El santafesino Walter Herrmann fue el goleador albiceleste y del partido, con 23 puntos. Mañana, a la 1, los argentinos enfrentarán a sus pares venezolanos.
De la redacción de El Litoral
El Seleccionado Argentino de Básquetbol obtuvo esta mañana un cómodo y por momentos brillante triunfo ante Líbano, por 107 a 72, el segundo en la primera fase del Campeonato Mundial 2006 que se desarrolla en Japón.
Su rendimiento implicó una evolución respecto del partido ante Francia. El próximo rival de Argentina será Venezuela, mañana a partir de la 1 de la madrugada (hora de nuestro país).
El partido
Al Seleccionado Argentino alcanzó un estupendo primer cuarto: en esos diez minutos, el rendimiento fue de muy alto relieve, casi perfecto. Cierto es que Líbano dio varias ventajas, defendió con una zona muy rudimentaria y estática, y en ofensiva jamás encontró la manera de sortear la presión por lo que se repitió en lanzamientos de larga distancia y sin fortuna (1/9 triples). Sin embargo, el trabajo de Argentina fue bueno, bien intencionado y eficiente, algo que no siempre se consigue al margen del nivel del oponente.
Argentina fue superior porque apoyado en el dominio absoluto de su propio tablero, estableció varios ataques rápidos, corrió la transición como facilidad e incluso encontró soluciones en los ataques fijos con Ginóbili y Scola como protagonistas.
Esto explicó el por qué se pasó de un 7-7 a 19-7 y se llegó a una ventaja de veinte (29-9) con un triple de Prigioni justo cuando terminaba el primer cuarto.
En el segundo período el rendimiento colectivo ya no fue el mismo. Primero porque Líbano encontró algunos triples rápidos (3/7 en los segundos diez minutos) y segundo porque los recambios, en algunos casos, parecieron no tener similar sintonía.
Argentina consiguió una máxima de veinticuatro (41-17) y bajó a quince (44-29).
La segunda mitad
Pero en el tercer cuarto el trabajo del conjunto nacional otra vez alcanzó ribetes de brillantez. En ese momento retomaron los titulares, a Argentina le bastó apenas cuatro minutos para escaparse por treinta y cinco (73-38) y los últimos quince minutos encontró a dos equipos ya relajados, sabedores que la suerte estaba decidida. Sin embargo, sirvieron para que varios jugadores ganen confianza. Por ejemplo Walter Herrmann, que no comenzó bien, apuntó tres triples consecutivos (fue el goleador con 6/8) y con otro de Delfino más un libre de Fernández determinaron la máxima de cuarenta (96-56).
Lo que viene
La siguiente es la nómina de partidos que se disputarán mañana, en el marco de la tercera fecha del certamen ecuménico, con horarios detallados de acuerdo al huso horario de nuestro país.
Síntesis
Sendai City Gymnasium.
Argentina 29-Líbano 9, 50-32, 80-51, 107-72.
Abdelliha Chlif (Marruecos), Nobuyasu Aibara (Japón) y Virginijus Dodidavicius (Lituania). .
Juan Sánchez 6, Emanuel Ginóbili 7, Andrés Nocioni 7, Luis Scola 18, Fabricio Oberto 12 (fi); Walter Herrmann 23, Carlos Delfino 14, Rubén Wolkowyski 7, Gabriel Fernández 5, Pablo Prigioni 4, Leonardo Gutiérrez 2, Daniel Farabello 2.
Sergio Hernández.
Jean Abdel Nour 9, Roy Samaha 3, Joseph Vogel 5, Bassem Balaa 0, Fadi El Khatib 10 (fi); Rony Fahed 18, Brian Beshara 8, Hussein Tawbe 7, Ali Fakhreddine 5, Sabah Khoury 5, Omar El Turk 2 y Ali Mahomoud 0.
Paul Coughter.
Hablan los técnicos
El seleccionador argentino, Sergio Santos Hernández, se mostró satisfecho con la actitud de su equipo en el partido que disputó hoy ante Líbano en la segunda jornada del Mundial y que resolvió con una holgada victoria.
"Estoy muy contento porque la víspera logramos una victoria contra un gran equipo europeo (Francia) y hoy jugamos con una gran concentración ante el Líbano, al 100 por 100 los cuarenta minutos", afirmó el técnico que temía que sus jugadores se relajaran.
Hernández alabó también el espíritu de su rival pese a que no tuvo opciones de ganar en ningún momento dada la superioridad que mostró Argentina.
"Me gustó la actitud del Líbano porque siguió luchando pese a ir perdiendo por veinte o treinta puntos. Creo que el público vio un bonito espectáculo. No por el resultado pero porque vieron que los dos equipos quisieron jugar todo el partido", agregó el técnico.
Elogios norteamericanos
El seleccionador del Líbano, el estadounidense Paul Coughter, también tuvo palabras de elogio para su contrincante.
"La realidad de este equipo (Argentina), su belleza, reside en la generosidad de sus jugadores. Es el mayor cumplido que puedo hacer a su entrenador. En mi equipo, aunque ninguno de mis jugadores llega al nivel de los argentinos, no ocurre lo mismo", afirmó con absoluta convicción el coach libanés.
Torre de TV
La torre de televisión de la capital de Lituania, de una altura de 326 metros, vistió estos días con una cesta de baloncesto, la mayor del mundo, en honor al Campeonato Mundial 2006 que se disputa en Japón. La cesta, formada con guirnaldas con más de un millar de bombillas, fue colgada en torno del mirador de la torre, a la altura de 165 metros, y podrá ser observada cada noche desde cualquier lugar de Vilna hasta el final del torneo. Lo único que temen los especialistas en iluminación lituanos es el mal tiempo, pues vientos de más de 20 metros por segundo podrían romper las guirnaldas, de casi una tonelada de peso.
Resumen de la jornada
Los demás resultados que se registraron en la segunda fecha del Mundial de Japón, son los que se detallan a continuación.
"Manu" tiene la palabra
El alero de la selección argentina Emanuel Ginóbili, consideró que la victoria ante Líbano, en la segunda jornada del Mundial 2006, fue importante por haber podido resolver el partido con rapidez.
"No es fácil hoy por hoy en un Mundial definir un partido tan temprano, aunque fue bastante aburrido para la gente", declaró a la Agencia EFE el jugador de San Antonio Spurs.
"Hemos atacado la zona bastante bien y hemos dado muestras de que no menospreciamos al rival. Jugamos bien fuerte de entrada moviendo bien la pelota y defendiendo duro y eso es importante contra todo oponente", explicó.
Ginóbili reconoció que el equipo se halla anímicamente en un buen momento después de ganar a Francia, uno de sus rivales para hacerse con la primera plaza del Grupo A.
"Sí que ayudó a reforzar la moral y gastó también un poco de piernas. Pero a todo el mundo le gusta empezar ganando y contra un buen rival, así que estamos contentos", declaró la gran figura del baloncesto argentino.
"Ese era un momento importante para nosotros, por lo que hoy nos pudimos dar el lujo de descansar un poquito más", añadió.
Por su parte, el alero santafesino Walter Herrmann manifestó que "nos planteamos tratar de jugar los 40 minutos (del partido ante el Líbano) de la misma manera. No solamente era ganar, sino también jugar bien. Entramos con una mentalidad positiva, sabiendo que todos teníamos que aportar nuestro granito de arena", dijo Herrmann.
Cuando se le preguntó por su actuación, Herrmann señaló que "uno trata de jugar siempre al cien por ciento, aunque me toque entre 5 ó 20 minutos. Soy conciente de que siempre debo estar listo, porque nunca se sabe cuándo te toca entrar".
