Lengua viva
Divagaciones sociolingüísticas
Lengua viva
Divagaciones sociolingüísticas
Evangelina Simón de Poggia
Seguimos preguntándonos por la relación entre lengua y sociedad. Uno de los intereses de la ciencia que las integra, la Sociolingüística, es describir la estratificación interna del sistema de lengua, ya sea llevando a cabo la descripción de cualquier grupo de idiolectos suficientemente homogéneos, ya sea comparando diferentes estratos existentes en la misma área o viendo la influencia de un estrato sobre cualquier otro existente en el contexto. Es lo que llamamos investigación de lenguas en contacto. El ejemplo más vivenciado por los usuarios de dicha situación de contacto es la que se presenta en dos comunidades parlantes que están en situación de frontera, por ejemplo: Argentina/Paraguay, Argentina/Brasil. En estos casos, la comunidad que se encuentra en ese espacio conflictivo suele avanzar hacia la formación de lo que se dio en llamar “supersistema”, es decir, un nuevo sistema conformado con la participación e integración de los sistemas de lengua que entran en contacto.
Otro interés de esta ciencia es, sin duda, poder dedicarse al estudio de los efectos de la sociedad sobre la lengua, teniendo en cuenta tanto el valor simbólico del signo lingüístico como el sintomático, es decir, el efecto de la sociedad sobre el signo, el cual puede afectar tanto al significado, por ejemplo a través de las “divergencias semánticas”, como al significante, a partir de los tabúes, eufemismos, etcétera.
Otra visión es abocarse al estudio de los efectos del sistema lingüístico sobre la sociedad. Aunque en este caso los resultados caerían más dentro de la sociedad que de la Lingüística; sin embargo, es mucho lo que la Sociolingüística puede aportar, en este aspecto, a la Sociología, al detectar qué aspectos del lenguaje producen cambios en la sociedad y de qué modo; por ejemplo, la alfabetización.
Un campo relativamente nuevo, en el que también ha comenzado a trabajar, ha sido su visión de la realidad total y de la influencia que ésta ejerce en los distintos ambientes (variedades) lingüísticos: la macrosociolingüística y la microsociolingüística. Mientras la primera fija su atención en la realidad total y su influencia en los distintos ambientes, la segunda se ocupa de los distintos ambientes lingüísticos que se articulan en aquella estructura básica.
Ciencias, nuevas ciencias, como la Sociolingüística, Psicolingüística, Neurolingüística, etcétera, son integradoras de espacios científicos que pueden interaccionarse y que obligan a adoptar una nueva mirada en pro de la búsqueda de un sentido trascendente sumamente enriquecedor y promisorio.