Manos siempre jóvenes

A menudo descuidadas, maltratadas y exigidas, las manos también merecen de algunos cuidados especiales para lucir impecables. ciertas prácticas que pueden tornarse en hábitos son saludables sobre todo en cada cambio de estación.

FUENTES. MUNDOBELLEZA.COM Y ENFEMENINO.COM. FOTO. EL LITORAL.

Aristóteles decía que la mano era el instrumento de los instrumentos. La parte más útil del cuerpo, instrumento del cerebro, de una estructura perfectamente adaptada a sus diferentes funciones.

Las manos son, además, la tarjeta de presentación de cualquier persona. La cara se maquilla, el pelo se moldea, pero las manos son el testigo directo no sólo de la edad sino del tipo de vida que uno hace. Con las manos no se puede disimular en un momento. Si no son bien tratadas en forma permanente, siempre lo demostrarán.

Así es como pueden mostrar un aspecto cansado, envejecido y desaliñado si no se les protege del uso y desgaste diario. En tanto, las uñas pueden ser una zona desastrosa si no reciben la atención necesaria. Es evidente que ninguna mujer de nuestros días puede dedicar varias horas cada semana al cuidado de sus manos, ni permanecer con ellas enguantadas o “mano sobre mano” para evitar su deterioro. Conscientes de esta realidad los laboratorios de cosmética han lanzado en los últimos tiempos tratamientos absolutamente eficaces, capaces de conseguir con unos minutos cada semana unas auténticas manos de ángel.

cada zona con su particularidad

Mientras que la palma de la mano es de estructura espesa y resistente, el dorso, por el contrario, tiene una epidermis fina y frágil que cuenta con escasas glándulas sebáceas . Estas características fisiológicas, similares a las del contorno de los ojos, explican su gran fragilidad y el hecho de que queden inexorablemente registradas en ellas el paso del tiempo y las agresiones que reciben: lavados frecuentes, detergentes, cambios de temperatura, carga de peso.

Con la edad pierden elasticidad, disminuye la grasa hipodérmica, se relajan los tejidos y aparecen manchas oscuras . Si no reciben los cuidados necesarios se secan, se deshidratan, y se vuelven ásperas y rugosas, envejeciendo en forma prematura.

TRATAMIENTOS

La hidratación de las manos es tan importante como la del rostro. Las cremas hidratantes de última generación son de textura ligera y se absorben inmediatamente sin dejar el mínimo rastro de grasa. Estos productos están enriquecidos con agentes calmantes y cicatrizantes que, además de reparar, actúan como un guante invisible de protección.

La crema de manos debe aplicarse regularmente todas las mañanas sobre las manos secas, masajeando suavemente hasta que el producto se absorba totalmente. Para una mayor efectividad, el masaje debe ser efectuado desde el extremo de los dedos hasta llegar al puño.

Una vez a la semana, antes de realizar la manicura, es conveniente aplicar una capa fina de una crema exfoliante para manos, dejándola reposar unos minutos hasta que el producto se seca ligeramente y frotando luego con suavidad para eliminar las pequeñas células muertas que afloran a la superficie. Después, enjuagar con agua tibia. Antes de aplicar la crema hidratante, es necesario que las manos estén bien secas.

UNA SOLUCIÓN A CADA PROBLEMA

Si las manos se presentan deshidratadas, será necesario aplicar una crema adaptada cada vez que se mojen (por tareas domésticas, lavado, etc.). Si no hay tiempo para cumplir con esta rutina, hidratarlas al menos dos veces al día, por la mañana y por la noche. Además, utilizar guantes de goma cada vez que se laven los platos o para realizar las tareas de la casa, así como guantes de lana o cuero para proteger las manos del frío en invierno. Conviene evitar el uso de secadores eléctricos en los baños públicos ya que resecan la piel.

A partir de los 35 años, es probable que aparezcan manchas oscuras en las manos. Es importante utilizar a diario una crema especial para protegerlas de los rayos ultravioletas, y aplicar tratamientos que permiten borrar los pigmentos de la piel. También se puede probar con mascarillas y exfoliantes inicialmente previstos para el rostro.

Si las manos se presentan agrietadas, además de utilizar una crema después del lavado se puede aplicar -en cantidad importante- un producto con alto valor de nutrición antes de acostarse, y dormir con guantes de algodón.

Con la edad las uñas pierden elasticidad, disminuye la grasa hipodérmica, se relajan los tejidos y aparecen manchas oscuras . Si no reciben los cuidados necesarios se secan, se deshidratan, y se vuelven ásperas y rugosas, envejeciendo en forma prematura.

.

MASAJES

Para activar la circulación se puede realizar un suave golpeteo con las cerdas de un cepillo sobre el dorso y los dedos. También se recomiendan movimientos circulares con la mano opuesta sobre el dorso y la palma, ejerciendo una presión leve y continua.

HUMECTACIÓN

Una buena crema de manos debe aportar suavidad. Para ello, es necesario que contenga sustancias emolientes, hidratantes y nutritivas, que restauren la protección externa que recubre la piel.

PRODUCTOS

Los aceites de almendras, de germen de trigo y lanolina aportan una acción calmante. Para suavizar también resultan adecuadas las ceramidas y el extracto de avena.

APLICACIÓN

Al aplicar la crema, ésta deberá extenderse fácilmente y absorberse sin dejar residuos grasos. Después conviene que sobre la piel quede una cutícula impermeable.