Información General: INFO-09 Inician los alegatos por el doble asesinato de Santiago del Estero

Télam

El juicio oral por el denominado "Doble crimen de La Dársena" continuaba hoy en los tribunales santiagueños con los alegatos de la defensa del ex jefe de inteligencia provincial Antonio Musa Azar y de uno de los policías imputados.

La audiencia comenzó con el alegato del defensor oficial Enrique Díaz, quien representa a Musa Azar, y luego iba a ser el turno de los abogados del efectivo Daniel Mattar.

La fiscal de juicio Olga Gay Castellano ya solicitó que Musa Azar, Mattar, otros dos policías, Pablo Gómez y Héctor Albarracín, y el carnicero José Patricio Lludgar sean condenados a prisión perpetua por el crimen de Patricia Villalba.

En tanto, el viernes pasado la fiscal pidió ante la Cámara del Crimen de II Nominación de Santiago del Estero la absolución por el beneficio de la duda o inexistencia de pruebas para ocho de los imputados por delitos menores, entre ellos el ex diputado provincial Carlos "Pololo" Anauate y la esposa de Musa Azar.

Para la fiscal, no quedó acreditado que Anauate, quien estuvo varios meses preso e incluso fue destituido como legislador provincial por esta causa, haya encubierto el crimen de Villaba.

Lo mismo solicitó la fiscal para el primer instructor de la causa, el comisario Luis Cejas, quien estaba acusado no sólo de encubrimiento, sino también por incumplimiento de los deberes de funcionario público.

Cejas fue el primer investigador del doble crimen y siempre mantuvo la hipótesis de que crímenes tanto de Leyla Nazar, como de Patricia Villalba, habían sido obra del carnicero Llugdar.

Otro policía por el que Gay Castellano solicitó la absolución por el beneficio de la duda fue Diego Pablo Sonzogni, quien llegó a juicio acusado de adulteración de instrumento público, por un acta relacionada con la desaparición de Leyla.

Eximición de pena

Respecto de la esposa de Musa Azar, Marta Cejas, la fiscal pidió "la eximición de pena", ya que según explicó, "nadie puede ser obligado a declarar en contra de un pariente".

Cejas había llegado al juicio acusada de encubrimiento agravado y ocultamiento de pruebas.

Lo mismo solicitó para Mario Leopoldo Corvalán, un peón de la reserva de Arraga, donde según la pesquisa Leyla fue descuartizada.

La fiscal consideró que el accionar de Corvalán, quien estaba imputado por encubrimiento agravado y ocultamiento de prueba, "obedecía a conductas bajo amenaza de su patrón" Musa Azar.

Gay Castellano también instó por la absolución del dueño y de un mozo del boliche Saravah donde, según una de las hipótesis de la investigación, Leyla estuvo la noche de su desaparición.

Se trata del comerciante Daniel Eduardo Moukarzel, quien estaba acusado de coacciones agravadas por supuestas amenazas a sus empleados para que no mencionen la presencia de Leyla, y del mozo Javier Juárez, a quien imputaban por encubrimiento agravado.

La fiscal también solicitó la absolución, por inexistencia de prueba, de Ramón Alberto Palacios, un testigo que en declaraciones periodísticas dijo cómo habían asesinado a Leyla en una fiesta en la localidad de Guayamba, otra pista seguida por la instrucción.

Gay Castellano explicó que en el debate quedó acreditado que Palacios formuló dichas declaraciones "en estado de ebriedad".

El caso comenzó la madrugada del 16 de enero de 2003, cuando Leyla Nazar (23) se encontró con una amiga, Cristina Juárez, se dirigieron a una whiskería y luego la primera participó de una fiesta de sexo, alcohol y drogas en un lugar no determinado.

Según dijo la fiscal de juicio, Leyla mantuvo relaciones sexuales con Musa Azar hijo y Lludgar, y luego les dijo que tenía sida, razón por la cual la mataron; por ese motivo, ya reclamó para cada uno una pena de 13 años de prisión.

Luego, según la pesquisa, el cadáver fue llevado a la reserva ecológica de Arraga, propiedad de Musa Azar, descuartizado y arrojado a la jaula de animales depredadores.