El británico Bernie Ecclestone, responsable de la F-1, descartó la posibilidad de que en el futuro se dispute un GP en las calles de Londres por entender que su montaje sería excesivamente caro. "Hablé varias veces del asunto con el alcalde de esta capital, pero ambos llegamos a la conclusión de que no sería viable porque costaría muchísimo dinero", afirmó Ecclestone.

Uno de los dueños de McLaren-Mercedes, Ron Dennis, descartó toda implicación personal o de su equipo en el caso de espionaje industrial de Ferrari. "A este equipo yo lo vivo y lo respiro, no haríamos nunca nada incorrecto. Pasé algunos días difíciles porque mi integridad personal y la de mi equipo son muy importantes para mí. Estamos decididos a "cooperar totalmente' con la investigación". El martes, McLaren publicó un comunicado en el que anunciaba que un importante responsable técnico de la escudería era sospechoso de "espiar" a Ferrari. La "Scuderia" confirmó que había denunciado ante la Justicia italiana y la británica el caso de espionaje industrial, en el que está implicado uno de sus propios empleados, Nigel Stepney, quien al parecer entregó documentos técnicos a un empleado de McLaren (Mike Caughlin).

Según la prensa italiana, respecto del tema espionaje, la policía registró de nuevo la casa de Stepney -de vacaciones en Filipinas-, en Serramazzoni. Su domicilio ya fue inspeccionado el 22 de junio, después de que apareciera un "misterioso polvo" en los tanques de combustible de los F-1 de Raikkonen y Massa, días antes del GP de Mónaco. "Mi equipo no está implicado en lo que está sucediendo", subrayó Dennis al inaugurar el nuevo motor home McLaren-Mercedes, el Brand Center, un inmueble de tres plantas que es una réplica en miniatura de la fábrica de Woking (Inglaterra) conocida como "Technology Centre". "Estoy absolutamente seguro de que, con el tiempo, todo el mundo verá que McLaren nunca utilizó la propiedad intelectual de nadie ni lo hará jamás", añadió Dennis. El caso está en manos de la Justicia y de la Federación Internacional del Automóvil.

El finés Kimi Raikkonen (Ferrari), cuarto en el Mundial de Fórmula Uno, a 22 puntos del líder, el británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes), cree que aún tiene posibilidades de ganar el título. "Intentamos ir lo más rápido posible y de sumar la mayor cantidad posible de puntos. A veces, uno comete errores; a veces, va al límite; pero eso no me preocupa. No tenemos mucho que perder. Quedan muchas carreras y sólo necesitamos que los rivales tengan una mala carrera porque así todo cambiaría completamente. Debemos seguir apretando", señaló.