Atlético Tucumán igualó con Central y se fue...
Una despedida anunciada
Los tucumanos descendieron de categoría, mientras que Rosario Central sigue en Promoción, después de la igualdad entre ambos en dos goles.
Redacción de El Litoral
Télam
El regreso de Atlético Tucumán a la Primera B Nacional quedó sellado anoche, tres fechas antes de finalizar la temporada, al empatar de local 2 a 2 con Rosario Central, que consiguió al menos salvarse del descenso directo aunque parece difícil que también evite la Promoción.
Luis Rodríguez marcó los dos goles del decano tucumano, que siempre estuvo al frente del marcador, pero no supo defender la ventaja, mientras que Emilio Zelaya y Milton Caraglio establecieron la paridad de los rosarinos, que en el balance estuvieron más cerca de la victoria.
El empate condenó al descenso a Atlético Tucumán, que tuvo un fugaz paso por la máxima categoría y cuya alegría duró sólo 10 meses, aunque sus hinchas aceptaron este triste final, aplaudieron a sus jugadores y hasta lanzaron fuegos de artificio en los últimos minutos, cuando el equipo buscaba un milagro que nunca llegó.
El final encontró a los rosarinos con un sabor agridulce porque, si bien antes del partido habrían firmado un empate que los ponía a salvo del descenso directo, el desarrollo del cotejo le fue tan favorable que seguramente sus jugadores se lamentarán por la cantidad de oportunidades que desperdiciaron frente al arco defendido por Lucas Ischuk. El partido fue emotivo desde el comienzo porque Atlético, perdido por perdido, salió a quemar las naves, arrinconó a los rosarinos contra su arco y no tardó en conseguir el premio a su ambiciosa propuesta.
Apenas se jugaban dos minutos cuando Longo no pudo conectar un centro y la pelota le quedó dentro del área servida a Rodríguez, quien definió con un potente remate que superó a Galíndez y les devolvió la ilusión a los hinchas decanos.
Con el gol cedió la presión de los tucumanos y, a partir de ese momento, la pelota comenzó a ser patrimonio de Rosario Central, que poco a poco inclinó la cancha sobre el arco de Ischuk.
La paridad se caía de madura y llegó luego de un desborde de Caraglio, que envió un centro potente y bajo para Zelaya. El tucumano, que nunca jugó en los clubes grandes de la provincia, no falló y festejó con la tribuna visitante donde estaban los hinchas canallas y un gran número de amigos y familiares que fueron a alentarlo.
En el segundo tiempo no bajó la intensidad del juego y, aunque parecía que el visitante iba a tomar el protagonismo, una notable acción personal de Rodríguez les posibilitó a los dirigidos por Mario Gómez ponerse otra vez en ventaja.
Pero la reacción no tardó en llegar y Luciano Figueroa, en la primera pelota que tocó, asistió a Caraglio para que consiguiera la paridad, que fue el resultado final.




