CRISIS GLOBAL

Japón camina hacia su peor recesión desde la guerra

EFE

Con la mayor subida del desempleo en 42 años, el hundimiento de la producción industrial a nivel récord y la deflación como un riesgo real, Japón se encamina a una profunda recesión, quizá la peor desde el final de la II Guerra Mundial.

El gobierno nipón dio hoy a conocer datos muy desalentadores de producción industrial, desempleo, IPC y gastos de los hogares, peores de lo previsto, para una economía que ya está oficialmente en recesión y a la que se auguran tiempos todavía más difíciles.

Especialmente el resultado de la producción industrial, una caída del 9,6 por ciento (la mayor desde 1953) augura malos tiempos, pues significa que las fábricas niponas recortarán aún más su producción, con el consiguiente efecto en el crecimiento económico y el empleo.

Para enero, el gobierno prevé una caída del 9,1 por ciento de la producción industrial y algo menos, el 4,7 por ciento, para febrero.

La crisis global ha frenado las exportaciones de los gigantes nipones de la electrónica y el motor, que día tras día deciden recortes de producción y de empleo; el último de ellos Toshiba, que acaba de anunciar que despedirá a 4.500 trabajadores temporales.

El paro, de hecho, se situó en diciembre en Japón en el 4,4 por ciento, un índice bajo en comparación con países europeos como España, pero relevante pues ese mes subió nada menos que medio punto, el mayor repunte desde marzo de 1967.

En diciembre, 390.000 nipones se sumaron a las filas de los desocupados, que integran ya 2,7 millones de personas, pues las condiciones de trabajo “están empeorando de una forma que no tiene precedentes” a causa de la crisis global, según el ministro nipón de Economía, Kaoru Yosano.

Una encuesta del Ministerio de Sanidad divulgada hoy afirma que entre octubre y marzo, casi 125.000 trabajadores temporales habrán perdido sus empleos por la crisis global, pero analistas privados aumentan esa cifra hasta 400.000.

Diez meses de caída

En este escenario de crisis, el consumo ha seguido cayendo en Japón, por décimo mes consecutivo en diciembre.

Con respecto al mes anterior, el gasto de los hogares nipones se contrajo el 4,6 por ciento, dato que llegó a transformarse en 8,4 por ciento, en el caso del consumo de ropa y zapatos.

La crisis económica global, con su efecto en la caída de la demanda, caída de las exportaciones y apreciación del yen, ha devuelto además a Japón, un conocido fantasma: la deflación.