Tras el impacto político
Con menos escándalo, el caso Skanska avanza en tribunales
Kirchner logró frenar el avance opositor al desplazar a funcionarios sospechados. No obstante, la Justicia no detiene la investigación que hoy aparece limitada a un caso de evasión tributaria con "indicios" de cohecho. Las elecciones y la debilidad de algunas pruebas colaboran con la tregua.

Julia Izumi (CMI)

Los desplazamientos del ex titular del Enargas, Fulvio Madaro, y del gerente de Fideicomisos Nación, Néstor Ulloa, sumados a la renuncia del subsecretario de Obras Públicas, Raúl Rodríguez, marcaron un punto de inflexión en el caso Skanska que hoy -además de ocupar menos espacio mediático- aparece enfocado como un tema de evasión tributaria que afecta a una multinacional, y cuyas vinculaciones con el gobierno de Néstor Kirchner no superan, por ahora, el plano de la hipótesis judicial.

La excarcelación de Adrián López, uno de los imputados en la causa que investiga el juez penal tributario Javier López Biscayart, y el frustrado peritaje de la Policía Federal sobre la grabación en la que un ex ejecutivo de la firma sueca y el síndico de la compañía aluden al supuesto pago de coimas a funcionarios, no constituyen, sin embargo, un retroceso para el caso. En primer lugar, la Cámara de Casación ordenó la excarcelación de López pero no anuló su procesamiento: simplemente aplicó un razonamiento garantista y condicionó este beneficio a una fianza que la Cámara Federal fijó en 300 mil pesos, que hasta el viernes el ex titular de Infinity Group, la empresa fantasma que habría proporcionado facturas apócrifas para simular gastos, no había podido reunir.>

Las pruebas

En cuanto al peritaje de la grabación en el que, según la Policía Federal, no fue posible reconocer las voces de las dos personas que hablan del pago de coimas -presuntamente el ex ejecutivo de Skanska Javier Azcárate y el síndico Claudio Corizzo-, fuentes judiciales advirtieron que no será el único ya que el magistrado confía en obtener mejores resultados de los expertos de Gendarmería Nacional.

López Biscayart cuenta con otros elementos de prueba para avanzar en su investigación, cuyo objeto inicial fue la evasión tributaria agravada por parte de la constructora sueca. No por casualidad, dictó la semana pasada diez procesamientos de ex ejecutivos de la firma y todavía tiene pendiente de resolución la situación procesal del ex CEO Mario Piantoni y el ejecutivo Ignacio Uribelarrea.>

En las últimas horas ordenó, por ejemplo, la confección de una lista con los números telefónicos de todos los involucrados en el caso -incluido Ulloa- para detectar si en la época en que se llevó a cabo la construcción del Gasoducto del Norte se produjo contacto entre ellos. La nómina incluye a Piantoni y Ulibelarrea, no sólo a los procesados y detenidos.>

También el juez federal Guillermo Montenegro -quien investiga el capítulo referido al presunto pago de coimas- intenta entrecruzar llamadas para verificar el vínculo entre los ex ejecutivos de Skanska y los funcionarios oficiales ya desplazados.>

Menor peso político

Aunque la Justicia avanza en el esclarecimiento, es cierto que el caso registró una pérdida de peso importante en el plano político. La elección porteña y la decisión de Kirchner de separar a los funcionarios sospechados fueron el detonante, si bien la debilidad de algunas imputaciones -hay que recordar que la única mención del ministro de Planificación, Julio de Vido como el supuesto beneficiario de las "comisiones indebidas" proviene del detenido López- contribuyó también a generar cierto enfriamiento dentro de la agenda política.

No se descarta que detrás de la descalificación de las grabaciones como prueba judicial "seria", realizada por la Policía Federal, exista la mano invisible de algún operador de la Casa Rosada, como se sospecha en Tribunales.>

Diplomacia

Esta semana estuvo en Buenos Aires el CEO de Skanska, Stuart Graham, quien admitió el efecto "devastador" que tiene el caso para la empresa que dirige, aunque lo limitó a "un pequeño grupo de gente que se apartó" de los procedimientos de la compañía. Graham se mostró diplomático al señalar que no siempre en los casos de corrupción vinculados al sector de la construcción está involucrado el Estado.