Sin cabeza
Sin fútbol (hubo apenas una sola de gol en todo el partido) y con escasísimo poder ofensivo, el equipo de Trullet supo controlar la situación a partir, como se dijo, del buen sistema defensivo y de algunos momentos en los que apareció Rosales para hacerse de la pelota. El domingo, los tatengues recibirán en su estadio a Aldosivi y Trullet ya piensa en salir a jugar con un cambio de esquema, tratando de darle mayor gravitación al ataque.