UE: prolonga suspensión de sanciones contra Cuba

AFP

Pese a admitir el nuevo "deterioro" de la situación de los derechos humanos en Cuba, la Unión Europea prolongó hoy en Luxemburgo por un año más, hasta junio de 2007, la suspensión de las sanciones impuestas a la isla en 2003 tras la detención masiva de disidentes.

La decisión fue aprobada en una reunión de cancilleres de los 25 a pesar de la oposición de República Checa, que pedía el regreso a una política de mano dura contra el régimen de Fidel Castro ante la falta de resultados de la política de diálogo actual.

"La política blanda no ha traído ningún buen fruto", insistió hoy ante sus homólogos el ministro checo de Relaciones Exteriores, Cyril Svoboda, quien había exigido debatir el tema pese a saber que no reuniría la mayoría suficiente para volver al régimen de sanciones, según fuentes diplomáticas.

En las conclusiones aprobadas en el encuentro de Luxemburgo, la UE admite en parte la línea de los checos, al reconocer un "deterioro" de la situación de los derechos humanos, pero sin embargo opta por continuar con la "política del diálogo" y prolongar la suspensión de las sanciones.

"El Consejo (de la UE) deplora el nuevo deterioro de la situación de los derechos humanos en Cuba desde su última evaluación en junio de 2005", afirma el texto, en el que se toma nota de que "el número de prisioneros políticos en Cuba ha aumentado en los últimos doce meses, según organizaciones de derechos humanos cubanas".

"Existen ahora 330 casos establecidos de personas detenidas a partir de 2005 sin inculpación ni juicio. Además, cientos de jóvenes cubanos han sido detenidos y condenados sobre la base de la calificación penal de "propensión a la delincuencia", recalcan los cancilleres.

En ese marco, denuncian también las "varias docenas de actos de violencia e intimidación, incluyendo actos de repudio", contra individuos y organizaciones como las Damas de Blanco, esposas y familiares de presos políticos, galardonadas por el Europarlamento con el Premio Sajarov 2005 por su acción en defensa de los derechos humanos.

Sin embargo, y como quedó dicho, la decisión mayoritaria es prolongar la suspensión de las sanciones, congeladas desde enero de 2005 por iniciativa del gobierno socialista español de José Luis Rodríguez Zapatero que llegó al poder en reemplazo del conservador José María Aznar.

"El Consejo decidió prolongar la suspensión de las medidas diplomáticas del 5 de junio de 2003 hasta la próxima reunión de evaluación de la posición común en junio de 2007", reza el texto, que menciona el inicio de trabajos para definir una estrategia sobre Cuba a mediano y largo plazo.