Ciclo 2010 de Cine Estudio
Wong Kar-Wai, el poeta de la imagen
La actividad comenzará mañana en el Cine Auditorio ATE, iniciando un repaso de la filmografía de Wong Kar-Wai. En la apertura se proyectará “As tears go by”, de 1989.
De la redacción de El Litoral
Mañana, Cine Club Santa Fe, con el apoyo de Asociación Trabajadores del Estado (ATE), inicia la edición 2010 del Ciclo Cine Estudio que se destaca por la presentación de ciclos temáticos y/o la revisión de clásicos y obras de autores poco conocidos que merecen su estudio. Se exhibe en Cine Auditorio ATE (San Luis 2854), los miércoles a las 20.30, con entrada libre para los socios de Cine Club y afiliados de ATE.
Se inicia la temporada revisando la obra de uno de los directores más destacados de Hong kong, Wong Kar-Wai: chino, de Shanghai, donde nació en 1958 y muy pequeño, se trasladó con sus padres a Hong Kong, donde vivió buena parte del resto de su vida.
Hong Kong y el mundo chino son el alimento de su mirada y esa ciudad pervive en la producción de imágenes, colores, turbulencias texturales, deformaciones de la narración, paralelismos, superposiciones y desplazamientos del sentido.
Dentro de la industria honkonesa, entre un cine mayoritariamente comercial, el director Wong Kar-Wai ha conseguido alzarse, con una visión poética de la vida, un llamado “poeta de la imagen que junto con su inseparable director de fotografía, el australiano Christopher Doyle ha devuelto al panorama cinematográfico una revisión postmoderna y oriental de aquel estilo de cine que ya practicó en los sesenta la nouvelle vague francesa, lo que naturalmente ha hecho que sea encumbrado por “Cahiers du Cinéma”, una de las revistas de cine más prestigiosas del mundo.
El estilo de dirección de Wong Kar-Wai requiere mucho de los actores. Rodando sin guión, el excelente autor chino obliga al reparto a estar a la altura de los personajes, y los constantes cambios en el argumento hacen que las películas tarden bastante en rodarse.
Para la banda de sonido dedica tiempo en la búsqueda de los acordes que cada historia requiere, transformándola en un recurso que se disfruta y mucho.
Trayectoria
Su primera obra, “Calles violentas” (“As tears go by”, 1989) que inicia el ciclo, recibió buena acogida de la crítica, si bien se considera todavía una visión algo más elaborada del cine de mafias orientales tan popular en el Hong Kong de los ‘80, aunque se admira la sensibilidad que ya mostraba el autor, que supo resistir bien las limitaciones impuestas por los marcos del género.
Su segunda obra, “Días salvajes” (“Days of being wild”, 1991) comenzó a forjar su estilo sensual de narración, mostrando una visión bellísima del Hong Kong de los ‘60, que recuperaría en “Con ánimo de amar” (“In the mood for love”, 2000) y “2046” del 2004.
Influenciado por cineastas como Godard o Cassavettes, ha desarrollado una carrera insólita, donde se ha dado el lujo de pulir una serie de obsesiones personales a lo largo de filmes generalmente laberínticos y, en su mayoría, improvisados sobre la marcha.




