Un mal que no cesa

Asaltado y herido en el Puente Carretero

Ocurrió anoche en la cabecera del lado Santa Fe. Un rufián interceptó a un ciclista a quien le robó una mochila. La víctima terminó con severas heridas cortantes en la cabeza. No es el primer caso.

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Tras el atraco, el joven quedó recostado sobre uno de los pilares del puente. Recibió la ayuda de un automovilista que detuvo su marcha y comenzó a pedir auxilio.

Foto: Gentileza Oscar Silvetti

 

Danilo Chiapello

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Otra vez el Puente Carretero -en la cabecera del lado Santa Fe- fue escenario de un brutal asalto a mano armada, el que terminó con un joven herido.

Todo ocurrió poco antes de la medianoche cuando por el lugar circulaba a bordo de una bicicleta, tipo todoterreno, Luis Guerrero, de 37 años, quien venía procedente de Santo Tomé.

Pero en el momento que pasaba a la altura del terraplén Irigoyen le salió al cruce un sujeto, el que portaba una escopeta de grueso calibre. Apuntándole a su cuerpo el rufián logró hacer detener la marcha del ciclista con quien comenzó un forcejeo.

A fuerza de golpes de puño y culatazos -en su mayoría propinados en la cabeza- el malviviente logró apoderarse de la mochila que llevaba la víctima, para finalmente darse a la fuga.

Es de hacer notar que el atraco transcurrió ante la vista de los numerosos y ocasionales testigos que pasaban por el lugar.

Así fue como un automovilista que advirtió la situación, paró su andar y descendió de su rodado para ir en auxilio del infortunado, el que ya estaba recostado sobre uno de los pilares del puente.

Quien se detuvo para ayudar al joven efectuó un disparo al aire, a modo de intimidación. Sin embargo, como respuesta recibió otro disparo que efectuó el malviviente mientras escapaba a la carrera en dirección hacia el Varadero Sarsotti.

Poco después, una unidad del Dipaes llegó al lugar y trasladó a Guerrero hasta el hospital Cullen donde se le diagnosticó heridas cortantes en cuero cabelludo, quedando internado en observación hasta la realización de nuevos estudios.

El caso quedó denunciado en la seccional 2da. que intervienen en el asunto por cuestiones de jurisdicción.

El caso anterior

Conviene recordar que lo ocurrido al joven Guerrero no es la primera vez que pasa. El caso más reciente remite al primer día de septiembre cuando, en el mismo lugar, fue asaltado y herido de bala un joven que venía a trabajar a nuestra ciudad.

La víctima resultó ser Carlos Alessio (35) quien recibió dos disparos de escopeta de manos de varios delincuentes que lo asaltaron para apoderarse de su bicicleta. El nombrado había salido desde su domicilio en la ciudad de Santo Tomé y venía con rumbo hacia su lugar de trabajo, la empresa Integral Aluminio, de calle Regis Martínez al 3000.

Al pasar por el lugar, varios sujetos se interpusieron en el camino e hicieron detener la marcha de la bicicleta. Dos de los individuos llevaban en sus manos sendas escopetas. Los delincuentes se ubicaron a los costados del trabajador que quedó acorralado. Con sus armas los rufianes le apuntaban a la cabeza.

Y fue en esta circunstancia que se escuchó el estampido de los disparos. Dos perdigonadas fueron las que se incrustaron en la humanidad de Alessio que cayó al suelo casi sin conocimiento. Mientras los autores del ataque escapaban a la carrera hacia el interior del Varadero.

Poco después Alessio ingresaba al hospital José M. Cullen en estado desesperante. Los médicos que lo recibieron le diagnosticaron heridas de arma de fuego en pierna y en tórax, debajo de la axila, lado derecho.