Para el año del bicentenario mexicano

Diego Rivera recobra su brillo

El mural de la historia de México del Palacio Nacional, una de las obras más ambiciosas del gran pintor, es sometido actualmente a un proceso de restauración que permitirá devolverle todo su esplendor en el 2010.

Agencia EFE

El mural de la historia de México pintado por Diego Rivera (1886-1957) en el Palacio Nacional de la capital mexicana es sometido a un proceso de restauración y conservación para devolverle su esplendor a tiempo para las celebraciones del bicentenario de la Independencia del país en 2010.

“Es una visión del México anterior y el actual, pero más que nada es una visión histórica de hechos y acontecimientos de movimientos sociales, y sobre todo la presencia del ser humano alcanzando la meta que es la libertad del trabajo”, indicó a EFE el coordinador del proyecto, Alejandro Morfín. Entre 1929 y 1951 Rivera pintó más de 274 metros cuadrados de murales en los arcos de la escalinata y el segundo piso del edificio, retratando la historia de México desde la época prehispánica hasta el siglo XX.

Morfín recordó que hacía años que no se llevaba a cabo “una intervención completa integral” sobre esa obra del famoso muralista mexicano, que dejó incompleta al morir en 1957.

Además de lo que es la pura restauración, los trabajadores del Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico y Mueble del Instituto Nacional de Bellas Artes (Inba) están realizando también el registro, el mapeo y el reporte actualizado de las condiciones en que se encuentra la obra pictórica.

“El muro poniente está desplomado”, por lo que un mural cercano sufre una gran acumulación de polvo, mientras que la pintura de la escalera es un fresco sobre muro directo, por lo que tiene grietas, oquedades y cámaras de aire, detalló el conservador.

En este último espacio, se está montando ahora un andamio de grandes dimensiones para llegar a la parte más alta de la pintura, entre otros trabajos de restauración y mantenimiento.

“Son recurrentes los problemas de las grietas, que crecen con los sismos, pero son situaciones inherentes a la obra mural; serán cicatrices posteriormente”, reconoció Morfín.

El objetivo del Inba es llegar a la conservación preventiva y tener un equipo permanente que siga la evolución del mural para atender de inmediato cualquier nuevo perjuicio. Mientras, esperan tenerlos listos y en todo su esplendor para 2010, año en que se celebra el bicentenario de la Independencia de México (1810) y el centenario de la Revolución Mexicana (1910-1917).

Diego Rivera recobra su brillo

Expertos del Centro de Conservación del Instituto Nacional de Bellas Artes de México realizan el trabajo sobre la obra de Diego Rivera, obra que el pintor dejó inconclusa en 1957, cuando murió. El mural, con el paso del tiempo, había sufrido importantes daños. Foto: Agencia AFP