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Maia Zentner tiene 11 años y empezó el 7mo. grado en la Escuela Bialik de nuestra ciudad, institución que propone no perder de vista el origen de las familias que concurren allí. Por este motivo, todos los años, la docente Rosita Fridman los incentiva para indagar sobre sus antepasados.
En esta primera nota ofrecemos un resumen de la investigación realizada por esta alumna, cuyo bisabuelo era José Zentner, de origen ruso, quien llegó a la Argentina a principios del siglo XX y se instaló en el pueblo entrerriano de Basavilbaso.
Maia contó que su bisabuelo -hijo de Jana y Enrique Zentner- trabajó como maestro de escuela, entre otras ocupaciones, motivo por el cual daba discursos que ella conserva "porque son documentos que forman parte de mi pasado", aseguró.
Uno de ellos lo ofreció en 1926, con motivo de la celebración de los 16 años de trabajo de la Sociedad de Damas de Basavilbaso. En él se puede leer una parte referida a la inmigración de tantas familias israelíes: "La inmigración había tomado mayor incremento a consecuencia de las anormalidades bélicas que habían empezado a hostigar al continente europeo. Eran atraídos por la liberalidad de sus leyes en general y la de la inmigración en particular. Además, por la existencia de agricultores israelitas colonizados por la filantrópica obra del Barón Hirsch sobre el suelo argentino".
Y continuaba: "La mayoría de aquellos inmigrantes que huía del espectro de la guerra a duras penas conseguía trasponer el océano por lo limitado de sus recursos pecuniarios y era corriente ver llegar familias numerosas sin tener albergue ni alimentos desde el primer día de su desembarco, cuya anomalía dio más razón de ser y apremió la intervención caritativa de la Sociedad de Damas Israelitas de Caridad en favor de los desolados inmigrantes, a los que proporcionaba hospedaje y manutención, hasta que se orientaban para poder ganar la subsistencia por su propio trabajo".
En otra parte del discurso, agregaba: "Es sin dudas muy loable todo lo que ha hecho y hace la Sociedad de Damas diariamente a impulso e inspiración de los sentimientos altruistas rebosantes en el espíritu filantrópico inherente a las vibraciones misteriosas y divinas del alma material, blasón providencial y nobiliario de la mujer, madre del mundo".
En el trabajo, la alumna explicó que "luego de que José se adaptara al lugar, aprendiera el idioma, concurriera a la escuela y aprendiera las tareas del campo, trabajó en una empresa cerealera llamada Bunge y Born. También fue maestro en una escuela primaria. Como maestro ofreció discursos, que hoy guardo como documentos, que forman parte de mi pasado. Luego se casó con Rosa Gorban y tuvieron 11 hijos, el menor de los cuales es mi abuelo, Janino Zentner. Falleció en 1943 y fue sepultado en el cementerio israelita de Basavilbaso".
En relación a su abuelo Janino, contó que nació en 1931 en Basavilbaso y cuando tenía 12 años falleció su padre. Por este motivo, se vino a vivir con su madre a Santa Fe, adonde ya residían sus hermanos mayores. Luego de terminar el colegio secundario trabajó en una empresa metalúrgica en Santa Fe. Después de unos años trabajó en la farmacia de su hermano mayor, Manuel, donde aprendió la profesión de la cual trabajó el resto de su vida en forma independiente.
Y continuó: "Cuando iba al colegio secundario conoció a Leontina Rosenstein, y en 1962 se casaron. Al año siguiente tuvieron a José Zentner (mi tío), en 1964 nació mi papá, Sergio Zentner. Cuando era chico iba a la Escuela Belgrano, le gustaba jugar al básquet y al fútbol. Janino falleció el 22 de septiembre de 2005 y fue sepultado en el cementerio Israelita de Santa Fe".
Sobre su papá, aseguró que "era fanático de Colón; siempre iba a la cancha con su hermano y sus amigos. Luego estudió Ciencias Económicas, trabajó en la administración de una empresa constructora, y después fue a trabajar con su padre. En 1992 conoció a Susana Mazover, luego de ocho meses se casaron. En 1994 tuvieron a Josefina Zentner (mi hermana mayor), quien el 14 de mayo de 2007 cumplió 13 años. Después, en 1996 me tuvieron a mí. Empecé el jardín cuando tenía un año y 6 meses. El 24 de junio de 2007 cumplí 11, voy a 6° grado".
Otra parte del trabajo incluye una entrevista a su tío Marcelo Zentner para conocer más a fondo sobre la llegada de la familia Zentner a la Argentina. "Enrique Zentner, tu tatarabuelo, llegó al país en 1894, pleno período inmigratorio. Vino de Rusia con su padre Abraham y sus hijos. Uno de ellos era José, tu bisabuelo. Se dirigieron a Entre Ríos. Por otra parte, tu bisabuela, Rosa Gorbam, también originaria de Rusia (Jarson, actual Odesa) llegó en 1898 y se trasladó a La Pampa. Luego se fue a Basavilbaso, adonde se conoció con José y se casaron. José y Rosa tuvieron 12 hijos", comentó.
Y continuó: "Enrique y su padre Abraham se dedicaron a las actividades agrícolas. Gracias al aporte y solidaridad de los primitivos habitantes del lugar (criollos) aprendieron tareas vinculadas con la agricultura. Llegaron a la Argentina escapando de los progroms. Como todos los inmigrantes de aquella época llegaron en barco".
El tío de Maia también le contó que "fui a la escuela Zapiola en Basavilbaso, hice hasta 6° grado y la secundaria la hice en Gualeguaychú en la Escuela de Comercio. Al año siguiente tuve que dejar mis estudios por el fallecimiento de José, mi papá. Dejar mis estudios fue algo que lamenté. A partir de ese momento volví a Basavilbaso y me incorporé a trabajar con mis hermanos mayores. En 1945 mi hermano Manuel me llevó a Rosario para poner una farmacia, proyecto que fracasó y por eso me vine a Santa Fe. Aquí retomé en forma libre mis estudios y comencé a trabajar en la entonces farmacia Cardozo. Dicho trabajo me permitió forjar mi futuro en este rubro.
Maia Zentner agregó en su trabajo "una de las anécdotas que va de generación en generación: cuando mi bisabuela Raquel tenía que venirse de Polonia, mi tatarabuela le puso en su valija dos candelabros. Mi bisabuela los sacaba y su mamá se los volvía a poner en la valija. Finalmente, muy escondidos en el equipaje cruzaron el océano sin que mi bisabuela supiera. Pero ya en Argentina, los candelabros fueron utilizados para recibir cada Shabat. Y hoy en día los tengo guardados".
La investigación también incluyó datos sobre el bisabuelo Samuel, quien vino de Rusia junto a sus padres Sofía y Moisés, y sus hermanos Isac, María, Jacobo, Aída, Berta y Moisés. Se instalaron en la Colonia de Monigote.
Samuel tenía 5 años cuando llegó a la Argentina. Fue a una escuela del pueblo hasta el 2do. grado. Fue creciendo y aprendió las tareas del campo. Conoció a Fanny Gamurar, se casaron en Palacios, un pueblo cerca de esa colonia, y tuvieron tres hijos: Mauricio, Ester y Leontina. Samuel falleció en 1978 y fue sepultado en el cementerio Israelita de Santa Fe.
Mauricio estudió Medicina y cuando se recibió se casó con Sara y tuvieron dos hijos: Hada y Silvia. Mauricio falleció en 1999; Ester nació en 1924, estudió para ser maestra, y se recibió. Se casó con Enrique Kleiman y tuvieron un hijo: Alberto. Por último, Leontina (abuela de Maia) y nació en 1930 y cuando era chica vivía en Villa Trinidad con sus padres y hermanos. Iba a la escuela N° 416 y luego se vino a vivir a la provincia de Santa Fe. A los 12 años fue a la Escuela de Comercio. En 1962 se casó con Janino Zentner. Tuvieron dos hijos: Sergio y José. Trabajó en la escuela hasta jubilarse.
Maia Zentner también dedicó parte de la investigación a indagar sobre sus orígenes por parte de su madre. "En 1900 nació, en un pueblito de Polonia llamado Glebokwe, Raquel Bawer, mi bisabuela, quien vivió durante la Primera Guerra Mundial, donde fallecieron muchos de sus familiares. En 1922 se casó con Samuel Feigelson, con quien tuvo en Polonia dos hijos: Ernesto y Josefa. Unos años más tarde mi bisabuelo se vino a la Argentina en busca de progreso. Luego llegó mi bisabuela y juntos en Santa Fe lucharon y trabajaron duro".
Y continuó: "Mi bisabuela Raquel cosía en una máquina Singer, que todavía conservamos, y mi bisabuelo vendía ropa. En Argentina tuvieron tres hijos más: Natalio, Ema y Elías. Todos se fueron adaptando a esta tierra trabajando y estudiando, para emprender distintos rumbos. Mi abuela Josefa se casó con Juan Marover y se fueron a vivir a Ceres. Allí mi abuelo trabajaba junto a su familia en la barraca y en la fábrica de jabón. A los dos años se trasladaron nuevamente a Santa Fe, adonde nació Susana Mazover, mi mamá".
Por último, contó que "Susana nació el 15 de enero de 1961. A los 4 años comenzó el jardín de infantes en la Escuela Normal. Por la tarde iba al Shule a estudiar hebreo. Fue creciendo y estudió en Paraná en la facultad para luego ser profesora. En 1983 comenzó a trabajar en la Escuela Bialik como maestra, hasta 1996. En 1992 conoció a Sergio Zentner, mi papá, se casaron y tuvieron a Josefina (mi hermana) y a mí. El 4 de febrero de 1972 falleció mi abuelo Juan Mazover y Josefa en 1992. Ambos fueron sepultados en el cementerio Israelita de Santa Fe, al igual que mi bisabuela Raquel Bawer, quien murió en 1987".
textos de Mariana Rivera