Una alternativa preincaica
El "sacha inchi", una planta de la región amazónica peruana utilizada desde la época preincaica, ha sido redescubierta por su alto valor proteico y puede convertirse en un sustituto a la siembra de hoja de coca, según estudios científicos.

Reynaldo Muñoz. AFP

El conocimiento de esta planta ha estado limitado por siglos a los indígenas amazónicos y era consumida por los antiguos peruanos de la cultura Mochica -anterior al imperio de los Incas-, según lo atestiguan cerámicos encontrados en tumbas de esa cultura que floreció en la costa norte peruana.

Sin embargo, el "sacha inchi" ha sido objeto de un redescubrimiento en los últimos años, a raíz de análisis realizados por la Universidad norteamericana de Cornell, que demostraron que las semillas de esa planta tienen alto contenido de proteínas (33 %) y aceite (49 %).>

Esas características y su alto contenido oleaginoso de grasas insaturadas lo hacen ideal para mejorar la dieta alimenticia de niños, jóvenes y adultos, así como para la recuperación de enfermos, combatir al colesterol y la obesidad, según José Anaya Yábar, un estudioso de la planta.>

Anaya precisó que sus investigaciones, corroboradas por laboratorios europeos, demostraron que el aceite que se extrae del sacha inchi es uno de los que tiene el mayor contenido de Omega 3, llegando a presentar 48,6 % de ácido graso esencial alfa linolénico Omega 3, así como porcentajes menores de Omega 6 y Omega 9.>

Alta producción

Conocida como la "almendra del Inca", el sacha inchi es una enredadera muy precoz que, luego de su siembra, entra en producción a los ocho meses y por un período mínimo de veinte años.

"Tiene una alta producción porque el campesino que la siembra puede cosecharla semanalmente, es decir, en forma permanente. Es una planta muy poderosa, no la afectan las plagas, es rústica y no requiere muchos abonos", explicó Anaya al dar detalles de las bondades de la semilla.>

Esto hace que en un futuro cercano se convierta en una alternativa en el combate al narcotráfico y pueda incluirse en los programas de desarrollo alternativo porque puede ser el sustituto eficaz, por encima de otros productos, a la siembra de la hoja de coca, precisó Anaya.>

El sacha inchi crece en el mismo escenario de la hoja de coca, en las regiones de ceja de selva y el llano amazónico. A diferencia de la coca -que en el proceso químico de ser convertida en clorhidrato de cocaína provoca deforestación-, genera reforestación, evitando la devastación de los bosques amazónicos.>

Los investigadores han seleccionado variedades hasta con 54 % de aceite; la proteína presenta un importante contenido de aminoácidos esenciales y no esenciales; es rico en vitaminas A y E, en cantidades suficientes para la salud humana.>

Además, supera en mayor porcentaje de ácidos grasos insaturados y en menor porcentaje de grasas saturadas a todas las semillas oleaginosas conocidas actualmente, señaló Anaya.>

Patrimonio natural

Debido a sus características, el sacha inchi fue declarado como patrimonio natural de Perú.

La semilla de esta planta amazónica ha comenzado a ser utilizada en la elaboración de aceite, pero con una producción pequeña que se destina casi en su totalidad a la exportación.>

También se usa para la fabricación de cosméticos; para ese fin se exporta a Francia, Suiza y Japón.>

Desde 2005, Anaya logra producir en una empresa de su propiedad diez toneladas de aceite, pero con la introducción de nueva tecnología espera llegar, a partir de 2007, a un mínimo de cien toneladas con posibilidades de crecimiento.>