En General Lagos, frente a la planta de Dreyfus, los dirigentes de la entidad anunciaron un plan de lucha nacional, que incluirá la convocatoria a otras entidades. "Los productores se niegan a trasladar el valor internacional del trigo al mercado interno", afirmó Barchetta.
Corresponsalía Rosario
La Federación Agraria Argentina (FAA) realizó hoy al mediodía una protesta frente a las terminales portuarias del Gran Rosario, donde los dirigentes del sector lanzaron fuertes cuestionamientos a la política del gobierno nacional, y anunciaron un plan de lucha, que incluirá la convocatoria a otras entidades para que se sumen al reclamo.
El epicentro de la protesta se llevó adelante sobre la Ruta 9, frente a la planta de Dreyfus, en General Lagos, donde los dirigentes de Federación Agraria Argentina realizaron una asamblea en la que participaron más de 250 agremiados a esta institución, que se constituyó en la primera protesta contra la gestión de Cristina Fernández de Kirchner.
Las movilizaciones y concentraciones comenzaron cerca de las 11.30 en los puertos del Gran Rosario, que se extienden desde Timbúes hasta Villa Constitución, donde se desarrollaron diversos actos de protesta, que en algunos casos impidieron la entrada y la salida de camiones a las cerealeras.
Omar Barchetta, vicepresidente de FAA, explicó hoy a El Litoral que la protesta que se realizó frente a Dreyfus apuntó sus cañones a cuestionar al gobierno nacional por el cierre de la exportación de trigo hasta el 8 de abril. "Esta gestión no encuentra una solución a este problema, y lo que hace es tratar de enfrentar a los productores y a los consumidores. Actualmente, con estos precios el productor de trigo pierda alrededor de 30 pesos por quintal, lo que hace inviable este tipo de cultivo", afirmó Barchetta. En ese marco, el dirigente federado señaló que "los productores se niegan a trasladar el valor internacional del trigo al mercado interno".
Por su parte, Eduardo Buzzi, presidente de la entidad, aseguró: "nosotros queremos que todos los argentinos tengan en su mesa trigo, leche y carne, pero la crisis ganadera se profundiza y, lo que es peor, se concentra y desaparece el pequeño y mediano productor ganadero. Ahora comienza un proceso de protesta que deberemos consensuar con instituciones colegas, para llegar a una protesta nacional y contundente como para cambiar esto que hasta ahora es dialoguismo, pero cada vez con más empeoramiento para la situación de los productores".
Plan de lucha
El vicepresidente de Federación Agraria Argentina consideró que tras el acto que se realizó en los distintos puertos del Gran Rosario la organización que conduce Buzzi convocará a otras instituciones del sector para que unifiquen la protesta contra el gobierno nacional. "Vamos a comenzar a conversar con las demás organizaciones para plantear una protesta nacional a corto plazo", sostuvo Barchetta.
El dirigente agrario advirtió que "el descontento no es sólo por el cierre de las exportaciones de trigo, sino también la política desastrosa que esta gestión lleva adelante con el sector cárnico y lácteo".
Barchetta dijo que la relación con el sector agropecuario se tensará más si se concretan los rumores que corrieron hoy sobre un posible nuevo incremento de las retenciones a la exportación de soja, que -según el dirigente- sería del 10 por ciento.
De acuerdo a un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, en la campaña 2007/2008, las retenciones a las exportaciones agrícolas le dejarían al fisco unos 7.181 millones dólares. Pero esta cifra no incluye las posibles subas a este tributo, por lo que si se concreta un incremento la recaudación podría superar los 8 mil millones. Esa cifra representa más del 10 por ciento de los ingresos impositivos totales que tiene previsto recaudar el Estado para el año próximo.
