori, de "4", pareció una copia de Cafú por momentos: desborde y centro-gol para Rami en el primero.Foto: Mercedes Pardo. 

Por actuación propia y jerarquía ajena, lo mejor del campeonato. El DT dijo que siempre se sintió respaldado. Casanova, Sartori, Rami y Gil, las figuras.

"El fútbol es así", dijo Craviotto. Antes, un colega lo había consultado en la rueda de prensa respecto de cómo Unión le ganó claramente a Almagro a la luz del día, recordando que él siempre prefiere jugar de noche en el 15 de Abril.

"El fútbol es así", una frase que podría justificar que en el momento más complicado del ciclo, con la baja más importante del año -la sanción a Bazán Vera- y ante el más exigente rival posible, Unión ganó, gustó y goleó. Y, además, lo hizo con actuaciones brillantes de Brunito Casanova -jugador al que hizo debutar, le dio la responsabilidad de ser conductor y le tiró la camiseta número 10- y de tres de los refuerzos que él pidió pero hasta hace un puñado de fechas estaban olvidados: Homero Sartori, Esteban Gil y Cristian Rami.

"El fútbol es así", dijo Craviotto. En la idea se podría responder la pregunta del millón que estaba dando vueltas por el 15 de Abril: ¿Quién va a hacer los goles de Unión las cinco fechas que el "Indio" Bazán Vera tenga que estar afuera del equipo por la sanción de la AFA? Por lo pronto, si la respuesta pasa por 90 minutos, todos los caminos conducen a Cristian Rami, que ayer se desahogó con un doblete que tiene muchos síntomas que encajan en el concepto de "goleador mufado". Porque el ex Racing de Córdoba recién ayer pudo festejar con la camiseta de Unión en la última fecha del torneo.

Los dos goles del "Flaco" Rami contra Almagro, a puro cabezazo, están más a tono con el 1.87 metros que tiene de altura: uno con pelota en movimiento después de un centro perfecto a la carrera de Homero Sartori por derecha y el otro después de una pelota quieta de Cristian Saboredo en un córner desde la izquierda.

También los dos gritos están a mano con su ficha técnica: en todos los clubes que estuvo hizo goles, menos en Unión (al menos hasta ayer que clavó un festejo por duplicado).

Lo mató

A priori, uno esperaba encontrar estados anímicos distintos entre los equipos. Porque Unión jugaba tres puntos y Almagro una final que podía darle medio ascenso. Siempre y cuando ganara en Santa Fe. Sin embargo, por actitud y fútbol, el que pareció candidato fue el rayado rojiblanco y no el rayado tricolor.

Ese pressing físico inicial de Unión fue tan insoportable como los 40 grados de sensación térmica en la tarde santafesina para el equipo del "Tata" Brown. Más allá del argumento de almanaque de los jugadores visitantes -"jugamos miércoles y domingo, y lo sentimos"-, Craviotto sorprendió a su colega con el plan de estrategia. Porque Almagro nunca esperó que Unión lo atacara desde el vamos. Y ese asfixio, de correr, meter y avanzar, tuvo su premio cuando Homero Sartori sacó un centro-gol que antes pasó por la cabeza de Cristian Rami.

Si Unión no simplificó antes la chapa del resultado y el trámite del partido fue porque el árbitro Carlos García, que ya venía tarjeteando a favor de Almagro, decidió "inventar" un penal de ésos que sólo determinados árbitros se animan a cobrar.

Y si algo le faltaba a Unión era demostrar cómo estaban sus ahorros anímicos ante la primera adversidad. Por lo que se vio, quedaba resto. Porque a pesar que la movilidad de Méndez -el "15" de Almagro que entró por Junco en el entretiempo- pareció equilibrar el trámite de movida, rápidamente el equipo de Craviotto retomó el gobierno del partido en el mediocampo.

Entonces, después de una avivada de Marcos Flores, no le quedó otra a Carlos García que cobrar un penal que fuera penal. Le pegó Esteban Gil "como los Dioses" y Unión se puso 2-1. Al toque, con Almagro boqueando, llegó el segundo de Rami de cabeza para cerrar la tarde con el 3-1.

¿Y ahora?

Dicen que en la reunión semanal que los directivos tuvieron con Néstor Oscar Craviotto en la casa de Malvicino hubo dos grupos bien diferenciados en el seno de la dirigencia rojiblanca: los que lo bancan a muerte con el vice Jorge Molina a la cabeza y los que lo resisten (algunos de ellos no coincidían desde el vamos con su llegada).

Si en algo la suerte de Craviotto dependía de un resultado o de una actuación ante Almagro, no hay peligro en abortar el proceso.

Porque ayer, con mucha actitud, fútbol y dignidad deportiva en un final de campeonato polémico, Unión le dio en el césped a Craviotto el oxígeno que necesitaba. Oxígeno que, por otra parte, no le sobra a este equipo en la tabla cuando se analiza la campaña en relación a los objetivos que se habían trazado.

BAJO LA LUPA

ASEF (5): poco trabajo específico de manos, bajo los caños. Se nota que tiene personalidad el pibe. Ayer se lo notó apresurado e impreciso con los pies.

SARTORI (7): la verdad que la rompió ante su ex club. Es más, fue decisivo con una de sus tantas mandadas en el centro del primer gol de Rami. Volvió a jugar en un gran nivel. MOSSET (6): con mucha decisión en cada pelota dividida y más ordenado que antes. Como si el tirón de orejas de salir del equipo ante Godoy Cruz le hubiera venido bien. RENZO VERA (5): otra vez, demasiado apresurado en barrer hombre y pelota. Se ganó una de las pocas amarillas que no se discuten. Debe controlarse un poco. PAGANO (6): terminó, desde que agarró la titularidad, en un nivel más que aceptable. Se lo nota bien en el mano a mano para marcar y cuando puede se manda. GIL (7): termina jugando en un gran nivel, seguramente el mismo que tuvo con la camiseta de Gimnasia de Jujuy para ascender. Mientras estuvo fue capitán y figura: marcó el gol de penal y lo gritó con todo. BATTION (6): bien parado, con un manejo impecable de la pelota y haciendo jugar el equipo desde el medio a los costados. Mucha precisión en las entregas. SABOREDO (4): fue el único jugador de todos los de campo que no estuvo a la altura de la gran actuación. Con un par de contragolpes, intentó hacer el gol de su vida y salvarse solo. BRUNO CASANOVA (7): desequilibrante e imparable el "10" de Unión. En el primer tiempo, los pasaba a los jugadores de Almagro como si estuvieran parados. Mucha movilidad y muchas ganas de pedir la pelota para jugar. MARCOS FLORES (6): aguantó bien la pelota arriba y se tiró atrás para fabricar espacios en ataque. La jugada previa al penal es un mérito todo suyo: nunca la dio por perdida, se avivó, fue rápido y obligó a la falta. RAMI (7): apareció con todos los síntomas de un goleador con la pólvora mojada: festejó en un partido importante y habiendo tocado pocas pelotas en todo el partido. TORRES (5): entró a jugar en una posición que no conoce ni siente, de carrilero derecho en lugar de Gil. Hizo lo que pudo. PALOMBIZIO (-): es el goleador de la quinta afista de Unión. Craviotto lo llevó al banco y lo hizo debutar. SARTOR (-): un ratito para reforzar el mediocampo, aunque ingresó en lugar de Marcos Flores.

Darío Pignata[email protected]