Recordado jurista
Centenario del nacimiento del Dr. Walker E. Taboada
De la redacción de El Litoral
El 4 de diciembre de 1909 nació el Dr. Walker Edgardo Arturo Taboada, recordado jurista, docente y dirigente ruralista de destacada actuación en nuestro medio. Proveniente de tradicional familia paraguaya vinculada con el devenir histórico institucional de dicho país, como fueron las guerras de la Triple Alianza, con Bolivia y con la creación del Partido Liberal paraguayo, era hijo del médico sanitarista Dr. Eusebio Taboada y de Dña. Juana Schroeder. Radicado en nuestra ciudad, en 1937 se graduó como abogado en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional del Litoral.
Tras una breve actuación jurídica, orientó su profesión al ejercicio de la docencia en la Escuela Normal Superior General José de Santa Martín y en el Colegio Nacional Dr. Simón de Iriondo y en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional del Litoral, establecimientos donde dictó las cátedras de Historia y Formación Cívica, siendo siempre recordado con estima por sus alumnos, por las sustanciosas, amenas y coloridas clases que dictaba.
Casado con Dña. Laura de Iriondo Echegaray, se dedicó a la administración y tareas rurales de la estancia La Laura en Cululú; procuró el desarrollo de la lechería, incorporando en sus tambos la raza Holando Argentino, siendo uno de los pioneros de la inseminación artificial en la década del ‘70.
Preocupado por el crecimiento de todos los productores de la zona, confió en la acción mancomunada, por lo que creó la Cooperativa La Larga. Fue miembro del directorio de la Cooperativa La Angelita de Esperanza y síndico de la Unión de Cooperativas Limitadas San Carlos; también integró las comisiones directivas de la Sociedad Rural de Santa Fe y de la CAP, entre otras.
Caballero de bien, de trato exquisito y amable, cualidades que le permitieron cosechar amigos en todos los círculos de su actuación, gustó reunir a familiares y allegados en La Laura, dejando imborrables recuerdos de inolvidables jornadas de camaradería, donde hacía la veces de excelente anfitrión. Formó junto a su esposa una familia con firmes principios, basados en la fe católica y solidez moral, que hoy es prolongada en hijos, nietos y biznietos que lo recordarán en una misa a oficiarse en la Basílica de Nuestra Señora del Carmen, el sábado 5 del corriente, a las 19.30.
