El centenar de miembros de diversas facultades porteñas que impulsan la candidatura a rector de la Universidad de Buenos Aires (UBA) del decano de Medicina, Alfredo Buzzi, anunciaron anoche que convocarán a la Asamblea Universitaria para el 8 de agosto.

El ex decano de Agronomía Fernando Vilella, uno de los candidatos que depuso su postulación en favor de Buzzi, precisó a DyN que la Asamblea "puede convocarse según el artículo 90 del Estatuto Universitario con un tercio de los 236 consejeros" y que su sector "está en condiciones de hacerlo".

Anticipó además que el llamado para el 8 de agosto a los asambleístas "tendrá un amplio orden del día", que entre otros puntos tratará "la reforma en la UBA, la elección del rector, la situación de los profesores interinos y ad honorem".

Consultado si se puede hacer la convocatoria sin consultar al vicerrector de la UBA, Aníbal Franco, explicó que "precisamente él tiene que fijar la fecha en consulta con los miembros de la Asamblea".

En otro orden, los decanos de seis facultades alineados con Buzzi "lamentaron" en un comunicado la decisión de los estudiantes que participaron de la toma del Colegio Nacional de Buenos Aires, "en la medida en que los caminos de diálogo iniciados estaban llevando a un fructífero acercamiento de posiciones".

Agregaron que están "plenamente convencidos de la necesidad de una pronta Asamblea que normalice la vida institucional de la UBA, puesto que sólo con autoridades legítimamente electas puede llevarse a cabo el conjunto de actividades que la vida académica, de investigación y extensión requiere".

"Para esos fines, sólo un rector designado por la Asamblea será quien cuente con legitimidad suficiente para que se proceda al nombramiento del equipo de gestión que permita superar la grave crisis", afirmaron en abierta alusión al temor de que Franco pueda designar a los secretarios del Rectorado.

Firmaron la declaración los decanos Alfredo Buzzi, de Medicina; Ricardo Basso, de Agronomía; Jorge Aliaga, de Ciencias Exactas y Naturales; Hugo Trinchero, de Filosofía y Letras; Jaime Sorín, de Arquitectura; y Federico Schuster, de Ciencias Sociales.

El ministro del Interior, Aníbal Fernández, y el vicerrector de la UBA, Aníbal Franco, discreparon a raíz de la convocatoria de fuerzas policiales para custodiar la Asamblea, suspendida ayer cuando debía elegir nuevo rector.

Fernández, quien reconoció que Franco solicitó el viernes presencia policial, aseguró que no accedió al pedido porque "algunas facultades se opusieron".

Franco, por su parte, advirtió que "nueve de los trece decanos" del Consejo Superior pidieron, en vano, un operativo de seguridad para garantizar la elección del rector.

El ministro admitió que recibió la nota y que instruyó "a la Policía Federal para que diseñara el operativo, pero después seis de trece facultades nos hicieron saber su negativa a que participaran las fuerzas de seguridad, lo mismo que las federaciones universitarias".

El funcionario pidió que sean "los claustros los que resuelvan su situación con una adecuada estrategia común" y dijo que si hay un acuerdo para solicitar la presencia de la policía, el gobierno accederá al pedido.

Fernández descartó la presencia policial en futuros intentos de reunión de la Asamblea Universitaria y sostuvo que "en esos términos no vamos a participar".

El pedido, según el ministro, fue rechazado por los decanos de las facultades de Medicina, Ciencias Sociales, Agronomía, Exactas, Arquitectura y Filosofía y Letras, y finalmente desestimado.

El vicerrector dijo que "(Fernández) ha dado un dato que no es el adecuado. Señala que hay seis decanos, que la universidad está partida y no es así".

La presencia policial había sido solicitada la semana pasada por el vicerrector, para garantizar el funcionamiento de la Asamblea Universitaria, convocada para ayer y suspendida por quinta vez.

El decano de Ciencias Sociales, Federico Schuster, afirmó que "sería un grave error" que en el marco de la crisis que transita la Universidad de Buenos Aires, el Consejo Superior designe a los secretarios que acompañarán al futuro rector, una decisión que había reclamado el vicerrector Aníbal Franco. "Creemos que no es conveniente que se avance en pasos que seguirían dañando a esta prestigiosa institución, como lo es la designación de los secretarios", precisó Schuster en alusión a la decisión que puede tomar el Consejo Superior.

El órgano máximo de la UBA puede designar a los distintos secretarios que secundan las tareas del rector, pero Schuster lo consideró un grave error porque aún no está designada la máxima autoridad de la universidad y los nombramientos condicionarían su capacidad de gestión.