La provincia trabaja en forma conjunta con municipios y comunas
Verifican la superficie ocupada
por las industrias santafesinas
Más de 55 mil metros cuadrados ocupados por fábricas en Rafaela no habían sido declarados -situación que hoy ya está regularizada- y 91.000 metros cuadrados -en proceso de regularización- en Venado Tuerto no estaban registrados.
De la redacción de El Litoral
A poco de finalizar el 2009, el Servicio de Catastro e Información Territorial de la provincia comenzó a trabajar en distintas localidades para analizar en qué medida la superficie ocupada por las industrias -ubicadas dentro y fuera de Parques y Áreas Industriales- coinciden con las que están registradas. Los primeros pasos se dieron en Rafaela y Venado Tuerto y ahora se está trabajando en el cordón industrial del Gran Rosario.
De esta recorrida se detectó que “más de 55 mil metros cuadrados que estaban ocupados por industrias en Rafaela no habían sido declarados -situación que hoy ya está regularizada- y 91.000 metros cuadrados -hoy están en proceso de regularización- en Venado Tuerto no estaban registrados. En total, estas cifras suman 146.000 metros cuadrados”, precisó Horacio Palavecino, subadministrador del Servicio de Catastro e Información Territorial.
Por estos dos casos, la provincia dejó de recibir $ 200.000 -a valores del año pasado, en concepto del pago del Impuesto Inmobiliario que debían abonar las industrias- de cada una de estas localidades, cifra que es coparticipable con los municipios y/o comunas.
A partir de esta experiencia que está dando sus frutos, “ya firmamos convenios con algunas comunas y municipios -Andino, Villa Cañás, Arroyo Seco, Fighiera, Oliveros, Baigorria, Villa Gobernador Gálvez, General Lago, Capitán Bermúdez, San Lorenzo, María Teresa, Santo Tomé, Las Rosas, Las Parejas, Venado Tuerto, Esperanza, San Justo y Coronda-, y en unos días, tienen previsto rubricar otros acuerdos con San Javier y Armstrong, que son las Municipalidades que manifestaron interés en trabajar sobre este tema, utilizando el mismo sistema informático”.
Al mantenerse una comunicación por Internet, “en cada localidad pueden ingresar los datos -utilizando un mismo software- y en pocos minutos, en el Servicio de Catastro e Información Territorial de la provincia los podemos ver”. Antes de que se implemente esta forma de trabajo, “nos manejábamos con papeles y recibiendo declaraciones -en papel- de cada municipio o comuna”. Por eso, muchas veces, “el incumplimiento de los propietarios en la falta de declaración de sus construcciones o reformas estaba más ligado a la ausencia de una comunicación fluida entre el municipio y la provincia, que provocaba esta desactualización de datos”, destacó Palavecino.
La responsabilidad primaria de “declarar las mejoras en su propiedad es del propietario y la ventanilla de recepción de esta información es la Municipalidad o comuna”. Pero, “si los gobiernos locales -por distintos motivos- no nos transmitían esta información, el propietario que “hizo todo de buena fe’ consideraba que había realizado sus trámites en tiempo y forma; sin embargo, después se encontraba con una deuda impositiva o que no tenía su situación regularizada en la provincia”.
Y aquí es donde comienza a entrar en juego “aquel propietario que es responsable y aquel que no lo es; y la gran responsabilidad de los municipios de ejercer el control de policía sobre su territorio”.
Metodología de acción
Con estas propuestas -destinadas a relevar los metros cuadrados construidos en distintas localidades- “se analizan las imágenes aéreas y las contrastamos con las que tenemos en nuestra base de datos. Cuando detectamos una mejora o una construcción no declarada, identificamos al propietario y le cursamos una notificación para que se acerque a la oficina de la Municipalidad o comuna y sea asesorado de cómo presentar el plano y formulario. Si el propietario no se acerca en la fecha y hora pautadas, hacemos una fiscalización en la propiedad y le pedimos que nos presenten los planos”, destacó Palavecino.
Por lo general, “tenemos buenos resultados y nos acercan la información”, ya que cualquier industria para ser habilitada tiene que presentar documentación en distintos organismos.
Si no contamos con estos datos, “no podemos obtener información precisa sobre la cantidad de industrias que hay en el ámbito provincial, lo cual no nos permite estimar el consumo de agua y energía y el uso de infraestructura y el consecuente no pago del impuesto inmobiliario y la inequidad tributaria que se produce”.
En el caso de que se verifique que hay superficies no declaradas, desde la provincia no se implementarán multas sino que se ofrecerán facilidades de pago para regularizar la situación.
