Desde el conflicto agropecuario

Aumentó la demanda de ayuda

social casi en un 20 por ciento

Lo dijo el ministro del área, Pablo Farías. Se trata de personas que perdieron su trabajo o vieron reducidos sus ingresos. La mayoría pertenece a los conurbanos de Santa Fe y Rosario, a los departamentos del norte y a la costa. Piden desde útiles escolares hasta alimentos.

De la redacción de El Litoral

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El ministro de Desarrollo Social, Pablo Farías, reveló que desde el conflicto agropecuario, las demandas a las reparticiones que dependen de su cartera aumentaron casi en un 20%.

“Desde que la situación económica y productiva de la provincia cambió, que para nuestra evaluación fue a partir de abril del año pasado como consecuencia del conflicto agropecuario, venimos observando una demanda creciente en las distintas dependencias no sólo en la provincia, sino en las comunas y municipios. Hay mayor demanda de ayuda social de todo tipo, desde bienes como puede ser indumentaria y útiles escolares, hasta alimentos. Y si anualizamos la estadística, esta demanda se ha incrementado entre un 18 y 20 por ciento, según las localidades y regiones de la provincia”, dijo el funcionario.

Consultado por El Litoral, Farías aclaró que el territorio tiene “situaciones muy dispares”, pero puntualizó que el problema golpea con más fuerza en las regiones donde la situación social es crítica de por sí: los conurbanos de las dos grandes ciudades -Santa Fe y Rosario-, algunas localidades del norte provincial y los departamentos de la costa.

“Estas son las zonas en las que notamos que la demanda ha crecido. Evidentemente, las personas que han visto reducidos sus ingresos o perdido su fuente laboral recurren a la asistencia pública, porque no tienen otra forma de resolver sus problemas”, dijo el ministro.

Gabinete de crisis

Ayer, como todos los martes, volvieron a reunirse los ministros del gabinete que semanalmente analizan la situación social y evalúan medidas para mitigar los efectos de la crisis. En la ocasión se estudió particularmente el panorama de la cadena láctea.

“Hay una preocupación por el cierre de tambos y por las pequeñas y medianas empresas de la provincia que procesan la leche. Hay un reclamo de estas firmas para que el Estado les conceda una ayuda”, comentó Farías. El funcionario dijo que junto a sus pares de Producción y Economía estuvieron estudiando alternativas para auxiliar al sector, y comentó que también revisaron el esquema de obras públicas.

“Tenemos como premisa indicada por el propio gobernador no detener las obras públicas más allá de la crisis, porque todos sabemos que es generadora de puestos de trabajo”, sostuvo. Según expresó, están trabajando centralmente para evitar más pérdidas de puestos de trabajo. “Eso es algo que, lamentablemente, lo tenemos como amenaza diaria en medio de esta crisis”, dijo Farías.

Ingreso universal

El ministro confirmó que la provincia aspiraría a tener un ingreso universal, que permita unificar toda la asistencia social que se brinda, pero admitió que para ello es necesario un acuerdo con la Nación, que por ahora no existe.

“Como gobierno, tenemos la idea de que debiera unificarse en un ingreso básico toda la ayuda social que existe hoy. Lo que pasa es que la ayuda social hoy está divida entre lo que invierte la Nación por los planes sociales, lo que invierte la provincia y lo que aportan municipios y comunas. Evidentemente, por la modalidad de prestación que tienen los planes nacionales y la práctica que eso implica, no podemos contar con esos recursos para diseñar un ingreso único, que a esta altura sería imprescindible”, opinó. Por ahora, dijo que lo que se proyecta es sobre la base de los recursos provinciales y municipales o comunales, que son bastante “acotados”.

Farías dijo que una de las principales dificultades para poder llegar a un ingreso universal es la diversidad de padrones de beneficiarios que hoy reciben algún tipo de ayuda.

“Esto es parte del problema -admitió-. El ingreso único en realidad debería ser una política única nacional, porque nosotros no podemos reemplazar los programas nacionales, sí los provinciales. De todos modos, esto tendríamos que hacerlo de manera gradual, programada, y de acuerdo a las posibilidades presupuestarias. No es hoy una medida que pueda anunciarse”, aclaró.

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Para que no falte leche

La faltante de leche en polvo en los dispensarios de toda la provincia fue otro de los temas abordados ayer en la reunión del gabinete de crisis. Según contó a El Litoral el ministro de Salud, Miguel Ángel Cappiello, se discutió cómo hacer entre todas las reparticiones públicas que compran este alimento, para garantizar la provisión permanente.

“Generalmente, la escasez de leche es por la falta de provisión de la Nación, ya que nosotros desde la provincia no siempre tenemos un presupuesto asignado”, comentó.

Por eso, reveló que una de las alternativas que se analizan es poder comprar leche a la asociación que agrupa a pequeños productores tamberos de la provincia.

“Ya en su oportunidad quisimos comprarles, pero el problema es que no son proveedores del Estado, y por eso siempre ganan las empresas grandes. Entonces el ministro de la Producción (Juan José Bertero) ha traído una propuesta, que va a llevar adelante para darles elementos técnicos y capacitación a estos pequeños productores, porque solamente tienen que inscribirse para poder competir con las demás empresas”, explicó.

Según relató, la provincia estaba comprando el alimento a precios diferentes, “en algunos casos más caros y en otros más baratos. Pero estando en la provincia que es la cuenca lechera más importante de Latinoamérica, estamos trabajando para ver cómo, en un plazo no mayor a seis meses, logramos que la leche nunca falte en los lugares donde tiene que estar”, afirmó.

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Pablo Farías, ministro de Desarrollo Social de la provincia.

Foto: Guillermo Di Salvatore.