Durante la cumbre del G-20

EE.UU. y Rusia reducirán armamentos

El presidente ruso Dimitri Medvedev y su homólogo estadounidense Barack Obama harán la próxima semana una declaración conjunta sobre sus arsenales de armas estratégicas, un paso hacia la renovación de un pacto de desarme concluido al final de la Guerra Fría.

Tras uno de los peores períodos en las relaciones bilaterales desde la Guerra Fría, los dos presidentes se reunirán por primera vez al margen de la cumbre del G-20, prevista para el próximo 2 de abril en Londres.

“Terminaremos con dos declaraciones presidenciales, una general sobre las relaciones ruso-estadounidenses y otra sobre armas estratégicas ofensivas”, dijo el consejero de Medvedev para política exterior, Sergei Prijodko.

“Los textos están saliendo bien y deberían servir de punto de partida para preparar trabajos posteriores”, afirmó, citado por las agencias rusas.

Este consejero manifestó su esperanza de que ambos presidentes se pongan de acuerdo para renovar, en una reunión posterior a la del G-20, el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (Start-1), un pacto de desarme concluido durante el final de la Guerra Fría que expira en diciembre.

Ambas partes trabajarán “para que ya en la próxima reunión se puedan adoptar los primeros acuerdos concretos, y el trabajo esté completo hacia el final del año”, dijo Prijodko.

El tratado Start-1, firmado en julio de 1991 por el entonces presidente soviético Mijail Gorbachov y el presidente estadounidense George Bush (padre), preveía reducir de 9.986 a 8.556 el número de ojivas nucleares estadounidenses, y de 10.237 a 6.449 el número de ojivas soviéticas.

Las conversaciones para su renovación estuvieron estancadas bajo la administración del ex presidente estadounidense George W. Bush. Pero el gobierno de Obama, que quiere mejorar sus relaciones con Rusia, dice que la renegociación de ese tratado es una prioridad.

Según Prijodko, en la reunión de Londres los dos líderes podrían fijar una fecha para su próximo encuentro. “Espero que haya un anuncio sobre la fecha”, declaró.

Las relaciones entre Rusia y Estados Unidos se vieron gravemente afectadas debido a la guerra librada por Moscú en Georgia el pasado agosto, los planes de la administración Bush de instalar un escudo antimisiles en Polonia y la República Checa, la eventual ampliación de la Otan a países fronterizos con Rusia y la independencia de Kosovo, a la que Moscú se opuso firmemente.

Rusia espera que Obama renuncie a desplegar el escudo antimisiles en Europa central, que Moscú ve como una amenaza a las puertas de su territorio, en lo que durante décadas ha sido su área de influencia.