Tratamiento de líquidos cloacales
La planta depuradora trabaja a pleno
Cada lecho percolador cuenta con un regador giratorio hidráulico; por allí se vierte el efluente líquido, que pasa por la piedra tratada con una película biológica. Foto: Agencia Santo Tomé

Ubicada al borde del arroyo El Tientuco, dicha instalación es la única en su tipo en la provincia, construida y operada por un municipio. Para su funcionamiento, cuenta con dos lechos percoladores de 27,50 metros de diámetro.

En el marco de la ejecución de la obra de Cloaca Máxima, ya se puso en funcionamiento el segundo lecho percolador de la Planta Depuradora de Líquidos Cloacales de Santo Tomé, en la que a fines de 2006 se habían colocado 1.100 metros de piedra pómez, material poroso que permite la desactivación de los efluentes; después, las tareas estuvieron centradas en la disposición de los motores e instalaciones eléctricas necesarias para su utilización. Debido a lo precedentemente descripto, nuestra ciudad cuenta ahora con la capacidad de procesar los residuos de los distintos sectores que abarcan a toda la población santotomesina.

Por eso mismo, el municipio local recuerda que la estación de tratamiento de efluentes ocupa aproximadamente dos hectáreas en la zona sureste, a la vera del arroyo El Tientuco, donde los líquidos ya depurados son volcados al río Salado, "sin consecuencias ambientales" para dicho curso de agua. "La puesta en funcionamiento a pleno de la planta depuradora era uno de los objetivos que tenía la megaobra encarada por el actual gobierno municipal, con una inversión total cercana a los $ 6.700.000; por eso vale mencionar, también, que al finalizar la construcción de la Cloaca Máxima, más de 1.800 familias se beneficiarán con este servicio sanitario, al tiempo que se contará con la infraestructura para llevar las cloacas al resto de la ciudad", explican también desde la Municipalidad.>

Manto de piedras volcánicas

Dentro de las instalaciones con las que cuenta la planta depuradora de efluentes líquidos, sobresalen los dos lechos percoladores, que son estructuras de hormigón armado de 27,50 metros de diámetro cada uno, que se asemejan a piletones y que integran el proceso primario de depuración, que es del tipo biológico aeróbico. Estos lechos están cubiertos con casi 2 metros de altura de piedra volcánica suelta, el cual adquirió la forma de un manto pétreo que tiene la función de ser el soporte de la película biológica que produce el tratamiento inicial; las piedras se apoyan sobre un falso fondo de losetas ranuradas de modo tal que el líquido es distribuido mediante un regador giratorio hidráulico.

Así, los efluentes pasan por el manto de piedra, son recolectados en el fondo y luego pasan hacia las unidades de sedimentación secundaria. "La planta de tratamiento de líquidos cloacales de Santo Tomé es la única en su tipo en la provincia, construida y operada por un municipio; el equipo de empleados municipales destinados al manejo del complejo fue capacitado específicamente para realizar el control total del proceso de tratamiento", detallan oficialmente, para luego remarcar que en forma permanente se efectúan controles de calidad y eficiencia en el funcionamiento del lugar. "Estas condiciones convierten a la planta de los santotomesinos en un modelo de gestión estatal único dentro de la provincia", finalizan.>

Ariel Durán-Sergio Ferrer