La presentó ayer la Presidenta
Reforma política sin consenso
Cristina minimizó la ausencia de la oposición en el acto, y aseguró que las internas abiertas vienen a “fortalecer” el sistema de partidos. “Es imposible ningún traje a medida”, aseguró, en respuesta a las críticas.
De la redacción de El Litoral
CMI/DyN
Sin la presencia de la oposición, un gesto al que calificó de “anecdótico”, la presidenta Cristina Fernández presentó ayer el proyecto oficial de reforma política y negó enfáticamente que la iniciativa sea un “traje a medida” para el kirchnerismo sino que apunta a “fortalecer” el sistema de partidos y a “cumplir con la palabra” de las fuerzas de todo el arco ideológico.
“Quienes piensan que se puede ganar una elección diseñando un sistema electoral desconocen el funcionamiento de la democracia. Es imposible ningún traje a medida”, señaló la Presidenta al presentar el paquete de iniciativas de reforma que propone, como uno de sus ejes, elecciones primarias, simultáneas y obligatorias para la consagración de candidatos.
La mandataria ponderó el proyecto como la “oportunidad” de cumplir con el reclamo de una mayor “participación ciudadana”. “Aborda una de las principales críticas de la ciudadanía no militante en el sentido de que todo se resuelve dentro de un cuarto o con el dedo de uno, de dos o tres personas”, justificó.
¿Habrá debate?
Aunque minimizó con ironías la decisión de las principales fuerzas opositoras de faltar al acto que se realizó en el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada, la Presidenta advirtió que el proyecto que el poder central comenzó a delinear como parte de la fallida mesa de diálogo en julio pasado es “perfectible”.
Esa afirmación, evaluaban ayer en el Gobierno nacional, apuntó a preparar el inicio de un debate parlamentario que el oficialismo se planteó como el último gran desafió político antes de la asunción, en diciembre próximo, de los nuevos legisladores, tanto como a generar posibles aliados para una serie de reformas que requieren de mayorías calificadas para su aprobación.
Para la sanción del proyecto que el Ejecutivo giró al Congreso, el oficialismo deberá reunir 129 votos en Diputados y 37 en el Senado.
Kilo y medio
La mandataria rechazó que el proyecto esconda el armado de un escenario electoral potencialmente positivo para su antecesor y marido, y, con un minucioso trabajo de archivo sobre las iniciativas presentadas por la oposición, buscó poner al descubierto que la reforma política figura en la agenda de las principales fuerzas con representación parlamentaria.
Para eso, mostró un libro con todas las iniciativas presentadas en el Congreso en los últimos dos años. “Este libro pesa un kilo y medio; si presentaron estos proyectos los deben haber considerado importantes. Todo el arco ideológico coincidía en proponer elecciones primarias obligatorias”, puntualizó.
Fue una salida para desacreditar la ausencia del radicalismo, la Coalición Cívica, Unión-Pro y el socialismo que rechazaron la invitación formal del Ejecutivo para participar del acto. Para compensar esas ausencias, el Gobierno se garantizó ayer la presencia del Gabinete nacional y de gobernadores, legisladores e intendentes justicialistas.




