Mario Segovia

Procesado por contrabando de tóxicos

DyN

El empresario rosarino Mario Segovia, detenido en la investigación que lleva adelante el juez federal de Zárate-Campana Federico Faggionato Márquez por tráfico de efedrina, sumó ayer un nuevo procesamiento con prisión preventiva en otra causa por presunto contrabando de sustancias tóxicas utilizadas en armas químicas.

La medida fue dictada por el juez en lo Penal Económico porteño Ezequiel Berón de Astrada, quien además trabó un embargo de 200.000 pesos sobre los bienes de Segovia, conocido como el “Rey de la efedrina” y considerado el mayor proveedor de esa sustancia a carteles mexicanos.

La causa que lleva adelante Berón de Astrada se inició en 2006, cuando en la Aduana de Ezeiza encontró un bulto sospechoso proveniente de un laboratorio francés que -según se determinó luego- contenía aconitina y ricinina, sustancias altamente tóxicas que se utilizan en armas químicas.

Sobre la ricinina, un informe de la Universidad de Buenos Aires (UBA) la define como “un alcaloide que genera convulsiones acompañadas por alteraciones electroencefalográficas en la corteza cerebral” y suele ser utilizada como plaguicida, mientras la aconitina como “uno de los venenos más violentos entre los conocidos”.

El paquete estaba a nombre de Héctor Germán Benítez, sobre quien se inició la causa. Sin embargo, luego se determinó que el nombre correspondía a un preso del penal de Sierra Chica, cuya identidad había sido usurpada por Segovia, quien fue detenido el 25 de noviembre pasado por orden de Faggionato Márquez.

Este es el tercer procesamiento que recibe Segovia, quien permanece detenido en el complejo penitenciario Federal de Ezeiza. El 12 de diciembre Faggionato lo procesó en la causa por tráfico de efedrina. En tanto, el juez porteño Marcelo Aguinsky procesó a Segovia con prisión preventiva, al acusarlo de traficar efedrina a México.