Fue protagonista de memorables combates en las décadas del '40 y el '50. Sus peleas frente al mítico José María Gatica fueron un clásico de la época. El rosarino, símbolo del boxeo nacional, murió a los 83 años.
Alberto Sánchez - asanchez@ellitoral,com
Hace unas semanas, a los 83 años, murió Alfredo Esteban Prada, campeón argentino de los livianos durante casi una década y protagonista de históricos duelos con José María Gatica.
Hijo de un trabajador ferroviario, séptimo de nueve hermanos, nació el 10 de marzo de 1924 en Rosario, pero a los pocos días su familia se trasladó a Villa Constitución, localidad donde fue anotado.>
A los ocho años sufrió un accidente, y se pasó los cinco siguientes enyesado desde el tobillo derecho hasta el hombro. Cuando le quitaron el yeso era difícil aventurarle un futuro de deportista: su pierna derecha era seis centímetros más corta que la izquierda. La natación fue la actividad que sus hermanos Ángel y Carlos le eligieron para que se recuperara.>
Pero el "boxeador" nació una tarde en la que encontró a una chica que le gustaba, mirando el afiche de una pelea: "Pensé que si me veía sobre un ring podía fijarse en mí", recordó más de una vez.>
Al poco tiempo llamó la atención con su técnica y su disciplina en el gimnasio. Con un equipo santafesino fue a pelear a Buenos Aires; después se mudó a Pompeya y pasó a entrenarse en el Almagro Boxing Club, gimnasio encabezado por los ya míticos Prudencio Melero, El Gallego Valcarce y Desiderio Ferrari.>
Deportista ejemplar
Símbolo del profesional serio y concentrado, el "Cabezón" decía: "Después de cada pelea, un tecito, un baño de inmersión y a descansar, que al cuerpo hay que cuidarlo".
A fines de los "40 se fue a pelear a Estados Unidos, donde se entrenó en el mismo gimnasio que Ray Sugar Robinson y Rocky Marciano. En 1949, peleó con Charles "Cabey" Lewis, Willy Beltran, Arthur King, Sony "Boy" West y George Dunn.>
El 2 de junio de 1951, protagonizó el primer combate por un título mundial que tuvo el Luna Park, pero perdió por nocaut con el campeón estadounidense Sandy Saddler con un gancho al hígado: "Me dejó colgado de las sogas, mirando hacia la primera fila, donde estaba el General Perón: un monstruo", dijo luego.>
Estuvo todo el año siguiente sin pelear, pero en el "53 hizo 23 peleas. El 17 de noviembre de 1956, y después de una seguidilla de 44 triunfos, expuso el título sudamericano ante el chileno Andrés Osorio, a quien superó ampliamente, luego dejó el boxeo.>
Fue distribuidor de vinos y dirigió varios negocios, incluyendo la famosa cantina "K.O.", de Paraná y Sarmiento, donde también estuvo Gatica. También fue empleado del Congreso de la Nación. >
Tal vez uno de los golpes más duros que sufrió fue cuando murió su esposa, la que para él siempre fue "mi novia". Además de haber sido un muy buen boxeador, dotado de un extraordinario temperamento, fue un jefe de familia ejemplar, pero en los últimos diez años la muerte de su compañera de toda la vida y madre de sus hijos lo llevó a una pena intensa y permanente que sólo sienten aquellos que, como él, amaron de verdad. Tranquilo y en silencio, murió en su barrio de Núñez. Prada sabía lo que significaba para la gran historia del boxeo argentino, aunque jamás le interesó proclamarlo ni mucho menos exhibirlo.>
"El Cabezón" fue un ejemplo de vida y con él se fue un pedazo de la historia grande del boxeo argentino.>
Con Gatica, un clásico del box
Alfredo Prada y José María Gatica se midieron seis veces y quedaron tres a tres, con dos encuentros como amateurs (ganó uno cada uno) y el resto como profesionales.
El primero como rentados tuvo como escenario nada menos que el estadio Luna Park. Fue el 31 de agosto de 1946 y el "Mono" se impuso por puntos.
El 12 de abril del año siguiente Prada "empardó" la serie con un contundente nocaut técnico en el sexto round, algo que Gatica remediaría el 18 de setiembre de 1948 con otro triunfo por puntos, siempre con la esquina de Corrientes y Bouchard como albergue del multitudinario espectáculo que generaban, tal es así que los miércoles (día en que se enfrentaban) el cartelito de "No hay más localidades" ya era una costumbre.
Prueba de ello, en la última, el 16 de noviembre de 1953, hubo más de 23.000 personas, y otras cinco mil se quedaron afuera. Fue nocaut en el sexto y Prada retuvo el título argentino que tenía desde el "47.
Gatica era un intuitivo, ágil y eficaz; convocaba el fervor de la popular, aunque nunca fue campeón. Prada, más emparentado con los seguidores del ring side, llegó a ser titular sudamericano.
Alfredo Prada realizó 97 peleas, ganó 79, 36 por nocaut, perdió cinco y empató 13. Fue campeón argentino y sudamericano en la categoría liviano.
En la vida profesional de Prada, Gatica fue la clave para que su apellido quedara en la historia, pues solamente alguien de su calibre era capaz de achicarlo al "Mono": "Yo lo enfrentaba en el ring y sicológicamente, él sabía que yo no le tenía miedo alguno y eso le complicaba todo", decía.
Cuando Gatica la pasó mal, Prada fue el que le tendió una mano. Lo puso de maitre en su restaurante. Justo él, que había sido el rival más duro. Un clásico arriba y abajo del ring, porque cuenta la leyenda que en algunas oportunidades se agarraron a las trompadas en la calle, siguiendo con esa vieja tradición que los llevó a escribir una de las grandes leyendas del boxeo argentino.
Su alma viajó al cielo, seguramente para continuar esta serie con Gatica hasta la eternidad, porque el boxeo no los va a olvidar nunca.
