Esta mañana familiares, amigos y vecinos de Diego López y Rubén Miño -los dos adolescentes que fallecieron tras ser embestidos por un automóvil- realizaron una nueva marcha hacia los tribunales santafesinos para exigir justicia. El accidente ocurrió en Aristóbulo del Valle y Angel Cassanello, la madrugada del 7 de enero pasado.

Con grandes pancartas y un megáfono que repetía el nombre de las víctimas y el de Luciano Sidor, quien conducía el vehículo que los arrolló, avanzaron por calle San Jerónimo, desde la esquina con bulevar Pellegrini. Móviles policiales los acompañaron en el trayecto e inspectores municipales ordenaron el tránsito cuando interrumpieron la circulación en el microcentro.

Para explicar a la ciudadanía las razones por las que marchaban, repartieron folletos donde responsabilizan "por la muerte de nuestros hijos" a "Luciano Sidor, el asesino al volante".

La mamá de Diego López, María del Carmen Méndez, sintetizó el pedido a la Justicia: "Queremos que se cambie la carátula del caso de homicidio culposo a doloso para que vaya preso porque una persona que va manejando a más de 100 km por hora en una avenida sabe que si se le cruza alguien lo mata. Dos inocentes murieron y él está libre gozando de buena salud y de las diversiones propias de un chico mientras nosotros lloramos a nuestros hijos".

En el folleto que entregaron remarcan "algunas de las infracciones cometidas por Sidor: mató a nuestros hijos por imprudencia; conducía a más de 100 km/h en una avenida con semáforos intermitentes en ese momento, lo permitido es 50 km/h; arrastró a uno de ellos 80 metros debido a la altísima velocidad; declaró que lo acompañaba la novia, se olvidó que iba con dos amigos más; llevaba mucho alcohol en el vehículo, �ser sobrino de la jueza Sonia Alviero evita que le realicen análisis de alcoholemia? No fue detenido ni por averiguación de antecedentes. �Por qué?", se preguntan.

Entre las novedades judiciales que presenta el caso se destaca el informe que los peritos entregaron al juez de la causa, los cuales certificarían que el automóvil que conducía Sidor circulaba a más de 80 km por hora al momento del accidente.

"Vamos a pedir, por medio de nuestros abogados, que se revea el peritaje porque cuando ocurrió el accidente el velocímetro del auto se clavó en 120 km. Veo cosas raras que no puedo probar pero las voy a investigar porque esto fue un homicidio de tránsito", aseguró esta mañana la mamá de Diego.

María del Carmen no puede reponerse de la tragedia: "Estoy mal, pero tengo que tener fuerzas, a la noche me abrazo a la zapatilla de mi hijo pero de día sigo adelante, me ven de pie".