Casa tiroteada en Santa Rosa de Lima

Por hijos en peligro, pide garantías

“Casi matan a mi nena de cuatro años”, dijo Liliana Gómez y agregó: “En Santa Fe, por unos pesos, cualquiera te manda a tirotear con los pibes, o te hacen cualquier barbaridad”.

José Luis Pagés

Redacción de El Litoral

Liliana Gómez y su esposo Eduardo Vázquez son viejos vecinos del barrio Santa Rosa de Lima, allí nacieron sus seis hijos y por eso mismo, asegura ella, por más que tiroteen su casa -como lo hicieron anoche-, no piensa cambiar de vecindario.

Liliana Gómez dijo en este diario que los proyectiles que partieron de dos armas diferentes fueron ocho, que seis de ellos impactaron en las paredes y otros dos ingresaron al comedor cuando la familia estaba reunida alrededor de la mesa.

“Uno de los tiros que rompió el vidrio de la puerta pudo dar en la cabeza de mi nena de cuatro años y no fue así porque alcancé a empujarla al suelo cuando uno de mis hijos gritó que los estampidos que escuchábamos eran balazos”.

La mujer contó que segundos después del ataque uno de sus hijos mayores protegió a la bebé que dormía en la cuna, mientras que al otro varón, que se asomó a la calle, “le hicieron otros disparos que por suerte no le pegaron a él, ni a nadie”.

Liliana y su esposo -camillero del Hospital Iturraspe- llamaron al 911 y enseguida la casa de Aguado 2666 estuvo rodeada de policías. Sin embargo, la mujer dijo que cuando se fueron los peritos junto a los últimos uniformados, se sintieron tan aterrados que pasaron la noche “sin pegar un ojo” en el patio de la casa, “por temor a un nuevo ataque”.

Nuestra entrevistada dijo que ella, como su esposo y sus hijos, desconoce quiénes fueron los atacantes, pero los calificó como “dos o más pibitos que usaron pistolas 22 y 32, según los peritos”. También dijo que no puede dejar de pensar que “éstos cumplieron un mandado”, porque anteayer tanto ella y como su esposo fueron amenazados después de mantener un altercado verbal con otra persona del mismo barrio.

Liliana -quien después de la intervención del 911 denunció lo ocurrido en la subcomisaría 2a.- cree que detrás del violento episodio podría haber un policía: “Nos amenazaron con ese policía”, dijo ella, quien agregó que por unos pesos “en esta ciudad cualquiera te manda a los pibes para que te tiroteen la casa o te hagan cualquier barbaridad ”.

Liliana y su esposo, Eduardo, reclamaron protección y la urgente captura de esos “pibes” y también la detención de “los que los mandaron a tirotearnos la casa”. La mujer dijo que la agresión armada bien pudo haber tenido origen en el incidente que sostuvo con algún vecino por problemas menores que hacen a la convivencia diaria, problemas que se pueden arreglar de otro modo porque, ya se sabe que, “hablando se entiende la gente”.